Redacción

Desde que Mauricio Guzmán fue elegido alcalde de Cali, hace ya 18 años, el Partido Liberal no ha vuelto a ganar este cargo y en todas las elecciones posteriores ni siquiera uno de sus militantes ha tenido opciones reales de triunfo. Desde entonces el candidato liberal ha terminado adhiriendo a uno de los punteros ante los malos registros en las encuestas y la falta de respaldos.

En las elecciones legislativas de marzo de 2014 el Partido Liberal ganó las elecciones en la capital vallecaucana, fue el más votado para Cámara y Senado en la ciudad. En ese momento los analistas políticos hablaron del fortalecimiento de los liberales y los directivos locales de la colectividad concluyeron que había llegado la hora de recuperar la Alcaldía de Cali.

Fue tal el fervor rojo que se inscribieron cinco precandidatos en busca del aval del partido para la Alcaldía

Fue tal el fervor rojo que se inscribieron cinco precandidatos en busca del aval del partido para la Alcaldía: Carlos Pinilla Malo, Carlos Andrés Clavijo, José William Garzón, Roberto Ortiz y Miguel Ángel Arias. El favorito para quedarse con el aval y para ganar la Alcaldía era el médico Carlos Pinilla que tenía el respaldo de la clase política liberal. Como no había figuras en la contienda y Nicolás Orejuela, el candidato de los empresarios hasta ese momento se veía sin ninguna opción, los liberales estaban seguros de que Pinilla, aunque poco conocido por los caleños, sería el próximo alcalde porque contaba con respaldos en los partidos de la unidad nacional y la maquinaria le bastaría para ganar.

En ese momento los liberales estaban seguros de que Angelino Garzón no podría ser candidato, no contaban con que el copresidente del Partido de la U, Roy Barreras, le daría el aval al ex vicepresidente ni con que los empresarios tenían otra carta para jugar (Maurice Armitage) ni que al interior del mismo Partido Liberal surgiría un candidato más fuerte que Carlos Pinilla: el empresario de apuestas y ex representante Roberto Ortiz, que se trepó en las encuestas marcando en el primer y segundo lugar. El repunte de Ortiz llevó a que los directivos liberales no pudieran darle el aval a Pinilla, que terminó retirando su precandidatura. José William Garzón y Miguel Ángel Arias también se retiraron. Quedaron solo Clavijo y Ortiz en la competencia por el aval.

Con este panorama, el que sea escogido entre Carlos Clavijo y Roberto Ortiz tendrá el aval pero no la maquinaria del Partido Liberal

Mientras todo esto pasó los liberales que estaban con Pinilla terminaron por irse a otras campañas. Clementina Vélez, Nancy Castillo y hasta el mismo Carlos Pinilla terminaron en la campaña de Maurice Armitage. Fabio Arroyabe se fue a donde Angelino Garzón.

Con este panorama, el que sea escogido entre Carlos Clavijo y Roberto Ortiz tendrá el aval pero no la maquinaria del Partido Liberal.
Además de escoger a uno de los dos precandidatos hay otra posibilidad sobre la mesa: que el el Partido Liberal no tenga candidato propio y desde Bogotá se dé la orden de apoyar a Maurice Armitage.

Después de tener la Alcaldía de Cali en sus manos, las ambiciones personales y la torpeza tienen al Partido Liberal de nuevo a punto de quedarse por fuera de las opciones. Todo dependerá de la decisión que se tome en los próximos días sobre el aval.