Por: Jaime Salazar

Inauguracion Juegos PanamericanosEn la 1ª entrega del Aniversario de los Juegos Panamericanos de recordamos el reto enorme que fue para Cali ganarse la sede de las justas, que una vez conseguido, debió continuar con una excelente y coordinada organización (2ª entrega).

En la década de los 40 Cali tenía unos 100 mil habitantes, un pintoresco pueblito que Alfonso Bonilla Aragón, ilustre escritor valluno la describe llamó: “un tranquilo burgo semi-pastoril y semi artesanal, acrecido apenas por el censo vegetativo”.

Por ello, en sólo 30 años la ciudad cambió y su vertiginoso crecimiento se vio impulsado aún más por el logro de la sede de los Panamericanos. Entre los retos más grandes de la planificación de la nueva Cali estaba el tomar esa pequeña  ciudad que en 1966 alcanzó 740 mil habitantes (un poco más grande que la Cúcuta actual),  y llevarla un paso más allá. Cali debía ser pensarla como capital de región, como polo industrial y comercial del occidente, como urbe contemporánea, con una visión de futuro que en tan sólo 3 años, acogiera los visitantes de los 32 países.

Juegos Panamericanos CaliEl primer reto que se planteó Alberto Galindo desde 1964 fue hacer un evento que jalonara la ciudad (tal como pasó en Japón con los Olímpicos) aun cuando Cali carecía de escenarios deportivos mínimos, y que debía –a marchas forzadas–, construir equipamento urbano para recibir a los casi tres mil deportistas, sus numerosas delegaciones y a los miles de turistas atraídos por la contienda.

Cuenta el periodista Alberto Bonilla que después de un detenido estudio, el comité Organizador de los Juegos decidió construir las obras indispensables atendiendo a dos criterios:

  1. facilidad de acceso
  2. proyección para el futuro de Cali.

En acceso, los urbanistas debieron evitarle al público las dificultades de movilidad propias de una ciudad que ya para ese entonces, advertía graves problemas de transporte, originado en el mal endémico de Cali: “su crecimiento atípico”.

Hoy en día, 40 años después, lejos de superar esa tara, la Cali de hoy parece repetir esa historia, creciendo a retazos, por borbotones, al ritmo de sus urbanizaciones e invasiones, sin planificación y con un POT limitado, que no se compadece con las necesidades de la ciudad.

En esos días, aunque no había una organización de la planeación territorial POT como política municipal, si había unos planes de desarrollo que permitieron que  los  Alcaldes e ingenieros se pensaron a Cali con una mentalidad visionaria que es importante destacar. Planificaron obras para una ciudad de al menos 1’500 mil habitantes, una ciudad que sólo se vería hasta 20 años después. Bonilla Aragón comenta a propósito de este particular:

“La ciudad de Cali se empeñó en un conjunto de obras urbanísticas de las más vastas proporciones, en un programa tan ambicioso como ningún otro que se hubiese trazado ciudad  alguna en el país y probablemente en otras latitudes con ocasión similar. Estas obras fueron planificadas e iniciadas por la administración del alcalde Marino Rengifo y ejecutadas por su sucesor Dr. Carlos Holguín Sardi, en un plan conocido como ‘Cali, ciudad Nueva’”, pero sirvió para tener el PLAN GENERAL DE DESARROLLO PGD que lideró el mismo Holguin Sardo y le permitió ser considerado como el Alcalde Panamericano y futurista. Esta es una de las razones por las que los Juegos Panamericanos se convirtieran en el motivo que le permitiera trascender históricamente. 

Algunas obras fueron financiadas por valorización municipal , crédito internacional para extender los servicios públicos, ítem en el que había atraso. En el caso de las Obras Panamericanas, el mayor esfuerzo fue realizado  por los propios caleños, quienes porcentualmente financiaron el 80% de las obras y el 20% restante fue cubierto por el gobierno nacional .

Remodelación del Pascual Guerrero de 1968

Estadio Pascual Guerrero Juegos PanamericanosEn 1968 se remodela el estadio Pascual Guerrero, construyendo la tribuna de Occidental y dejando su capacidad en 62 mil espectadores, según cifras de la organización de la época, aunque cálculos posteriores dejaron el aforo en sólo 45mil espectadores. En todo caso,  sorprende que 40 años después, el alcalde Jorge Iván Ospina se vanaglorie de que el ‘nuevo Pascual’, tras su remodelación, después de US$46,8 millones de dólares, tenga un exiguo lleno de 35 mil espectadores, casi la mitad de lo planeado hace 40 años, y más de.

Si bien Cali empezó a crecer desde el mismo año que se anunció la sede de los juegos, recibiendo sendas oleadas de migrantes y mano de obra del campo buscando oportunidades de empleo, en 1970 Cali al llegaba apenas a los 972,212 habitantes, y pasados los juegos, en 1972 alcanzó el 1’100.000 habitantes.

Como es evidente, en un lustro los Juegos lograron el ‘milagro’ de atraer a 400 mil personas, la ciudad dio un salto no sólo demográfico sino también cualitativo industrial y económico. En 1971 el Valle exportó la cifra histórica de US$131 millones, y en lo que respecta al área geográfica, la ciudad pasó de 1.850 hectáreas en 1960 a 4.820 en 1972, año en que se publica la estadística.

El gobierno nacional se comprometió en financiar la autopista Sur Oriental, de la que se construyeron 13 kilómetros, atravesando 43 barrios y que tuvo un costo total de $65 millones (de la época!). La ampliación de la famosa Calle quinta, ahora inmortal en la canción del Grupo Niche, se mejoró desde la 1ª a la 15, y de la calle 15, llamada “Ciudades confederadas”.

Otras importantes obras realizadas con ocasión de los juegos fueron: Av. Nueva Granada, Av. Guadalupe (de la Cra. 15 a la pasoancho), puente sobre el río cañaveralejo (Cra. 12 sur), Cra 5 desde la calle 34 a la calle 52. La calle 45, la avenida Saavedra Galindo, la Cra. 12 sur, la Avenida Pasoancho (de la avenida Nueva granada a la avenida Guadalupe, con 3 kilómetros de extensión), 1 km de caperta asfáltica de la 3ª norte, calzadas laterales de la Aut. Sur a la Simón Bolívar, 7 km. Estas fueron las verdaderas mega-obras de su época.

Escenarios deportivos

Además del estadio se construyó también el Gimnasio Evangelista Mora, donde se jugaron las eliminatorias  de Basquetbol y la final de Voleibol. Con una capacidad para 5250 espectadores y un área para deportistas de 1300 mts2, este gimnasio quedó como un escenario importante para todas las generaciones de deportistas hasta ahora.

En el antiguo hipódromo se construyó la unidad deportiva José de Jesús  Clark Flores;  área de piletas, con una capacidad para 7000 espectadores, se compitió en Natación, Clavados y waterpolo, gimnasio de voleibol, estadio Panamericano hoy Estadio de Atletismo, alojamiento de jueces y oficinas hoy convertida en la mejor escuela  nacional de deporte y se construyó también el estadio de Beisbol. Alrededor de la Plaza de Toros se desarrollo otra unidad deportiva con el Gimnasio del Pueblo para 20.000 personas, con instalaciones deportivas auxiliares para varios deportes como boxeo ,lucha ,etc, como el más grande e imponente escenario . Igualmente se construyó el velódromo (para 6 mil espectadores). Adicionalmente se construyó el polígono de Tiro del batallón Pichincha (competencias de tiro), el campo oficial para el torneo de Hockey sobre césped.

Por todo esto, y lo que hemos contado a lo largo de estos 3 artículos, suena increíble aún algunos caleños desconozcan hoy, el capítulo más glorioso de la historia de la ciudad, unas justas que le cambiaron la cara a Cali para siempre: GRACIAS AL DEPORTE.