Controles Ecológicos: Miremos, ¿cómo controlar las plagas?
Feromonas: Las feromonas son sustancias químicas oloríficas emitidas por los insectos que provocan una respuesta en otros individuos de su misma especie, ya sea sexual, de alarma, disuasorias, etc.
Las hembras emiten feromonas sexuales para atraer a los machos y reproducirse. Hoy se sintetizan químicamente las feromonas sexuales de multitud de especies que constituyen plaga: orugas de lepidópteros, larvas de coleópteros, dípteros, entre otros.
Las feromonas se emplean en la lucha contra las plagas de las siguientes formas:
1. Trampas para detectar precozmente la presencia de una plaga y controlar el crecimiento de la misma
Cada semana se ve los que han caído en la trampa atraídos por las feromonas y se anota el número. A un cierto número de capturas indica que la población ya es alta y es aconsejable tratar con productos, o no. Permite optimizar la aplicación de productos fitosanitarios: se usan sólo cuando la plaga empieza a ser preocupante y con capacidad de producir daños importantes.
2. Capturas masivas
La idea es controlar la plaga directamente atrapando una gran cantidad de machos e impidiendo así la reproducción.
3. Confusionismo
Consiste en saturar el aire con feromonas y los machos, confundidos, no logran aparearse. Las hembras no copuladas tendrán huevos inviables, reduciéndose de este modo la infección de la plaga.
• Las feromonas no afectan a los insectos predadores
• No dejan residuos contaminantes.
• Son inocuas para el hombre y los animales domésticos. No incorporan residuos tóxicos a los alimentos ni al medio ambiente.
4. Trampas cromáticas
Las láminas van cubiertas de un pegamento en el que quedan adheridos los insectos. Es una trampa especialmente interesante para aquellas plagas de las que por el momento no existen feromonas, pero se sienten especialmente atraídas por un color; siendo éste en ocasiones el único medio satisfactorio para poder hacer el seguimiento de la plaga.
La trampa de color azul se utiliza principalmente para Trips.
La trampa de color amarillo es para Mosca blanca y Pulgones.
5. Agua a presión (manguera)
Si hay muchas orugas en un árbol frutal se pueden tirar abajo con agua a presión usando una manguera. Luego puedes rodear el tronco del árbol con un trapo, muy cerca del suelo, y en el trapo poner grasa consistente, espesa. Las orugas no lo rebasarán y los pájaros se encargarán de acabar con ellas.
Sirve también para pulgones y en general para plagas. Antes de tratar con productos, somete a las plantas a una ducha con agua a presión.
5. Captura manual de insectos
En un huerto pequeño o en el jardín es un buen método de control el ir repasando las plantas y capturando a mano los escarabajos (por ejemplo, el Escarabajo de la patata), las orugas, gusanos, caracoles y babosas… éstos últimos en una noche húmeda o después de una lluvia. Todo lo que puedas quitar a mano es estupendo. También funciona un cuenco lleno de cerveza en el suelo para que caigan en él caracoles y babosas.
6. Podas de saneamiento
Elimina las partes fuertemente afectadas por una plaga o una enfermedad para que no se extienda el mal. Trata luego el resto de la planta con el producto más adecuado en cada caso.
Ejemplos: el hongo Seiridium que afecta a Ciprés, Macrocarpa y Arizónicas fundamentalmente, se debe cortar las ramas atacadas por la parte sana. O los Olmos con el hongo que produce la Grafiosis; es fundamental cortar lo infectado antes de que la savia lo distribuya por todo el árbol. El hongo Botritis (Botrytis cinerea), si no se quitan hojas y ramas podridas se propaga al resto de la planta. Etc.
Seiridium: podar las ramas infectadas
Grafiosis: podar las ramas superiores secas.
7. Lucha biológica
Las plagas tienen sus propios enemigos naturales, es decir, hay otros insectos que son sus depredadores o parásitos.
Estos valiosos colaboradores del jardinero y del horticultor deben protegerse y favorecerse. Con la lucha biológica se intenta aprovechar esta circunstancia de dos formas:
– Favorecer la presencia de los animales beneficiosos.
– Introducirlos artificialmente si llega el caso.
Los enemigos naturales o fauna útil o fauna auxiliar se agrupan en tres tipos:
Predadores: por ejemplo, la mariquita de 7 puntos que se come pulgones; el cienpiés y muchos escarbajos son depredadores de insectos perjudiciales; pájaros como el Tordo regula la presencia de caracoles, mientras que el Herrerillo come pulgones. Libélulas y Neurópteros también comen pulgones; sapos y ranas, insaciables insectívoros; erizos, musarañas, arañas se alimentan de muchas plagas que viven en el suelo, etc., etc.
Parásitos: por ejemplo, avispilla que pone huevos dentro de pulgones. La larva se lo va comiendo por dentro sin tocar los órganos vitales, lo parasita.
• Microorganismos: están más en estudio pero hay algunos comercializados. Son preparados de virus y bacterias que se rocían de la misma manera que un producto químico. Están compuestos de un patógeno y de alguna sustancia que lo mantiene viable.
Contiene esporas de una cepa natural del hongo Paecilomyces fumosoroseus. Este hongo entomopatógeno es muy eficaz contra las Moscas blancas (Trialeurodes vaporiorum y Bemisia tabaci), infectando todos los estadios (huevo, larva, pupa y adultos).
* Los resultados del control biológico a veces no son tan rápidos como se espera, ya que los enemigos naturales atacan a unos tipos específicos de insectos, contrario a los insecticidas que matan una amplia gama de insectos.
* El inconveniente es que comienzan a ser efectivos cuando el insecto-plaga es numeroso y ya ha causado daños.
* El control biológico es menos eficaz en un jardín que en un invernadero.
Consejos para potenciar la Fauna auxiliar
– Usa plaguicidas selectivos, que no sean tóxicos para los insectos beneficiosos o sólo ligeramente. Mejor: evita o reduce el empleo de plaguicidas químicos.
– Usa productos fitosanitarios de baja persistencia, es decir, cuyo efecto dure poco tiempo, por ejemplo, varios días. Esto afectará menos a los enemigos naturales de los alrededores y podrán volver a entrar en la zona tratada y sobrevivir.
– Aporta alimento complementario, por ejemplo rociando levadura y azúcar sobre la cosecha para mantener a los predadores polífagos como Crisopas, S írfidos y Coccinélidos cuando no abunden las plagas.
– Introduce enemigos naturales. Hay empresas, por ejemplo, Biobest S.A., que cría y suministra más de 20 especies de insectos y ácaros útiles para el control biológico de las principales plagas en invernadero.
– Otro método es la suelta de machos esterilizados. La esterilización se logra mediante radiaciones (rayos gamma) o con quimioesterilizantes. Una vez esterilizados se sueltan en la zona afectada teniendo en cuenta que el número de machos estériles tiene que ser mayor al número de machos de la plaga. Por contra requiere la repetición periódica de la operación para mantener los niveles de la plaga en umbrales no dañinos y además se necesita conocer el tema para calcular el número de machos esterilizados necesarios y el momento de suelta.
Espero que los lectores de la columna que tener una agricultura sana sea buena para la familia, todo es de cuidado y saber bien cuál es la plaga y con que se combaten.