*Redacción

El Consejo Municipal para la Gestión del Riesgo de Desastres (Cmgrd) realiza una serie de recomendaciones para enfrentar la ola de calor que por estos días ataca a la capital del Valle del Cauca. Hace varios días Cali atraviesa una intensa ola de calor, la cual ha generado que se aumenten los incendios forestales y las visitas a los centros médicos.

Además, insolación, golpes de calor, deshidratación, quemaduras en la piel, pastos secos, ríos con poco caudal son las quejas que presenta la comunidad tras el intenso calor.

Una ola de calor es un periodo prolongado, excesivamente cálido, que puede ser también excesivamente húmedo, aunque ello suele ser muy raro, ya que el propio calor atmosférico hace que el agua se evapore y se condense formando nubes, con lo que disminuye el calor atmosférico al ser en parte absorbido por esas nubes. Precisamente, la zona ecuatorial no presenta las temperaturas más cálidas del planeta por su mayor nubosidad, que mantiene la temperatura sin grandes extremos. El término depende de la temperatura considerada "normal" en la zona, así que una misma temperatura que en un clima cálido se considera normal puede considerarse una ola de calor en una zona con un clima más atemperado.

Según la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC), la temperatura en Cali ha oscilado los 33º C y 34º a la sombra. Ni ventiladores o aires acondicionados han hecho que los caleños se sientan más frescos en sus hogares o sitios de trabajo.

La sensación térmica en el aire ha llegado a los 37ºC.

Los expertos explican que esta ola de calor se ha generado por la conjunción de un sistema de altas presiones, poca humedad y cielos muy despejados, haciendo que la ciudad esté más expuesta a los rayos del sol.

Es por esto que el Cmgrd realiza las siguientes recomendaciones para que la comunidad no sufra las consecuencias:

Utilizar bloqueador durante todo el día, hidratarse constantemente, salir con paraguas, gorra y gafas para prevenir insolación, vestir prendas de algodón, cuidar a los niños de los rayos directos del sol, estar atentos a mareos, náuseas, dolores de cabeza palpitantes pues pueden ser síntomas de un golpe de calor.

“Cali está viviendo una transición de clima, estamos pasando de verano a invierno, por estos días la ciudad afronta una ola de calor muy intensa por cuestiones meteorológicas, pero a mediados de octubre y noviembre la nueva temporada invernal llegara con pronósticos poco favorables, pues se avecinan tormentas eléctricas y vendavales en la ciudad”, resaltó Rodrigo Zamorano, coordinador del Cmgrd.