El Jodario
Por Gustavo Álvarez Gardeazábal
La ley ya no permite sacar candidatos del tarjetón electoral, pero por circunstancias que van desde la poca acogida hasta el manipuleo de las encuestas, muchos están a punto de hacerse a un lado de la contienda para no ir a hacer el ridículo o perder más plata.
En Bogotá, el asunto se ha ido aclarando por sí solo, pero no dejan de escucharse voces para que Pachito Santos retire su candidatura a favor de Peñalosa, quien ya fue uribista, y así cerrarle definitivamente el paso a Clara y a Pardo.
En Cali, Armitage, el candidato de la oligarquía, no ha podido ni parece que podrá pactar con los candidatos de menor opción porque tiene un problema congénito de comportamiento que le impide ser generoso en la negociación y si es política, peor. Pero si lo llegara a hacer con la negra Urrutia y con Holguín, de fijo sería el alcalde.
En Medellín, el vértigo está llevando a obligar a Fajardo y a Uribe a tomar determinaciones que se veían imposibles hace dos meses. Dado que el Grupo Empresarial Antioqueño y Fajardo coinciden en su manifiesta antipatía por Luis Pérez (quien encabeza las encuestas para gobernador), mueven cielo y tierra para intentar que no gane.
La decisión está en a quién retiran. Como parece que Uribe se gana la alcaldía con el cara de revólver de Vélez, Fajardo pide que Uribe retire al hijo de Guerra de la puja por gobernador.
Pero si Uribe y el antiguo sindicato de plutócratas paisas se comprometen a apoyar la presidencial de Fajardo, tienen que retirar a Federico Restrepo y ahí sí derrotarían a Luis Pérez.
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