Los bancos podrían quedarse con el transporte masivoLos operadores concesionarios en su calidad de contratistas de los municipios colombianos, han propuesto que las alcaldías subsidien los pasajes del transporte como una de las salidas de la crisis de los sistemas de Cali, Barranquilla, Pereira y Bucaramanga, solicitud que es inaceptable, ante la realidad de los hechos como se planificaron y decretaron el sistema de buses articulados en Colombia. Por Ramiro Varela Marmolejo Ingeniero Civil de Univalle, MBA U. V., Director de Caliescribe, constructor, Ex -Congresista y Ex Concejal de Cali.El problema ¿Y qué le pasa a los MIOs?Que las alcaldías subsidien los pasajes del transporte como una de las salidas de la crisis de los sistemas de Cali, Barranquillas, Pereira y BucaramangaQue tiene una crisis financiera producto de un mercado de usuarios que no aparece, donde las proyecciones de pasajeros que demandan estos sistemas no se han cumplido contractualmente y por lo tanto, no se ha llegado al punto de equilibrio para cubrir los costos de operación.Esta realidad ha sido causada por la mala planificación que hiciera el Gobierno Nacional del transporte masivo en la década anterior, donde hay una co-responsabilidad de los operadores, quienes participaron con “alegría” en la “feria” de lograr el negocio y en la búsqueda de ese monopolio contractual.Todos estos sistemas fueron adoptados por documentos CONPES, previa elaboración de estudios de inversión, contratados bajo la única responsabilidad de Planeación Nacional y por lo tanto, no se le puede culpar a los municipios colombianos del descalabro de los masivos.¿Qué dice el Gobierno Nacional?Se adoptaron legalmente esos sistemas, por la única razón de “viabilidad” de costos y precisamente la auto – sostenibilidad.El Viceministro de Transporte Nicolás Estupiñan, quien es el vocero de la Nación ante Cali y el resto de municipios dice “es fundamental que se cambie el paradigma de que estos sistemas tienen que ser autosostenibles”.“Pregunte usted sobre los metros de Buenos Aires, Nueva York, Ciudad de México y Paris y encontrará en todas las ciudades que los gobiernos apoyan la operación del transporte público urbano, generando incentivos para que las ciudades se muevan de manera más eficiente”. Esta afirmación del Viceministro, es equivocada, pues no se puede comparar el costo de un sistema de transporte pesado como un metro, con los sistemas de buses articulados cuya solución de transporte es muy económica y precisamente se adoptaron legalmente esos sistemas, por la única razón de “viabilidad” de costos y precisamente la auto – sostenibilidad.La responsabilidad de los operadores. Los contratistas se enteraron de toda la minucia precontractual y con el afán de hacerse a este negocio, aceptaron los términos de referencia de las licitaciones Los concesionarios de los sistemas de transporte como contratistas del estado, trabajaron con sus bancas de inversión para asumir los costos bajo el modelo de que la operación de que el sistema era sostenible, vía tarifa de pasajeros. Recordemos que la gran mayoría de estos operadores venían ejerciendo como transportadores de los buses colectivos tradicionales y ellos al aceptar la modulación técnica, económica y financiera de los S.T.M., garantizaron el cumplimiento de un modelo que no tenía subsidios por parte de las entidades contratantes. Por lo tanto, no puede ser ahora, que vayan a cambiar las reglas de juego preestablecida ante una situación financiera que tiene solución. Podria tomar carrera la mala experiencia de las vías de 1ª, 2ª y 3ª generación de las vías nacionales que desangraron al país en más de 15 billones de pesos.Los contratistas se enteraron de toda la minucia precontractual y con el afán de hacerse a este negocio, aceptaron los términos de referencia de las licitaciones que condujeron a esos contratos. Sería inaceptable cargar al presupuesto de los Municipios unos dineros que no se pueden cubrir, por las necesidades sociales y económicas de los entes territoriales que los hace inviables para su eficaz desarrollo. Solo es recordar la prioridad del gasto en infraestructura educativa, en la reparación de la malla vial, en la operación de la salud pública, en seguridad y en vivienda social para señalar unos pocos ejemplos. De la inoportuna e inviable propuesta.¿Qué dice la ley?La legislación actual sobre los S.T.M de Colombia nace de la ley de metros, que le obliga al Gobierno Nacional a financiar la construcción de los S.T.M de Colombia bajo una cofinanciación con los municipios. Los documentos CONPES mediante estudios de “factibilidad”, decretaron el sistema de buses articulados y dieron el marco jurídico, para que su funcionamiento se desarrollara bajo la única responsabilidad de la operación del sistema. En consecuencia y ante una rigurosidad jurídica y técnica de la Nación, no se puede ni se debe permitir modificar la razón de ser de los masivos del país, su sostenibilidad con la tarifa.Caso CaliSobrecostos multimillonarios entre la planeación y la construcción del sistema, al pasar de US 345 millones a US 1.800 Millones (datos oficiales) El MIO fue adoptado por el documento CONPES 3166 de 2002, fundamentado en una estructuración técnica errónea, al asumir la prefactibilidad del proyecto como si fuera una factibilidad. La fase de estos estudios tomada erróneamente, originó unos sobrecostos multimillonarios entre la planeación y la construcción del sistema, al pasar de US 345 millones a US 1.800 Millones (datos oficiales), situación fáctica que denunciamos a finales de 2004, es decir, hace 10 años y los Alcaldes – Concejo Municipal no nos han prestado atención.La Nación y el Municipio ante este desfase presupuestal recortaron el sistema, eliminando la principal troncal, la semaforización electrónica y en realidad, se modificó la orientación cardinal de la operación de los buses. En otras palabras, se está obligando a los usuarios a ir al centro a hacer transbordos en una ciudad que hace 20 años dejo de ser monocéntrica y que cambió radicalmente su desarrollo territorial y densidad poblacional. En este caso la co – responsabilidad de este problema debe ser compartida entre la Nación, el Municipio y los operadores.Del fracaso todos tienen su cuota y no hay derecho que sean los usuarios los que carguen con este subsidio propuesto vía sobre tasa a la gasolina. Los concesionarios como licitantes conocían de estos problemas, en especial de las ausencias de un estudio de plan vial actualizado y de un mercado que se ha debido conocer científicamente, mediante un estudio de origen – destino y unas proyecciones bien calculadas. Inicialmente el MIO, se proyectó para una cobertura de 950.000 pasajeros al día y escasamente se ha llegado en promedio este año al 50%, es decir, a 480.000 usuarios. De quién es el pecado?, de todos los actuantes administrativamente.Los concesionariosLa operación se quedará sin recursos para el combustible, el mantenimiento de los vehículos y los salariosObservamos lo que pasó con Unimetro, E.T.M y ahora G.I.T que no fueron capaces de sostener financieramente su inversión. Ahora, el otro concesionario Blanco y Negro Masivo con su gerente a la cabeza Eduardo Bellini dice “en cualquier momento la operación se quedará sin recursos para el combustible, el mantenimiento de los vehículos y los salarios”. “Para que los sistemas sean financieramente viables, indiscutiblemente tenemos que hablar de unos subsidios a los operadores de transporte”.Se equivocan los transportadores, pues con sus bancas de inversión no descubrieron estas falencias contractuales, ni tampoco hizo parte de un análisis profundo por parte de las empresas industriales que vendieron estos vehículos, ni los bancos que los financiaron. Los transportadores y todos se metieron a un negocio prácticamente monopólico y ahora quieren achacarle la culpa solo a los municipios, para que vía sobretasa a la gasolina subsidien los pasajes.El transporte informal…El mal servicio de los sistemas de transporte masivo, su ineficiencia medida en el tiempo de viaje de cada pasajero, originó un cambio del usuario en su movilidad, comprando moto o transportándose en servicios piratas. El problema no es de represión y de tomar medidas para eliminar las rutas paralelas de transporte tradicional como muy bien lo ha entendido el alcalde de Cali Rodrigo Guerrero, al aplazar la fecha de salida de los “buses viejos”, se trata de que el MIO sea eficiente, disminuya el tiempo de viaje de los usuarios y se gane el mercado en libre competencia.Reiteramos la soluciónProyectar unos sistemas eficaces y para ello el caso de Cali por ejemplo, debe reestructurarse, reorganizarse técnica y económicamente el proyecto.No es otra, que proyectar unos sistemas eficaces y para ello el caso de Cali por ejemplo, debe reestructurarse, reorganizarse técnica y económicamente el proyecto, para que el diseño del sistema corresponda a una organización del transporte eficiente, de tal manera que el tiempo de viaje sea menor al del bus tradicional y así en el mediano plazo (5 años) el mercado resolverá el problema. La solución inmediata se debe central:Financiación por Ley de metros (70% Nación y 30% Municipios) de todos los cambios que se surtan en la reorganización de los sistemas en cada ciudad.Mano firme de la Nación y el Municipio, para que la estructuración financiera entre bancos y contratistas, permita la reestructuración de los créditos en el largo plazo, para continuar con la financiación de la operación so – pena de quedarse los bancos como operadores de transporte.El nuevo Gobierno Nacional deberá por ley de la República, antes de que se presenten revueltas callejeras, como ha pasado en ciudades latinoamericanas, ordenar la “nueva” estructuración técnica de los proyectos, para poder financiar los sobrecostos que se han presentado en la construcción de los sistemas y que está afectando la operación del transporte. Uncategorized