Colombia clama por una paz duradera y sosteniblePor Guillermo E. Ulloa T. Finalizando el proceso electoral nos acercamos al momento histórico donde nuestro voto decidirá el futuro del país. La campaña electoral enlodada por improcedentes señalamientos propios de la tendencia de guerra sucia concebida por asesores externos llega a su fin.Colombia clama por una paz duradera y sostenible. Esta será la lucha que el país continuará dando.Inconcebible y errado pensar que estaremos eligiendo entre guerra y paz, como la campaña reeleccionista ha querido polarizar al electorado. Existe un sentimiento patrio claro para conducir la recta final de la anhelada y esquiva paz que clamamos como ciudadanos. La política de estado de concluir el largo conflicto, sencillamente, tiene dos matices.Por un lado, la posición Santista, corresponde a que se tienen preacuerdos sobre algunos puntos de la agenda. Se quiere concluir rápidamente el proceso y someter lo acordado a un referendo nacional. Se dará facultades para una profunda reforma constitucional que permitan el indulto, la participación activa en política de los grupos ilegales armados, reforma agraria y nueva política nacional hacia el flagelo del narcotráfico.En la campaña de Oscar Iván Zuluaga, y el acuerdo con el Partido Conservador, se respeta la mesa de diálogos, pero se condicionan algunos puntos específicos. Cese unilateral al hostigamiento. Suspender, en forma definitiva, el reclutamiento de menores de edad. Castigo para los implicados en crímenes de guerra, de lesa humanidad y daños a la infraestructura. Incorporar los combatientes rebeldes a la vida nacional con los mismos derechos y oportunidades del cual gozamos todos los ciudadanos. Como la competencia para abordar el tema de drogas ilegales no es nacional sino global es imposible comprometer al país en esta cuestión en las mesas de diálogo. Estos han sido los verdugos que la provincia colombiana ha soportado por medio siglo con consecuencias de abandono y desplazamiento.Oscar Iván propone una profunda reforma en educación. Regresar a la jornada única, con el fin, no solo de educar, sino adiestrar en actividades deportivas, lúdicas y técnicas a nuestra juventud buscando aprovechar mejor su tiempo alejándolos de tentaciones delictivas que el tiempo ocioso cultiva. Es el primer paso hacia un tejido social alejado de violencia.La reducción del presupuesto de defensa debe reasignarse hacia la educación apalancando el mejoramiento de la infraestructura física escolar. Se dotaran nuevos espacios, se integraran avances tecnológicos al sistema y se mejorará el nivel de docentes para educar ciudadanos competitivos en el contexto global. La provincia es la más beneficiada con la reforma educativa.Oscar Iván Zuluaga y su fórmula vicepresidencial, Carlos Holmes Trujillo, son hijos de la provincia.A diferencia, la fórmula capitalina de Santos y Vargas Lleras mantendrán la posición dominante del centralismo. Posiblemente seguirán realizando reuniones de la Alianza del Pacifico en Cartagena o en Bogotá. Continuarán nombrando altos consejeros para asuntos regionales ilustres capitalinos de estirpe. Vendrán a las regiones con la misma actitud feudal del último cuatrienio. El norte del país seguirá siendo Sopo, el sur Soacha, el oriente Monserrate y el Occidente el Aeropuerto El Dorado.Oscar Iván y Carlos Holmes como hijos de la provincia colombiana tienen claridad sobre la problemática regional, alejada de la concentración capitalina rampante que no permite una descentralización y desarrollo regional efectivo. Lucharán por un desarrollo equilibrado que permitirá potencializar armónicamente las regiones a niveles extraordinarios.Por ello votaré por la provincia; Oscar Iván Zuluaga y Carlos Holmes Trujillo.geulloa@hotmail.com @geulloa