Peláez otra vez

El Jodario

Por Gustavo Álvarez Gardeazábal

Ha sido tal el influjo de Hernán Peláez en la radio colombiana que el anuncio de su retiro definitivo de Caracol ha servido para especular sobre su inmediato futuro hasta el extremo de pretender impedir el ensayo que, sabiamente, quiere realizar quedándose todo un mes haciendo nada, para ver si es capaz de resistir.

Quienes hemos trabajado a su lado sabemos que así como puede ser capaz de gozársela girando solamente  en su entorno  familiar y alrededor de sus nietos,Peláez es capaz también  de asumir el mando de otro buque y de volvernos a dar una demostración de su inmenso poderío para captar oyentes y manejar coequiperos tanto o más peligrosos que yo.

Para estarse en su casa va a tener la posibilidad del programa de Fox los lunes y así no desvincularse del todo de su mundo futbolístico. La colección de música que le dejó a Caracol cuando se retiró el año pasado de La Luciérnaga, la tiene en su casa, y en su cabeza, para felicidad de sus amigos melómanos y para su goce eterno de bolerista.

Pero si se le mide a conducir otro buque, dentro del mismo Caracol o en otra empresa radial, tiene que abstenerse de asociarse con gente como yo porque la capacidad del presidente Santos para atajarlo se aumentaría peligrosamente donde tuviera a un Gardeazábal a su lado.

Aprendí tanto de él y me sentí tan honrado con su lealtad y su apoyo, que es la hora de ejercer sus enseñanzas. Debo hacerme a un costado para que la mesa de Juan no se entrometa  en su tranquilidad  familiar. Es mi granito de arena para ayudar a reconstruir el pedestal de ese monstruo de la radio que todos en Colombia  seguimos necesitando.(PUBLICADO EN adn, NOV 27 2015)

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