Es evidente la crisis financiera por la cual atraviesa hoy por hoy la Secretaria de Educación, esto se ha visto reflejado en las continuas quejas y manifestaciones por parte de docentes, estudiantes y padres de familia ante esta situación. Si bien es cierto el cierre del Colegio Jorge Eliecer Gaitán fue la gota que rebosó la tasa y dio a conocer que las precarias condiciones sanitarias y de seguridad a causa de falta de recursos para la eficaz contratación de personal de aseo y vigilancia, es cierta y que esta situación estaba más grave de lo que realmente se murmuraba.
Ante este hecho el Secretario de Educación Raúl Antonio Salazar dio a entender a los medios de comunicación en una rueda de prensa que este mal momento que pasa su Secretaría, ha sido manipulada más que para conocimiento y propagación de lo que acontece con la educación, para crear molestias y repulsiones políticas con la labor del Alcalde Guerrero; puesto que el certificado de pago a los servidores de la educación oficial de la ciudad ya existía y había conocimiento previo de éste.
Pero no todo es malo a lo que educación se refiere, la Secretaría de Educación en un trabajo conjunto con la Fundación Gases de Occidente creó un Acuerdo el cual da vida al Programa Escuelas Lectoras como parte de un Plan Municipal el cual busca fomentar buenas prácticas durante la niñez, a través de actividades de promoción y comprensión lectora de los estudiantes de colegios públicos y sectores con menor favorabilidad económica.
“El Proyecto Escuelas Lectoras se caracteriza porque es un acuerdo inter institucional público- privado, que pretende mejorar los niveles de escritura y lectura de los niños y docentes. La primera cohorte tuvo 22 sedes educativas, la segunda cohorte incluyo otras sedes que suman 44 sedes más y cerca de 1000 docentes han trabajado en el proyecto y miles de estudiantes más se benefician con esta estrategia que mejora no sólo la calidad educativa, sino que se convierte en una herramienta para toda la vida” expresó el Supervisor Educativo Alberto Cabrera.
Este Programa ha logrado cobijar cerca de 5.500 niños y niñas, se espera sea un trabajo a largo plazo y cubrir el 100% de las Instituciones y sedes, para dar cumplimiento a la política pública de mejoramiento de la calidad y aportar a los proyectos de la Secretaría de Educación.
Durante este programa los niños y niñas podrán contar con una gran diversidad de libros, dinámicas y espacios lúdicos, donde los padres de familia también deberán ser parte de este proceso y aprender de la mano con sus hijos. Además por medio de éste se busca contribuir en la confianza y requisitos que exige las pruebas del saber.