Por Andrés Mejía

El Proyecto Loon de Google comenzó con una prueba piloto en junio de 2013, se lanzaron treinta globos desde la Isla Sur de Nueva Zelanda y se transmitió Internet a un pequeño grupo de probadores piloto. Desde entonces, la prueba piloto se expandió para incluir a un número mayor de personas en un área más amplia. De cara al futuro, el Proyecto Loon seguirá expandiendo la prueba piloto, con el objetivo de establecer un anillo de conectividad ininterrumpida en latitudes del hemisferio sur, de manera que los probadores piloto de estas latitudes puedan recibir servicio continuo mediante Internet a través de un globo.

Los globos del Proyecto Loon viajan a 20 km de la superficie terrestre, en la estratósfera. Los vientos de esta zona están estratificados, es decir, hay muchas capas de viento que varían en dirección y velocidad. El Proyecto Loon utiliza algoritmos de software para determinar adónde deben dirigirse los globos y, luego, los traslada a una capa de viento que sople en la dirección buscada. Como los globos se desplazan con el viento, es posible dirigirlos para formar una gran red de comunicaciones.

Ubicada en el límite con el espacio exterior, a una altura de entre 10 y 60 km, la estratósfera presenta desafíos únicos de ingeniería: la presión atmosférica es del 1 % con respecto al nivel del mar, y, a su vez, una atmósfera más delgada ofrece menos protección contra la radiación UV y los cambios bruscos de temperatura, la cual puede alcanzar los 80 °C bajo cero. Por medio de un diseño cuidadoso de la cubierta de los globos, que permite hacer frente a esas condiciones, el Proyecto Loon logra aprovechar los vientos invariables de la estratósfera y permanecer por encima de los fenómenos meteorológicos, de la vida silvestre y de los aviones.

Muchos de nosotros vemos Internet como una comunidad global. Pero la realidad es que dos tercios de la población mundial todavía no tienen acceso a Internet. El Proyecto Loon se compone de una red de globos que viajará sobre el límite con el espacio exterior. Está pensado para conectar a las personas que habitan zonas remotas o rurales, para llegar a las zonas con falta de cobertura y para que las personas puedan volver a tener Internet después de una catástrofe.

Tecnología

Los globos del Proyecto Loon flotan en la estratósfera y superan dos veces la altura de los aviones y del clima. En la estratosfera, hay muchas capas de viento, cada capa varía en dirección y velocidad. Los globos Loon ascienden o descienden a la capa de viento que sopla en la dirección de viaje deseada para ir a donde ellos necesitan. Al asociarnos con empresas de telecomunicación para compartir el espectro celular, permitimos que las personas se conecten a la red del globo directamente desde sus teléfonos y otros dispositivos habilitados para LTE. La señal pasa a través de la red del globo y vuelve a la Internet global en la Tierra.

El Proyecto Loon en Brasil.

Progreso del Proyecto Loon

El Proyecto Loon comenzó con una prueba experimental en junio de 2013 en Nueva Zelanda, donde un pequeño grupo de pioneros del proyecto probó la tecnología. Los resultados de la prueba piloto, así como las pruebas posteriores en Nueva Zelanda, el Valle Central de California y el noreste de Brasil, se están utilizando para mejorar la tecnología como preparación para las próximas etapas del proyecto.