Miniobras Por Benjamín Barney Caldas Arquitecto de la Universidad de los Andes con maestría en historia de la Universidad del Valle, y Profesor Titular (Jubilado) de la misma. Docente en la San Buenaventura y la Javeriana de Cali, el Taller Internacional de Cartagena y la Escuela de arquitectura y diseño, Isthmus, en Panamá, e Isthmus Norte, en Chihuahua. Miembro de la Sociedad Colombiana de Arquitectos, la Sociedad de Mejoras Públicas de Cali y la Fundación Salmona.Hay que insistir en unas pocas medidas que son muy económicas y mejorarían el tránsito en la ciudad, y por supuesto deben ser parte del Plan Vial y de Transporte. Cuando finalmente este se haga debe ser la otra cara de la misma ciudad, junto con el Plan de Usos del Suelo, y sus normas complementarias, constituyendo entre los dos un verdadero Plan de Ordenamiento Territorial, el que ahora no es ninguna de las tres cosas, ni es a largo plazo ni, infelizmente, hay quien lo lleve a feliz término.Para principiar, todas las calles de dos o tres carriles, que son la gran mayoría en Cali, deberían ser de un solo sentido, o, si es inevitable, entonces se debe prohibir estrictamente el estacionamiento en ellas, al menos en las horas pico. Considerando además que se deben regularizar sus calzadas eliminando esas seudo bahías que tienen con frecuencia, y que algún día (soñar no cuesta nada) se van a ampliar y arborizar los andenes por toda la ciudad.Todos los carriles se deben empatar de tramo en tramo y deben tener el mismo ancho a lo largo de cada recorrido, y el de la derecha ser mas amplio para dejar espacio para motos y bicicletas y paradas cortas. Es del todo insólito que las Autoridades, y no sólo las del tránsito, no se den cuenda de lo inútil que es demarcar carriles que no se pueden seguir o por los que no cabe un carro grande. O que ya están borrados hace años o que nunca se pintaron.Todas las vías con separador deben tener sus dos calzadas en sentido contrario. Lo contrario confunde y llega a ser peligroso tanto para los peatones como para los vehículos, a los que se le aparecen repentinamente carros en un sentido que no tienen las otras calles, que son la mayoría. Además que el paso de una calzada a la otra causa problemas en ambas. ¿Será que las Autoridades nunca mercan en el Carulla de San Fernando? Y las calzadas únicas pero con doble sentido deben tener separador asi sea de pequeños resaltos;Todos los pasos peatonales, ya sean simples pasos, cebras o pasos pompeyanos, deben ser a continuación de los andenes respectivos, pues los peatones, mas faltaba, no se desvían para pasar por ellos cuando están localizados a un lado. ¿Estarán tan ciegas las Autoridades que no han visto lo que sucede en los nuevos pasos pompeyanos de la Calle Quinta, los que se usan para estacionar vehículos incluyendo motos de la Policía?Finalmente, todos los “policías acostados” deben cambiarse por pasos pompeyanos al final de la cuadra en la que estén ubicados, reduciendo igualmente la velocidad del transito vehicular, pero en donde serian útiles para que los peatones crucen caminando por las equinas, valga la redundancia, con mayor facilidad y seguridad, y no corriendo y por cualquier parte como ahora. Y en donde sean imprescindibles, poner reductores de velocidad y no incomodos resaltos.Son cinco medidas elementales amen de económicas en el mejor sentido de la palabra; es decir, cuya relación costo beneficio es de lo mejor. Pero por supuesto no les interesan a los contratistas de obras publicas ni a los políticos que les retribuyen sus aportes a sus campañas con contratos ¿Ha oído a algún candidato a la alcaldía o el Concejo hablar de esto? Pero lo inaudito es que parece que a los ciudadanos de Cali, peatones o automovilistas, tampoco les interesa ¿Será que no lo son a carta cabal? Uncategorized