Por Guillermo E. Ulloa Tenorio

Economista de la Universidad Jesuita College of the Holy Cross en Estados Unidos, diplomado en alta dirección empresarial INALDE y Universidad de la Sabana. Gerente General INVICALI, INDUSTRIA DE LICORES DEL VALLE, Secretario General de la Alcaldía. Ha ocupado posiciones de alta gerencia en el sector privado financiero y comercial.


La Contraloría Municipal ha solicitado a la Administración Municipal, a través de documento de advertencia, revisar la tarifa cobrada por el servicio del MIO. El mencionado documento, escueto y de poca profundidad, se limita a reproducir el clausulado de los contratos de concesión, sobre el cumplimiento de la revisión de tarifa en vez de elaborar un análisis que aporte un beneficio a la administración, la comunidad y el usuario para el buen desempeño del sistema. A su vez, los operadores limitan su argumento aduciendo incremento de costos de operación, iliquidez y capital de trabajo inadecuado, sin sustentar y apoyarse en las falencias estructurales del sistema. El salvavidas de $95.000 millones, recientemente aprobado, y en trámite de desembolsar, aunque importante, sigue siendo como una aspirina para una enfermedad compleja que sí no se trata adecuadamente puede convertirse en terminal.

Es de conocimiento popular que el sistema, al habérsele cercenado unos corredores exclusivos que atraviesan la ciudad conectando los cuatro puntos cardinales de la ciudad presentó la primer fisura estructural. La segunda fractura del sistema se da en la ligereza de administraciones anteriores en adjudicar un sinnúmero de contratos cuyos beneficiarios no culminaron las obras interrumpiendo la fluidez de su integración. Varias obras de envergadura, fundamentales para su eficiente operación, como las tres terminales sur, norte y oriente, y cuatro intermedias aun no han empezado a construirse. La conexión del MIO CABLE, no solamente se ha convertido en un monumento a la desidia, sino que es complemento al sistema para integrar los habitantes de ladera.

La dirección de Construcción y Obras Civiles de Metrocali debe ser una división de similar importancia, jerarquía y categoría a la Secretaria de Infraestructura y Valorización de la ciudad. Se ha equivocado esta división al contratar obras sin diseños definitivos, permitiendo al contratista aportar sus diseños, con cambios permanentemente durante la ejecución, con retrasos, mayores costos y consecuente falta de disponibilidad presupuestal. Son responsabilidad de esta división la culminación de algunos tramos inconclusos de conexión vial en la Simón Bolívar, en la carrera 18 entre calles 21 y 26 y Troncal de Aguablanca. Algunas obras civiles no tienen conexidad con la integración eficiente del sistema, cuando la prioridad deben ser las vías que cubren las rutas petroncales y alimentadoras. Inclusive mediante una simple y adecuada señalización pueden convertirse algunos carriles de las principales vías de la ciudad de uso exclusivo, permitiendo fluidez en su desempeño, evitando congestión vehicular, mejorando frecuencias, servicio y eficiente utilización del equipo rodante.  

Corrigiendo algunas fallas, fácilmente detectables, se logra un trabajo más eficiente y un menor costo operacional. El MIO, más que empresa de transporte de pasajeros, es de sofisticada logística. Debe apoyarse en sistemas tecnológicos disponibles, acondicionados en el equipo rodante, estaciones y red de semáforos. Se requiere una red semaforizada inteligente priorizando el tránsito del MIO en vez del flujo particular. Observar en las troncales, varios articulados cubriendo la misma ruta con diferencia de uno o dos minutos es señal de ineficiencia. No apoyarse eficazmente en la tecnología se percibe con los repetitivos errores en la información de frecuencias anunciadas en las pantallas de las terminales. Si la plataforma del sistema estuviera operando correctamente no habría razón para la desinformación.

Establecer el real punto de equilibrio de su movilización diaria es prioritario. Bajo esta premisa se establece una agenda conducente a perfeccionar la logística operacional. Debe asumir una eficiente planeación y contratación de obras civiles.

Ejercer la vocería, a través del bloque parlamentario, con el alto gobierno, para buscar los aportes presupuestales requeridos para culminar las obras del trazado original, las estaciones, operación por cable, patios, talleres y sufragar el alto déficit acumulado, permitirán una movilización eficiente, excelencia en sus frecuencias y satisfacer la demanda del 90% de la población.

METROCALI debe hacer un severo, profundo y consciente análisis a su interior, su operación y su eficiencia. Corregir los errores es la prelación antes que pensar que la complejidad de la operación radica en la formulación e incremento de la tarifa.