Ana Lucia Arango Marín
Economista
Desde la década de los años 1960 Colombia viene afrontando un conflicto armado. En el año 1988 cuando estaba de presidente el Doctor Virgilio Barco se presento un mayor recrudecimiento, rompiéndose los diálogos de paz con las guerrillas, hasta el año 2003.
Los dos grupos armados que sobreviven en Colombia son: las FARC y el ELN. Las FARC nacieron como resultado de la resistencia del movimiento campesino a las agresiones por parte del gobierno nacional en 1964 y el ELN es el resultado de la decisión de estudiantes, dirigentes sindicales, profesionales, con el objetivo de conquistar el poder y construir el socialismo.
En la presidencia del Doctor Andrés Pastrana, las FARC perdieron el estatus de beligerante, tras el término de los diálogos de paz. Pastrana accedió en otorgar una zona desmilitarizada en la región de El Caguán para llevar ahí los diálogos con las FARC, pero este grupo tomo el control absoluto y su población, imponiendo sus propias leyes a falta de control militar. Las FARC abusaron del propósito de la zona de distensión que era la negociación política.
Este movimiento utilizó los diálogos para aumentar sus ganancias a través del narcotráfico, el secuestro y el asesinato. Obligaron a menores de edad a unirse a sus filas y mantuvieron más de 450 soldados y policías cautivos en campos de concentración en la selva.
De nuevo La confrontación de grupos ilegales contra el Estado, se dio durante la presidencia del Doctor Álvaro Uribe. En el mes de Febrero de 2008, el asesor del Presidente Uribe, Dr. José Obdulio Gaviria, calificó a las guerrillas de amenaza terrorista y no un grupo beligerante, porque no tenían un proyecto político.
A la fecha, Colombia atraviesa una de las más graves manifestaciones en la crisis humanitaria, como el desplazamiento obligado de la población en las zonas de conflicto hacia los núcleos urbanos. Miles de colombianos se han visto obligados a abandonar sus tierras y a huir a las grandes ciudades, enfrentándose a un mundo incierto, pues el estado difícilmente puede afrontar este fenómeno.
Con la propuesta del Presidente de la Republica Doctor Juan Manuel Santos para iniciar diálogos de paz con las FARC hay opiniones enfrentadas.
En el presupuesto para el año 2013 se destinara la suma de $26,3 billones. El sector defensa y policía contará con un monto total de $21,5 billones, de los cuales se le descuentan $4,8 billones, que corresponden a las pensiones de los militares.
No es un secreto que el costo de la guerra desangra la economía del Colombiano. Hemos aprendido a convivir con las enormes dificultades que en términos no solo económicos sino políticos y sociales nos ha traído esta guerra; de no existir, Colombia se habría convertido en un ejemplo como les ha sucedido a otros países incluso más chicos que nosotros, como Perú y Chile.
Los Gobernantes, no pueden volver a ceder ante la ilusión de una paz y mucho menos con que se de rápidamente, como de manera ingenua hoy creen algunos. Ya la guerrilla ha jugado con nuestro país y no podemos volver a caer en lo mismo.
Seamos consientes, que para que se dendiálogos de paz, habrá infinidad de obstáculos, pues la paz no se logra de la noche a la mañana y al precio de un borrón y cuenta nueva, sin dar respuesta a las víctimas.
Colombia ha puesto muchos muertos y el costo de la guerra no sólo está en pesos.