Por Ramiro Varela M

A pesar de la solicitud hecha por algunos gremios (CAMACOL, ACODAL, Cámara de Comercio y la Cámara Colombiana de la Infraestructura) y diferentes ciudadanos para la suspensión de la licitación de la Autopista Bicentenario, por clara inconveniencia,  el proceso administrativo tendiente a adjudicar el contrato de concesión antes del 30 de Octubre, fecha en la que vamos a tener escogido el nuevo alcalde. Por ello, se hace indispensable que los actuales candidatos a la alcaldía de Cali, al Concejo  y la Procuraduría General de la Nación, le exijan al ejecutivo municipal suspender la licitación de dicha obra.

Como a cuento de qué, y  cuando estamos en la recta final de la campaña política, a 1 mes y 3 semanas de que haya un nuevo mandatario municipal, va a comprometer a los Caleños en $430 mil  millones. Pero si esto es grave, lo delicado es el riesgo que ello genera con el erario municipal.

Los candidatos punteros en las encuestas tienen mayor responsabilidad con Cali, es decir Clara Luz Roldan, María Isabel Urrutia, Rodrigo Guerrero, Milton Castrillón, Sigifredo López y Carlos Andrés Clavijo  deben pronunciarse públicamente al respecto y exigir a la Procuraduría General de la Nación la suspensión de dicha licitación.

Inconveniencias de la licitación

Esta vía que enlazaría el norte con el sur de Cali a través de la línea férrea, de doble calzada y exclusiva para vehículos particulares (tipo highway), con un costo estimado por sus consultores en $430 mil millones  que se irían  a financiar para su construcción y mantenimiento, a través del sistema de peaje,  tiene la licitación las siguientes inconveniencias:

1.   Fundamentalmente porque es imposible cuantificar el costo final del proyecto, pues no se tienen los diseños y estudios definitivos y por lo tanto su pago sería con una modalidad en donde el concesionario asume la responsabilidad, pero en Colombia no existe una clara reglamentación de la contratación mediante el sistema de concesión. El Estado ha perdido en las concesiones de la primera y segunda generación más de $5 billones con las reclamaciones de los contratistas, luego ese riesgo tan alto hace inconveniente su  adjudicación.

2.   Como el proyecto definitivo no existe, es decir que  los estudios y diseños de fase III serán contratados con los futuros concesionarios de la autopista y por lo tanto no se conoce con exactitud cuál es la afectación predial y en consecuencia este sistema hace inconstruible la obra en el corto plazo. La función de  comprar o expropiar delegarla a un particular es el error más grande, veamos varios ejemplos como :

–  La megaobra Avenida Circunvalación del Sur no la pudo proyectar su construcción  el alcalde Ospina, por la demora en la definición de la afectación y la compra de predios

–  La plazoleta de la caleñidad se ha demorado por la compra de predios, obra que es relativamente fácil y no la podrá inaugurar el alcalde por este motivo.

–  La malla vial del Valle a cargo de los hermanos Solarte,  lleva más de 10 años y no se ha podido terminar porque el estado no debe delegar lo que le corresponde. El contratista feliz porque  factura y factura con una obra que no puede hacer en un imprevisto a cargo del estado y por lo tanto el riesgo que le corresponde a los contribuyentes. Recordemos que esta obra no la pudo inaugurar Pastrana ni en los 8 años de Uribe.

Ustedes lectores podrán imaginarse la segura reacción de la comunidad cuando se conozca con precisión las afectacionesprediales  en el área de la galería Santa Helena o en el barrio La Flora? 

3.   El TPD un punto excesivamente critico que llevó a CAMACOL, la Cámara de Comercio, ACODAL y a la Cámara Colombiana de la infraestructura a solicitar el aplazamiento de la licitación por la ausencia del estudio de demanda de la autopista, que se construye a partir del estudio de tráfico que tampoco ha sido elaborado. Esto no permite estructurar la factibilidad económica del proyecto y en especial la tasa interna de retorno del capital invertido aspecto relevante para este tipo de obras.

4.   La ausencia de concurso público para la elaboración de los diseños no permite realizar la evaluación comparativa de las diferentes alternativas urbanísticas y arquitectónicas para hacer eficiente en términos de ciudad una obra de esta magnitud que afectara toda la municipalidad. La alcaldía se ha gastado más de $4.000 millones en los diseños de este proyecto, entregados todos a dedo a consultores entre ellos  al interventor de la concesión norte de Megaobras (Ing. Marino López). Caso idéntico de las Megaobras que por inexperiencia o capricho no les dio la gana de ordenar el  ESTUDIO DE MOVILIDAD, que tan solo les habría tomado 6 meses, para que finalmente hubieran perdido todo un año (Septiembre 2008 – Septiembre 2009) y esta situación no les permitirá entregar NINGUNA MEGAOBRA A DICIEMBRE 2011, pues la ciudadela NUEVO LATIR fue excluida de la valorización por tema presupuestal. 

5.   La factibilidad ambiental y de servicios públicos aún no se ha elaborado y no será fácil minimizar el ruido que genera el tráfico de una autopista de estas características. Así mismo el problema de la ausencia de diseño de la red matriz de acueducto  y de los colectores de alcantarillado, hacen técnicamente inconveniente la adjudicación de esta obra.

6.   La factibilidad social como estudio del proyecto de construir la primera high way urbana en Colombia, al partir prácticamente la ciudad en 2, sin la debida participación ciudadana en unos remedos de participación como los que siempre hace el cabildo caleño, en donde no hay una debida convocatoria pública ni se le enseña ni capacita a la comunidad que hace parte de las JAL y JAC, a evaluar este tipo de proyectos urbanos que afectan toda una ciudad.

La orientación….….un solo proponente y…

El proyecto tiene una clara orientación expresada públicamente por el alcalde Jorge Ivana Ospina el día del lanzamiento pomposo del proyecto en el Hotel Dann Carlton , en el mes de Febrero del 2009 , cuando hizo elogios del ex – funcionario público y encargado de la concesión férrea del oeste  Fernando Garcés Lloreda comoempresario visionario de la autopista Bicentenario y cuando invitó al Ingeniero Marino López a intervenir en la presentación del proyecto, léase idea que nació con US 200 millones, pues el mismo reconoció que no había pre factibilidad. Esta orientación  y la terquedad del alcalde para adjudicar conduce a pensar que habrá un solo proponente, pues nadie diferente a alguien que tenga dedo amarrado, va a firmar un contrato asumiendo el riesgo de desconocer el tráfico diario promedio que debe garantizar los estudios del TPD.

La ley anticorrupción….

En su Artículo 87 dice “MADURACIÓN DE PROYECTOS. El  numeral  12 del  artículo 25 de la Ley 80 de 1993 quedará así:

12.  Previo a la apertura de un  proceso de selección,  o a la  firma  del  contrato en el  caso en  que  la  modalidad  de  selección  sea  contratación  directa,  deberán  elaborarse  los estudios,  diseños  y  proyectos  requeridos,  y  los  pliegos  de  condiciones,  según corresponda.

Cuando  el  objeto  de  la  contratación  incluya  la  realización  de  una obra,  en  la  misma oportunidad  señalada  en el  inciso primero,  la entidad contratante deberá contar con  los estudios  y  diseños  que  permitan  establecer  la  viabilidad  del  proyecto  y  su  impacto social,  económico  y ambiental.  Esta  condición  será  aplicable incluso  para  los  contratos que incluyan dentro del objeto el diseño.”.

Es decir que mientras no haya la viabilidad económica, técnica, social, legal y ambiental, no podrá continuar la obra. Este es el caso de la autopista bicentenario en donde aún no está demostrada la viabilidad económica del proyecto y por lo tanto no debe ser contratada.

La afectación al municipio

La adjudicación de este contrato de concesión significará el compromiso de la municipalidad en $420 mil millones, pero el valor final del proyecto como obra pública no se conoce, tampoco el tiempo de ejecución en el esquema licitatorio planteado, y no se puede  garantizar el tráfico promedio diario que circulará por la Autopista, carga que finalmente estará sobre los hombros de los caleños.

Como se concluye, el valor total que asumiría el municipio es una cifra excesivamente alta, que dependerá del factor tiempo, y por lo tanto, se le reitera al señor Alcalde abstenerse de continuar esta licitación hasta tanto tenga los  diseños completos de la obra, su afectación predial,  y el estudio de demanda de la Autopista.