Luis Eduardo Echeverri Franky
Ingeniero Civil, miembro de una generación que ama el deporte
El Giro de Italia 2020 vivió una apasionante séptima jornada, sobre 143 kilómetros entre Matera y Brindisi. En los primeros tramos de carrera se rompió el pelotón y la jornada se desarrolló a una altísima velocidad hasta la línea de meta.
El viento provocó nerviosismo y una frenética lucha de posiciones en el grupo principal, que derivó en un ritmo alto. Los abanicos, con gente como Fuglsang o Yates descolgados, llevaron a que el pelotón tirara a toda máquina…. Incluso, las ráfagas siguieron presentes durante el recorrido, lo que mantuvo permanentemente aleta al pelotón principal.
La media de velocidad en la primera hora de carrera fue de 51.5 km/h. Los ciclistas corrieron los 148 km como si fuera viernes por la tarde, recién hubieran cobrado y hubieran quedado con sus parejas y amigos para tomarse unas cervezas. Querían acabar rápido con la faena!!
Se habían quedado cortados: Fuglsang, Majka, Bilbao, Pozzovivo, Yates y Vanhoucke Llegaron a estar a un minuto de los punteros con apenas 20 km transitados. Sin embargo 30 km más adelante, tras brutal persecución ya estaban a punto de conectar con el lote de avanzada al menos Fuglsang (Astana), Bilbao (Bahrain) y Majka (Bora), que, en efecto, lo consiguieron a 96 km de la llegada.
El lote rodaba muy rápido (la segunda hora de carrera también estuvo por encima de los 51 km/h) unificado de nuevo, pero justo al paso de la pancarta de 45 km a línea de meta, el estrechamiento de la vía (por la misma instalación de la pancarta publicitaria) causó una caída masiva y el pelotón se partió en varios grupos
Con 5 km a meta se preparaban los trenes para acomodar a sus hombres rápidos. Gaviria y Viviani se quedaron muy atrás, bastante mal ubicados desde la entrada al último km y, en cambio, los compañeros del francés Demare lo lanzaron de manera impecable.
Demare ganó una vez más con extrema facilidad consiguiendo su tercera diana con solo 7 días de competencia. No tiene rival ahora mismo el francés al sprint en este Giro. Segundo entró Sagan una vez más y tercero Matheus. Por cierto, los 47 minutos finales también se corrieron por encima de los 51 km/h, acabándose por asistir a la etapa con promedio más alto de esta carrera en toda su historia.