Entre el virus del Zika y el racionamiento de energiaPor Luz Betty Jimenez De Borrero / Pablo A. Borrero V.Aunque estas dos aspectos son diferentes por su naturaleza, puesto que el uno se refiere a la salud y el otro afecta el consumo de energía, ambos inciden directamente en la vida de los ciudadanos, en su bienestar general e individual, que hoy no encuentran las razones para que el gobierno de turno no haya podido controlar eficazmente sus efectos perniciosos y en el caso de la energía el destino y la aplicación eficiente de los recursos económicos, financieros, técnicos y humanos, para mitigar por lo menos la acción del fenómeno climático del Niño, no obstante que los usuarios de los servicios públicos han pagado a través de la tarifa de energía el denominado cargo por confiabilidad a fin de evitar un eventual racionamiento eléctrico, el cual según algunos estimativos asciende a 18 billones de pesos entregados desde el 2006 al 2015 a las empresas generadoras públicas y privadas del sector energético.Por otra parte, tampoco el gobierno asumió de manera integral y oportuna la lucha contra el virus del SIKA, el cual hoy se ha difundido profusamente en varias regiones del país en una cantidad calculada hasta ahora en 47.000 casos entre los que se encuentran infectados por el mosquito aedes aegypti, principalmente niños, ancianos y mujeres embarazadas.Mientras tanto el presidente Santos anuncia con bombos y platillos un conjunto de medidas de última hora que obligan a los colombianos a ahorrar energía, que por cierto muy poco ayudará a evitar el posible racionamiento, que según la empresa XM, encargada de monitorear la operación del sistema de interconexión eléctrica nacional dicho evento puede resultar inevitable si no se procede a adelantar un racionamiento programado del 5% al 10% de la demanda total en razón de la debilidad del sistema, lo que significaría una suspensión del servicio eléctrico de por lo menos 2 horas diarias durante 5 ó 6 semanas aproximadamente, recomendación ésta que ha sido aplazada por el gobierno a la espera de que los usuarios ahorren voluntariamente el consumo de energía.De otro lado el ministro Gaviria de Salud ha manifestado que el combate contra el mencionado zancudo se ha realizado a pesar de que el mismo constituye un problema global, es decir, que rebasa las fronteras patrias, con lo cual pretende construir toda una disculpa que no tiene justificación de carácter médico ni humano, frente a las criticas que un grupo de congresistas le han hecho por la forma y manera como ha enfrentado este flagelo en la actualidad.Los ciudadanos deben entender que la responsabilidad por lo sucedido corresponde en buena parte al gobierno de Santos y demás autoridades que como en el caso de la energía le dejaron las manos sueltas a las empresas públicas y privadas para disponer alegremente de los recursos provenientes del cargo de confiabilidad para atender otras necesidades diferentes a la de expansión y mantenimiento de las generadoras, creándose a la postre ante el anunciado cambio climático, un desequilibrio entre la oferta potencial de energía y la demanda solvente de consumo q ue tiene al país al borde del apagón, agravado además por otras circunstancias como son el incremento del precio de escasez del combustible utilizado por las térmicas para su funcionamiento, a todo lo cual habrá que agregar los daños de la hidroeléctrica de Guatapé que afectaron a otras plantas generadoras de energía.Todos estos sucesos desafortunados para el país y para los colombianos en general están muy relacionados con la improvisación, la manipulación y la aplicación de un modelo energético y de salud que compite por lograr una posición dominante en el mercado a la caza de nuevos clientes en procura de obtener pingues ganancias y beneficios políticos contrarios al principio constitucional de defensa del interés general que deben atender las empresas estatales y privadas, a la par con el cumplimiento de la función social y ambiental que deben asumir las generadoras eléctricas y las empresas del sector de la salud tanto públicas como privadas de carácter nacional e internacional.Veeduria Ciudadana por la Democracia y la Convivencia SocialEl Control Ciudadano Sobre la Gestión Pública es Condición Indispensable para el Ejercicio de la Democracia y la Convivencia Social Uncategorized