*Redacción
Tras ganar su segundo título mundial consecutivo en el triple salto, Caterine dijo que su carrera tiene un próximo objetivo y es el oro olímpico en Río de Janeiro en 2016, ya que sería "la cereza que le falta al pastel".
"Mi secreto es la sangre, las ganas de ganar, la responsabilidad que pongo cuando compito. Rio es uno de mis grandes objetivos, Rio es la cereza que le falta al pastel, seguiré trabajando para eso", expresó la bicampeona mundial del salto triple en rueda de prensa en el estadio Olímpico de la capital china.
"Toda competencia tiene una gran importancia, pero el Mundial era especialmente importante porque quería seguir manteniendo el título para mi país. Ameritaba estar bien y disfrutarlo, tenía que hacer cada salto de forma excelente. Estoy muy contenta con el resultado", aseguró.
La antioqueña llegó con una mejor marca anual de 14,88 metros, se impuso en la final con 14,90 metros, conseguidos en el cuarto de sus seis intentos. Segunda fue la israelí Hanna Knyasyeva-Minenko (14,78) y el bronce para la kazaja Olga Rypakova (14,77).
Caterine informó que en el quinto y el sexto salto, pretendía mejorar su marca personal, los 15,31 metros que firmó el pasado año en la reunión de Mónaco.
"Mi gran objetivo hoy era obtener la medalla de oro. Luego intenté superar mi marca personal, esa era la sed que tenía. Estoy contenta. Seguiré luchando para mejorar mi marca personal en el futuro", prometió.
"Tenía un gran sueño, escribir mi nombre junto a los de grandes nombres del deporte. Ahora disfruto de una gran oportunidad. Es algo bonito, que te da la oportunidad de crecer", dijo… "Estoy muy satisfecha y feliz. Todo mi trabajo iba dirigido a esta medalla. Me hubiera gustado haber saltado un poco más lejos. Me da una gran alegría hacer feliz a mi país. Amo el triple salto", dijo la reina absoluta de esta prueba en los últimos tres años.