Rodrigo Guerrero está pagando y a un costo muy alto el apoyo electoral recibido por la administración anterior en cabeza de Jorge Iván Ospina y a pesar de sus buenas intenciones, preparación y experiencia, sale con un desempeño muy regular de imagen pública en sus primeros 5 meses de gobierno. Todo por culpa de cuidarle la imagen al gobierno anterior.
La última encuesta revelada por el Centro Nacional de Consultoría y el Noticiero de TV CM& revela que el mandatario de los Caleños no está entre los 15 primeros Alcaldes del país y su imagen positiva tan solo está en un 57%, es decir que está perdiendo el año frente a sus conciudadanos.
A los 100 días de iniciado el gobierno, la comunidad también le dio una calificación baja, pero él en su alto nivel profesional desestimó su descenso público; posteriormente para amortiguar la caída de imagen, decidió abrir espacios a los periodistas de la ciudad mediante preguntas abiertas en las ruedas de prensa, para mejorar comunicación con los Caleños y ahora ha decidido reforzar sus equipos periodísticos orientados a estar cerca de la prensa.
Fue claro en reconocer que recibió un Municipio con la “olla raspada”, pero se quedó allí y ha tenido gravísimos problemas para atender los pagos necesarios en la administración y mantenimiento de las Instituciones Educativas; las Megaobras no le dieron movilidad a la ciudad y se han aplazado varias veces su terminación porque no hay plata para su feliz ejecución; la violencia no merma, pues los programas de prevención requieren gasto presupuestal; la salud sigue en cuidados intensivos; la vivienda no despega y a ello, hay que sumarle la deficiente operación del MIO en horas pico, en fin los planes han estado a cuenta gotas todo por la hemorragia financiera del alcalde anterior.
Es decir, el Alcalde Guerrero al no hablarle claro a los Caleños ni presentar el empalme respectivo sobre lo que pasó en el Gobierno anterior, que se hizo muy parcialmente a través de los Secretarios en el Concejo Municipal, está pagando un alto costo frente a lo que los ciudadanos piensan de él. Si bien es cierto que los funcionarios dejados como compromiso con Ospina ya salieron, los Caleños siguen desconociendo la verdad que ampliamente la conoce Guerrero y los correctivos de las irregularidades cometidas en los 4 años de Ospina no se producen.
Los temas complejos tienen que ver con la tendencia de los homicidios que no se quiebra y seguimos teniendo la tasa más alta del país, acompañada de un índice de desempleo e informalidad propios de ciudades tercermundistas y que le dan desafortunadamente a Cali ese protagonismo negativo, de tener tan preocupantes indicadores sociales. La importante presencia en Cali del Presidente Santos, ha dado señales de esperanza, pero los resultados no se observan en el corto plazo y ningún Ministro ha desarrollado propuestas de largo aliento para la ciudad, exceptuando al Ministro de Vivienda que con su programa de 100 mil viviendas gratuitas, le generará una “ilusión” a más de 100 mil familias que no poseen espacio habitacional para sus hogares, pero que en el fondo causará más problemas a la ciudad, porque los beneficiarios del regalo son pequeños frente a los que necesitan habitat.
Aún es hora de demostrar que los problemas estructurales que tiene Cali causados por los años de hemorragia financiera municipal, tienen solución y el Alcalde lo sabe. Solo se inicia su arranque si él es capaz de hablarle claro a los Caleños respecto a la administración que encontró; la gente no está contenta con su burgomaestre, ya va a completar 6 meses y los Secretarios siguen con el bozal. Por ello la única manera señor Alcalde, es gobernar con el retrovisor, so pena de seguir siendo castigado en su credibilidad pública- institucional, por sus conciudadanos.