Luz Betty Jiménez De Borrero / Pablo A. Borrero V.


La crítica situación financiera de Cali con el elevado endeudamiento y sus finanzas comprometidas, la situación socio-económica con desempleo y pobreza, aunque el maquillaje de la ciudad la “camufla”, vislumbra dificultades en el ejercicio del poder para los próximos años toda vez que se pretende ejecutar una serie de nuevas obras sin que estas pasen por la discusión y análisis de los caleños que tienen observaciones sobre las mismas.

Está tan golpeada la población caleña que poco a poco empieza a levantarse y hacer oír su voz, en ejercicio de los derechos constitucionales y de los fines y principios del Estado Social de Derecho a los que deben ceñirse los mandatarios.

Al respecto, existen muchas dudas en el seno de la comunidad caleña en torno a la realización de un conjunto de obras que el alcalde electo emprenderá durante su mandato que se iniciará el 1 de enero de 2024.

El alcalde electo dice que con la suma de 290 mil millones de pesos se podrán recuperar 300 kilómetros de vías, incluyendo sus andenes y bicicarriles. A la vez, se compromete a terminar la prolongación de la avenida Ciudad de Cali, la avenida Circunvalación, la ampliación de la vía Cañas Gordas, la vía al mar, la recuperación de la avenida sexta, la transformación de la carrera 10 entre calles 5 y 25 para convertirla en el eje de la Renovación Urbana. “…Igualmente le vamos a cambiar la cara al centro de la ciudad de Cali”.

Así mismo el alcalde electo dice que sacará adelante la construcción del tren de cercanías con la gobernadora electa Dilian Francisca Toro, obra esta que será la base de un futuro metro que se justifica con el hecho de que gran parte de las personas que trabajan en Cali viven en zonas aledañas a la ciudad.

Vale la pena señalar que el alcalde electo Eder muy poco o nada se refiere a la parte rural del municipio de Cali que constituye el 75% de su territorio.

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En fin de cuentas, nadie sabe de donde el alcalde electo obtendrá los recursos fiscales para construir todas estas obras de infraestructura vial que en la campaña se comprometió a ejecutar durante su mandato que le otorgaron sus electores, lo que a primera vista constituye una apuesta alegre de su gobierno que va más allá de las posibilidades de convertirlas en realidad.

Está claro que la ciudad demanda de un verdadero plan estratégico en materia vial que sea posible realizar, aprovechando una serie de posibilidades para mejorar la movilidad y la conectividad de la ciudad. Sin embargo, lo planteado por el alcalde Eder no deja de ser más que una ilusión en cuanto aspira ejecutar varias obras cuyo costo de financiación rebasa toda posibilidad de realizarlas, en tanto que la solución de los problemas del municipio se encuentra atravesada por una deuda con el sector financiero que limita sustancialmente la capacidad del municipio para realizar nuevas obras que el alcalde se propone ejecutar.

Por otra parte, no hay que olvidar que la actual administración del alcalde Jorge Iván Ospina deja sin terminar una serie de obras cuyo costo se podrá incrementar a partir de los denominados costos adicionales que la administración tendrá que pagar con los escasos recursos de que dispone para cumplirles a los contratistas de dichas obras.

A lo anterior, se suma la gestión administrativa a cargo del nuevo alcalde la cual no se puede reducir a la simple contratación de obras viales, en tanto existen otros compromisos con sectores económicos y sociales que demandan de la atención de la administración en materia de educación, salud, vivienda, recuperación del espacio público, continuación de las obras del Jarillón del Rio Cauca, recuperación del transporte masivo, etc.

 El progreso de la ciudad no depende simplemente de la construcción de una nueva red de infraestructura vial, en tanto que lo que se debe realizar debe contar con el beneplácito de sus habitantes que previamente las discutieron y analizaron con el alcalde y sus funcionarios quienes aceptaron sus propuestas y PRIORIZARON LAS OBRAS, basadas en estudios actualizados con las nuevas realidades sociales, económicas y acorde con sus necesidades e intereses individuales y sociales.


Veeduría Ciudadana por La Democracia y La Convivencia Social

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