Cómo juegan los medios: No hay equilibrio informativoPor Moisés Banguera PinilloPara escribir una columna u opinar en cualquier medio genera grandes responsabilidades, entre ellas la de estar informado y calcular bien tiempo y oportunidad para plasmar su opinión. Razón por la cual he podido conocer el pensamiento, los conceptos y el raciocinio de los grandes opinadores de este país.Como lo dijo acertadamente Juan Gossain “Nunca había visto a la prensa en el mismo fango que los políticos”, luego en el contenido del mismo escrito dijo Juan: “… Se acomodó en el sofá, luego de mirar a la bahía de Cartagena y sin que ya le hirieran los ojos los rayos del sol, que salió a reinar en el cielo tras el paso raudo de unas nubes grises, que vaciaron el agua que cargaban y se marcharon. “Ni Santistas, ni Uribistas. Periodista, ese es nuestro oficio”, dijo, en referencia a la polarización de los distintos medios, que, para mal del oficio tomaron partida por uno y otro candidato, y perdieron su esencia y, para Gossaín, algo peor: perdieron autoridad moral”.Al comparar lo dicho por Juan Gossaín el mejor periodista para mí en los últimos tiempos con lo que he escuchado y leído en los medios más importantes de este país, no cabe la menor duda que la expresión del ilustre maestro se quedo corta. La mayoría de los que están al servicio del cuarto poder han tomado partido descaradamente a favor del candidato – Presidente.Un Estado que no garantiza un equilibrio informativo afecta la democracia, pues viola el derecho a la información al no presentar información pública, con imparcialidad y objetividad. En esta campaña los medios han ido más allá, pues relataron los hechos de los escándalos de la actual campaña Presidencial sin equilibrio y con sesgo, protegiendo y de qué manera al candidato-Presidente.Es bueno recordar que entre los años 2009 y 2010 se intento licitar el tercer canal, proceso que paro este gobierno y luego se hizo el de la vista gorda dejando demostrar un compromiso tras bambalina de defender los intereses de los dos grandes grupos económicos del país, representado en los dos canales privados. Porque privar a los colombianos de una alternativa diferente y a una competencia que redunda en beneficio del televidente?Los grupos económicos, los empresarios, los industriales como capitalistas están cómodos con un gobierno, que les reduce el impuesto de rentas, que le permite mantener las ventajas en temas impositivos a la cerveza, que crea las condiciones de inseguridad jurídica a la inversión extranjera con el objetivo de espantarla, por eso tienen temor de un cambio de rumbo en el timón del estado y prefieren no arriesgar. Sin impórtales la situación que están viviendo los mortales, la extorción no los toca a ellos, los secuestros ya son para la clase media, las Bacrín como delincuentes no tocan a los ricos, la minería ilegal trae más recursos para crecer sus dividendos y el terrorismo solo se ensancha con el pobre campesino.Razones muy claras para que los “periodistas” que están al servicio de los grandes grupos económicos sin ningún pudor pongan sus medios al servicio del partido de gobierno. Para comprobar esto basta con leer los columnistas de El Tiempo, su línea editorial e informativa, las posturas y los panelistas de la FM, de RCN, de BLU radio de Caracol, de Noticias Caracol, de la W del Tiempo, de RCN Televisión, de Caracol Televisión y no pocos medios regionales, etc. También como contraprestación a la prorroga entregada por el Gobierno se nota la parcialización del noticiero CM&., que se emite desde un canal público y en una concesión pública del Estado a un particular. Es el único medio que conserva una línea partidista, pues es la línea oficial del ex Presidente Gaviria y su hijo jefe de un partidoLos medios hipócritas se lamentan que no surja una tercería y, descaradamente ellos mismo deliberadamente llevaron el debate a la polarización entre dos campañas e visibilizaron a los otros muy buenos candidatos.La Constitución de Colombia y la Jurisprudencia de la Corte Constitucional en esta campaña fue tirada a la basura por los medios de comunicación, pues no se garantizó el derecho a la libertad de informar y ser informado, sin tener en cuenta que las concesiones del espectro electromagnético de televisión y radio son públicas y se han apartado de la búsqueda de la verdad y la defensa de la democracia, por proteger los intereses políticos, económicos y periodísticos alrededor del gobierno actual. Que gran violación de los derechos humanos.Así como se ha cuestionado el papel de las facultades de derecho por la calidad de la justicia que recibimos, a los maestros por la calidad de educación, a los conductores por el incremento de los accidentes. Es hora de reflexionar por la calidad, el contenido y el papel de la información que estamos recibiendo los colombianos. Una cosa son los columnistas que expresan su opinión y cada lector saca sus conclusiones y, otra cosa muy distintas son los reporteros y los presentadores de la noticia y, otra muy distintas los moderadores de un programa de opinión.Todas estas razones son las que demuestran porque durante tantos años, el pueblo colombiano se expresa en las urnas, muy distinto al querer de los que se creen dueños de la verdad. Es muy fácil acomodarse al tipo de gobierno que quiero que me conduzca desde una posición privilegiada y otra muy distinta cuando el fuego me está quemando. El domingo 25 de mayo los resultados electorales confirmaran mi tesis o desvirtuaran el divorcio entre los poderosos y los enmermelados que nos nutren de información. El equilibrio informativo es fundamental para la sostenibilidad de la democracia, que no se lamenten si en 4 años nos llega un Chávez, desde el Palacio de Liévano a la Casa de Nariño, el voto de Petro por Santos, no es gratuito.