Definitivamente los caleños somos pacientes, conformistas y ajenos a lo público. El MIO es un ejemplo claro: lleva 10 años en su planeación y construcción, presenta un atraso de 5 años en sus obras y un avance en el 40% de conformidad respecto al volumen de pasajeros que transporta.

Por Ramiro Varela Marmolejo
Ingeniero Civil de Univalle, MBA U. V., Director de Caliescribe, constructor, Ex -Congresista y Ex Concejal de Cali.
La velocidad de operación del transporte masivo es muy baja en las rutas troncales y pre troncales, los tiempos de viaje son muy superiores a los del transporte tradicional, presenta un presupuesto agotado sin comenzar y ahora parece faltarle más de $ 2 billones (según cifras de Metrocali) para construir las obras necesarias. En resumen, todo se ha dado por la ausencia de Alcaldes y Concejo Municipal en la dirección del proyecto; falta además organismos de control, de gerencia, administración e ingeniería. Todas estas ausencias, por la presencia de politiquería y corrupción. Ahora hay una Presidente, María del Pilar Rodríguez, preparada, bien intencionada, pero el statu quo de Metrocali ya la amarró, no va a revisar el pasado y solo tratará de:
1. Terminar obras faltantes.
2. Revisar diseños para corregir el planeamiento del sistema por la línea férrea y la Av. Simón Bolívar.
3. Conseguir recursos económicos adicionales vía un documento CONPES.
Velocidad de operación… lenta
Según Metrocali en el sistema troncal, la velocidad es de20 km/h y en el pre troncal y alimentador es de 16 km/h , lo que genera una mala calidad del servicio de transporte. Las acciones para mejorar este problema están: Eliminar transporte público colectivo para mejorar pre troncales dentro de un proceso de chatarrización que ha estado lentísimo, carriles preferenciales para pretroncales ( recursos eliminados por la nación con el visto bueno del municipio), contratación de obras que necesarias, no están presupuestadas y la actualización de los equipos de control de los semáforos en pretroncales y alimentadores interconectados entre sí con la central (recursos eliminados por la nación con el visto bueno del municipio).
Lenta ejecución
Metrocali acepta el atraso de 5 años y medio en las obras y argumenta que: “se ha invertido en la contratación de obras con ajustes de diseños, compra de predios invadidos o doble titulados. Se han realizado diseños con desconocimiento de la infraestructura de servicios públicos, licitaciones no adjudicadas, acciones populares y demás”. Como se observa, ha sido la incompetencia gerencial y administrativa de Metrocali la que ha originado la ineficiencia en la construcción.
Miocable suspendido
La mala estructuración técnica del proyecto generó unos costos adicionales y sobrecostos que Metrocali no pudo cancelar ni reconocer al contratista Unión Temporal Miocable, lo que los tiene en un Tribunal de Arbitramento para dirimir diferencias. En un año no se resolverá este problema, pues se requieren adiciones presupuestales de dineros que no existen.
La ladera sin futuro
Metrocali contrató un estudio de pre factibilidad y los actuales transportadores tradicionales tienen una banca de inversión, estructurando su adopción al sistema. La integración del sistema no fue considerada inicialmente y ahora se pretende que en un año (2013) se implemente, pero no hay dinero entre las partes para adoptar su adaptación al S.I.T.M.
10 años del MIO e incumplimientos…
El MIO cumpliendo 10 años de haber nacido en el CONPES 3166 DEL 2002 tiene tan solo un 40% de ejecución por la movilización de tan solo 400.000 pasajeros. El MIO es inviable técnica y económicamente. La razón, fue la equivocada estructuración: no hubo un estudio de factibilidad y cuando diseñaron el proyecto, la Nación y el Municipio encontraron que el costo era de $3.6 billones. Hoy en el convenio de cofinanciación los aportes totales llegan tan solo a $1.2 billones y por ello el MIO es ineficiente.
Se eliminaron puentes vehiculares, peatonales y más del 70% de la semaforización electrónica. Los problemas de operación del MIO son muy delicados, pues la insatisfacción de los usuarios en horas pico, por la tardanza de los buses y tiempos de tardanza más altos que los buses tradicionales, hace del masivo, un riesgo permanente de orden público.
Lo preocupante
La verdad no la dice la Alcaldía, ni Metrocali, ni el Concejo Municipal y la Nación feliz sin cumplir su compromiso inicial presupuestal y financiero. Por ello el MIO seguirá siendo… el lento.