Por: María Eugenia Upegui S.
Abogada experta en seguridad social
SaludCoop E.P.S. empezó operaciones de 1995; y tras la adquisición en de las E.P.S. CRUZ BLANCA Y CAFESALUD en los años 2001 y 2002 respectivamente, empezó a proyectarse como la E.P.S. más grande del país.
Perteneciente al sector cooperativo, se dedicó a reinvertir sus recursos en infraestructura y tecnología médica. Hacen parte del grupo económico SaludCoop entre otras, empresas productoras de medicamentos, de suministros hospitalarios, y cerca de 32 clínicas en el país. SaludCoop E.P.S. desbordó las funciones del aseguramiento en salud conferidas por la ley (entendido éste como la administración del riesgo financiero, la gestión del riesgo en salud, la articulación de los servicios que garantice el acceso efectivo, la garantía de la calidad en la prestación de los servicios de salud y la representación del afiliado ante el prestador y los demás actores, sin perjuicio de la autonomía del usuario); y se dedicó a concentrar en sí misma, todo lo relacionado con el servicio público de salud. Concentración prohibida expresamente en la Ley, en particular en la 1122 de 2007 que expresamente señaló que las E.P.S. no pueden contratar directamente o a través de terceros, con sus propias IPS más del 30% del valor del gasto en salud .
A pesar de ser de conocimiento público la integración vertical que venía dándose desde varios años atrás en la E.P.S. SaludCoop; sólo ésta semana se dió su intervención, tras comprobarse por la Superintendencia Nacional de Salud, que sus estados financieros habían sido alterados, pues la misma presenta un exorbitante déficit, y que los recursos que recibía la entidad para la atención de los afiliados, se destinaban a otras inversiones, entre ellas en el extranjero (Los recursos de la seguridad social no pueden ser destinados a fines diferentes a ella).
El país evidencia la paquidermia de los organismos de control frente a las entidades que prestan el servicio público de salud, pues de lo contrario, cerca de una cuarta parte de los afiliados al régimen contributivo en salud, no estarían preocupados por la continuidad en la prestación de su servicio de salud con ocasión de la intervención de SaludCoop.
Es realmente preocupante el panorama del sistema de seguridad social en salud, el cual se enfrenta a diario a defraudaciones, desviación de recursos, un mayor número de afiliados subsidiados frentes a los que contribuyen, etc. Urge una reforma estructural al sistema, y esta es la oportunidad para que repensemos la figura de las E.P.S. y demás entidades que hacen parte del mismo, porque cuando la seguridad social está en manos de entidades privadas, se desdibuja su naturaleza de servicio público, y se opera como un negocio; además, a caso en la forma que fueron concebidas por la Ley 100 de 1993, no son las E.P.S. más que un intermediario del sistema?