Una generación perdida…EditorialObjetividad e imparcialidad ciudadana genera no muy buenos resultados para Cali, lo que nos debe preocuparLos caleños que han vivido como líderes, dirigentes y ciudadanos en las décadas de los 80, 90 y hasta este 2014; recibido educación y acciones culturales y sociales semejantes, deben calificar lo que ha pasado en todos estos años, ante la realidad socioeconómica de la ciudad. Este hecho si se hace con objetividad e imparcialidad ciudadana genera no muy buenos resultados para Cali, lo que nos debe preocupar.La generación perdida no es el grupo de notables escritores americanos que vivieron en Europa, encabezada por Ernest Hemingway, ni es una escuela literaria que presta atención a la problemática social, es el grupo numeroso de caleños que han estado en el liderazgo empresarial, gremial, profesional y político de la ciudad, en las últimas décadas, con contadas excepciones. Esta dura calificación se hace por las equivocadas ejecutorias públicas y privadas que tienen al Municipio, cuasi – quebrado, sin un norte claro.La informalidad y el desempleo llegan al 68% de los caleñosHoy los Caleños no le dan la verdadera importancia al Pacífico, adicionalmente la vocación no está clara frente a una ciudad de servicios que se viene hinchando desde finales de los 70; el transporte masivo tiene más problemas que soluciones, el desarrollo urbano es caótico y sin respuesta suficiente a la subnormalidad en los 4 puntos cardinales;somos la ciudad más violenta del país, el agua está en crisis desde hace 14 años, la infraestructura educativa obsoleta, la salud pública tiene unas ESEs como nido de burocracia más que de servicios y la recuperación de la malla vial no tiene los recursos para hacerla. La informalidad y el desempleo llegan al 68% de los caleños, según un estudio del mismo Ministerio de Trabajo y la Alcaldía de Cali, lo que origina unos índices de pobreza y miseria que se palpan deambulando por el espacio público de la ciudad.Problema del agua se les convirtió en un cáncer, que se gestó desde el año 2000 y que aún no tiene el tratamiento adecuado. Emcali sigue en el ojo del huracánHace casi 20 años un grupo de empresarios lideró un proyecto de generación eléctrica al que le denominó Termoemcali, que lo aprobaron un puñado de políticos vallecaucanos a pesar de las advertencias del Ministro de Minas de entonces y posteriormente se convirtió en un detrimento al patrimonio superior a $1 billón, que salieron de las arcas de la tesorería de Emcali y que quebraron la empresa. Este hecho y otros originaron la intervención por 14 años de Emcali, que tambien fue mal manejada y pocos protestaron y hoy la Empresa sigue en gravísimos problemas financieros según fuentes de la Contraloría y Personería Municipal. La Empresa de Servicios Públicos de Cali hoy no sabe qué hacer con las Telecomunicaciones para el futuro de Cali y el problema del agua se les convirtió en un cáncer, que se gestó desde el año 2000 y que aún no tiene el tratamiento adecuado. Emcali sigue en el ojo del huracán.Hace 36 años el alcalde Escobar Navia y el Concejo de la epoca crearon el STM y Protrans; hace 17 años, mediante un documento CONPES suscrito a finales del gobierno del Presidente Samper, se inició el proceso de darle un sistema de transporte masivo a la ciudad, soportado en un tren ligero sobre la línea férrea y un ramal del centro al oriente de la ciudad. En el 2002, hace 12 años, se cambió el proyecto y comenzamos la inconclusa carrera de dar un sistema de buses articulados MIO, el que no encuentra punto de equilibrio ni la aceptación ciudadana. Hace 2 años los Senadores German Villegas y Roy Barreras recibieron de parte de las directivas de Metrocali las necesidades de $1 billón para salvar a Metrocali, finalizando el 2014 los recursos no aparecieron y el problema se centró en los operadores, más que en los usuarios. El 2015, el MIo nos recibe con alzas de tarifas. Hoy el MIO es inviable técnica, económica y financieramente.Hoy el MIO es inviable técnica, económica y financieramenteHace 6 años la ciudad se embarcó en un plan de desarrollo urbano con la valorización, denominado 21 Megaobras, costo de $ 867 mil millones, se cobraron y pagaron, se hicieron algunas sin estudios y hoy el valor de la obras sin poder contratar por la ausencia de disponibilidad presupuestal supera el $1billón. El Municipio debe cumplirles a los Caleños con estas obras, pero actualmente se han contratado varias para ser canceladas entre el 2016 y el 2020 y seguramente la Avenida Circunvalación del Sur, la doble calzada de la Carretera al Mar, la salida a Jamundí y otras, queden para el cuatrenio 2020-2024. Si se dijera la verdad y llevara las obras faltantes como obligación de hacer, el marco fiscal de mediano plazo del Municipio, sería inviable.No hemos sido capaces de parar la hemorragia de malas actuaciones administrativasEste panorama no es observar lo malo de Cali, claro que somos optimistas, pero debemos colocarle una dosis de realismo, no hemos sido capaces de parar la hemorragia de malas actuaciones administrativas, sin el soporte financiero y lo más grave aún sin los estudios técnicos que demuestren la factibilidad de los proyectos de ciudad. Por supuesto que la recuperación del Distrito de Aguablanca es un hecho positivo de más de 3 décadas, lo mismo el crecimiento de una nueva ciudad de servicios con urbanizaciones y edificios modernos, pero nuestra realidad social y económica es una y es a ella a la que nos estamos refiriendo. No somos capaces de recuperar los ejidos y el patrimonio público, por el tapen – tapen. Pocos salvaron a la ciudad, de otro elefante blanco como la denominada Autopista Bicentenario que cosrtaba US 600 millones y sin estudios la aprobaron 2 veces en el Concejo, con el apoyo de empresarios, medios de comunicacion y politicos. Después de alcaldías cuestionadas de 1995 al 2011, es decir 17 años, llegó Rodrigo Guerrero como la gran esperanza de la ciudad, desafortunadamente los problemas estructurales de la ciudad aquí enumerados no tuvieron la "medicina" adecuada en 3 años y no tienen solución. No dejaremos de resaltar su deseo de acertar, jerarquía y honorabilidad, virtudes necesarias, pero no suficientes, para una Cali, ciudad compleja, enredada en el interes individual, la excluyente tradicion y la cultura del narcotrafico no desaparece..Cali se le trata como un pueblo grande, perdimos liderazgo Nacional, respetabilidad como ciudadCali se le trata como un pueblo grande, no tenemos Plan Vial, el POT muy distante de lo que necesita Cali, las decisiones son irresponsables desde el Concejo y la alcaldia ( MIO, Megaobras, Termoemcali, agua, etc ), perdimos liderazgo Nacional, respetabilidad como ciudad y dejamos de ser altamente atractivos para propios y extraños. Ah se nos olvidaba, somos la capital de la salsa.Ojala que podamos corregir nuestro rumbo, porque el modelo del binomio Alcalde – Concejo debe ser modificado, por una sinergia colectiva de todos en beneficio del interés general., para que no nos llamen como " Generación perdida…". A trabajar con otro rumbo, para parar el crecimiento de una ciudad caotica en superpoblacion y necesidades insatisfechas. Uncategorized