Por Julián Velazco
Especial para Caliescribe.com
 
La competitividad inicialmente solo se aplicaba al ámbito empresarial, luego a nivel de países y regiones. Hoy también las ciudades buscan y necesitan ser más competitivas y la tendencia en materia de urbanismo a nivel mundial es hacer el entorno urbano más competitivo.

El Informe de Competitividad Mundial, realizado en la Universidad de Oxford en 2001, define la competitividad como “la capacidad de producir bienes y servicios que respondan a las exigencias de los mercados internacionales, al mismo tiempo que permite a los ciudadanos obtener un nivel de vida creciente y durable". En el caso de la competitividad urbana, se trata de generar en el espacio un entorno físico, tecnológico, social, ambiental e institucional propicio para atraer y desarrollar actividades económicas generadoras de riqueza y empleo. La competitividad urbana no sólo depende de factores exógenos sino también de las ventajas ofrecidas por el territorio para facilitar las actividades económicas. Por eso las ciudades deben, promover o crear estas condiciones.

La expansión y la fragmentación urbana originados por el surgimiento acelerado de desarrollos habitacionales en la periferia y la dispersión y baja densidad consecuentes, implican mayores distancias y costos en el transporte y menor accesibilidad a los sitios de trabajo y a la vivienda. Estas ineficiencias que inciden en la competitividad urbana se pueden minimizar con una buena planeación que busque aumentar las densidades y mejorar la accesibilidad.

Lasestrategias para diseñar y ofrecer una ciudad competitiva, deben orientarse a mejorar las vidas de sus habitantes. La competitividad de las ciudades está relacionada con la calidad de vida de las personas que se logra, no solamente al facilitar la riqueza y el empleo sino mediante la creación de espacios públicosurbanos destinados al uso de la ciudadanía en general, que faciliten la interacción a nivel humano, como parques, espacios deportivos y vías públicas.

Para conformar la competitividad se requiere aumentar la productividad y  la capacidad de inserción en los mercados regionales, nacionales e internacionales. Por lo tanto, las autoridades locales deben crear las condiciones adecuadas que incentiven la competitividad urbana, implementando políticas públicas orientadas a cumplir con los elementos que mejoren la productividad, tales como: simplificación de trámites burocráticos; actualización de las normas para brindar seguridad jurídica a los inversionistas; dotación de la infraestructura adecuada; promoción de la ciudad como polo de servicios, mejoramiento de la conectividad y ofrecimiento de una infraestructura social para mejorar la calidad de vida de los habitantes.

Las empresas compiten a escala global, pero también las ciudades compiten para atraer empresas, talento, eventos, turistas, congresos, líneas aéreas, e incluso, para atraer a posibles pacientes de clusters de salud, como es el caso de Cali. Entre las características de ciudades competitivas globalmente se mencionan:

  • Gobernabilidad, transparencia y políticas anticorrupción
  • Movilidad y accesibilidad, incluyendo transporte público, en bicicleta y a pie
  • Dimensión metropolitana aprovechando economías de escala,
  • Conexiones globales por aire, mar y tierra.
  • Conformación de “clúster” que agrupen actividades con vínculos hacia adelante y hacia atrás (forward and backward linkages).
  • Calidad de vida: universalización de servicios sociales de calidad: educación, salud, seguridad, recreación y transporte público.
  • Liderazgo. Capacidad de crear, atraer y mantener talento creativo e innovador.
  • Ingrediente cultural y de empuje que singulariza a cada ciudad, compuesto por una mezcla de actitudes, valores, tradición, raíces, iniciativa creativa, etc.

En el caso de Cali, el sector de servicios es el mayor componente de la economía local, aunque la actividad industrial se concentra en otros municipios del área metropolitana (Yumbo, Palmira, norte del Cauca). Por otra parte es evidente la incapacidad del actual gobierno municipal para promover la productividad y competitividad en la ciudad, agravada por la falta de acuerdos con otros municipios del área metropolitana.

La  competitividad urbana requiere, no solamente estar al nivel de estándares nacionales e internacionales para competir en determinados rubros, sino que la ciudad, además de ser atractiva para las inversiones y la generación de empleo, debe garantizar la sustentabilidad social y ambiental, lo que exige coordinar los diferentes sectores y niveles de gobierno así como la articulación y sinergia entre el sector público y el privado, para que las diferentes entidades coincidan en la meta de convertir la ciudad en una metrópoli de servicios avanzados que pueda competir nacional e internacionalmente.

Los Planes de Desarrollo y los POTs deben orientarse para que las organizaciones públicas y privadas puedan materializar los proyectos urbanos, siendo requisito el desarrollo de mecanismos de participación público-privada orientado al interés común.

Teniendo en mente esos objetivos, se sugiere convertir la actual Secretaría de Planeación Municipal en un Instituto de Planeación Urbana de Cali IDUC, con la misión de proveer los planes y proyectos urbanos, económicos, sociales y ambientales que Cali requiere con visión a largo plazo, continuidad y participación de la clase empresarial y de la ciudadanía. El IDUC impulsaría el desarrollo urbano sustentable, la ordenación del territorio y el desarrollo social y comunitario utilizando las mejores herramientas y técnicas de planeación, buscando mejorar la calidad de vida y la competitividad del municipio de Cali y de su región metropolitana. El IDUC estaría dirigido por una Junta Directiva con la participación del Gobierno Municipal, del sector productivo y de representantes de la comunidad.