Redacción
Cuando Angelino Garzón aún era vicepresidente de la República y su nombre empezó a sonar como posible candidato a la Alcaldía de Cali muchos lo daban como fijo ganador. Después, cuando dejó la Vicepresidencia y manifestó su intención de ser candidato a la Alcaldía de Cali o a la de Bogotá y fue incluido en las primeras encuestas, los resultados lo mostraban con mayor opción en la capital del Valle del Cauca que en la capital de la República.
Varios aspirantes a este cargo admitían en privado que si Garzón se lanzaba, ellos preferían no hacerlo
Le iba tan bien en las encuestas para la Alcaldía de Cali que varios aspirantes a este cargo admitían en privado que si Garzón se lanzaba, ellos preferían no hacerlo, porque no tenían nada que hacer frente a él.
Angelino Garzón cerró el 2014 con el 45% de intención de voto para la Alcaldía de Cali, según una encuesta divulgada en diciembre por la firma Gallup. El escenario no podía ser mejor para él, pues ninguno de los demás aspirantes incluido en esa medición superaba el 5%.
El 1 de marzo el Partido de la U, el único a través del cual Angelino Garzón puede inscribirse como candidato a cualquier cargo en las elecciones del 25 de octubre próximo, le dio el aval para la Alcaldía de Bogotá al exministro Rafael Pardo, con lo que Garzón quedó por fuera de la contienda en Bogotá.
Solo le quedaba a Angelino Garzón la opción de Cali, donde el Partido de la U aún no había entregado el aval, pero había otros precandidatos en competencia por la candidatura única del partido.
Contra todos los análisis jurídicos de su caso y a pesar de que el Consejo Nacional Electoral, mediante un concepto, le advirtió que solo podría inscribirse como candidato en las próximas elecciones si tenía el aval del Partido de la U, Garzón interpuso una acción de tutela ante el Tribunal Superior de Bogotá alegando la violación de su derecho a elegir y ser elegido, en la que reclamaba que se le permitiera inscribirse por firmas, pero la acción fue declarada improcedente.
De nuevo, el único camino que le quedaba a Angelino Garzón era el Partido de la U, pero el día que anunció que su acción de tutela fue declarada improcedente, dijo que no le interesaba pertenecer a ningún partido político y que consideraba que en justicia el aval de la U debería ser para uno de los tres precandidatos que estaban en competencia por el respaldo desde Partido desde febrero: Clara Luz Roldán, Roy Alejandro Barreras y Juan Guillermo Parra. Ese día Angelino Garzón se quedó por fuera de la contienda por la Alcaldía de Cali.
Pero la política es dinámica. No habían pasado dos semanas cuando en el mismo escenario en el que dijo lo anterior, el Hotel Intercontinental, Angelino Garzón fue presentado por el codirector del Partido de la U, Roy Barreras, como el candidato oficial de la colectividad a la Alcaldía de Cali.
La noticia produjo un terremoto político al interior del Partido de la U y también en otros partidos y en campañas independientes.
La primera reacción en las campañas de casi todos los demás candidatos fue de derrota, porque el considerado invencible ahora tenía aval y podía ser candidato, pero cuando se calmaron las aguas, la visión cambió y se empezaron a escuchar voces que decían: "Angelino es derrotable".
El desgaste
Varios aspirantes a este cargo admitían en privado que si Garzón se lanzaba, ellos preferían no hacerlo
En una encuesta revelada el 7 de mayo, después de su proclamación como candidato a la Alcaldía de Cali por el Partido de la U, Angelino Garzón marcó 30.2% de intención de voto. La medición fue realizada por Gallup, la misma que hizo la encuesta en la que Garzón había marcado 45 puntos en diciembre; es decir que perdió 15 puntos de intención de voto en cinco meses. ¿Qué pasó?
Varios factores pudieron incidir en la caída de Angelino Garzón.
La indecisión entre ser candidato en Cali y Bogotá fue vista como una actitud poco seria de Garzón, interpretada por analistas como un juego en el cual la decisión la tomaría según la posibilidad que tuviera de ganar en una ciudad o en la otra.
El cambio de opinión de Garzón frente al Partido de la U, al que renunció para luego aceptar el aval, también lo dejó mal parado; en repetidas ocasiones dijo que no pertenecía ni le interesaba pertenecer a ningún partido político y terminó regresando porque no le quedaba otro camino.
Varios aspirantes a este cargo admitían en privado que si Garzón se lanzaba, ellos preferían no hacerlo
La alianza con el senador Roy Barreras también afectó a Angelino Garzón, porque su gran capital ha sido siempre la independencia y la transparencia y terminó convertido en el candidato de un político que es relacionado por muchos con el transfuguismo, la mermelada y la lagartería.
La alianza con Roy Barreras hizo que Angelino Garzón tuviera el aval del Partido de la U, pero no el respaldo del movimiento de mayor peso electoral de ese Partido, el grupo de la exsenadora Dilian Francisca Toro, que no lo acompaña.
Además, durante el tiempo en el que Angelino Garzón estuvo por fuera de la contienda por la Alcaldía de Cali debido a la falta de un aval se fortaleció la aspiración del precandidato liberal Roberto Ortiz y surgió la candidatura independiente de Maurice Armitage, que aunque sean una de origen popular y otra respaldada por las élites empresariales, son de corte social y le compiten a Garzón en su nicho electoral.
Acción de repetición
La próxima encuesta será clave para saber si Angelino Garzón se mantiene o sigue perdiendo intención de voto
En la última semana resurgió el tema de la acción de repetición que debe interponer la Gobernación del Valle contra Angelino Garzón por el detrimento patrimonial que le causó al Departamento su decisión como gobernador de no pagar la sanción por la cancelación del contrato de la vía Cali-Candelaria. Esto podría obligarlo a responder con su patrimonio por 21.000 millones de pesos y si no los paga se expondría a una sanción de la Contraloría que lo dejaría inhabilitado para ejercer cargos públicos.
Por eso Garzón escribió esto en su Twitter: “Si sale acción de repetición por mi lucha contra la carretera que nunca se construyó, le solicitaré a la U que no me inscriba como candidato”. ¿Se sentirá derrotable? La próxima encuesta será clave para saber si Angelino Garzón se mantiene o sigue perdiendo intención de voto, o en otras palabras, si es invencible o derrotable.