Alex Sterling

Comunicador y escritor


La derrota de Roberto Ortiz estuvo marcada por la sorpresa. Todos esperaban un final reñido y la victoria para Eder terminó siendo clara mucho antes del cierre de los reconteos en las mesas. ¿Cuáles son las razones de su derrota?

Voy a dividir este análisis en dos:

  1. ¿Por qué perdió el voto de opinión?

Roberto Ortíz no lo construyó en el concejo y se alió con los concejales socios de Ospina. Llega al día de las elecciones cuidando un extraño récord de no comparecencia a los debates. Fue forzado a ir a unos cuantos en la recta final de su aspiración, pero nunca tuvo una campaña abierta a la discusión de ideas. Y ese es precisamente el gran problema del Chonto: la falta de ideas, de luces, de brillantez.

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Su proyecto de ciudad no satisface las miradas rigurosas de los expertos. No conoce ni proyecta soluciones a problemas fundamentales de la ciudad como la crisis fiscal o la desfinanciación del MIO. No habló con firmeza y detalle de los servicios públicos y sus urgencias inmediatas. Hay temas vitales que ni siquiera menciona o reconoce, como la protección del patrimonio arquitectónico de la ciudad.

No tuvo buena comunicación ni proyectos serios para los emprendedores, quienes buscan sobre todo un alivio fiscal y condiciones para el crecimiento con medidas ingeniosas y respaldadas por el oficio de un administrador público nato. Nadie con conocimiento profundo del problema de violencia en Cali cree que la solución pasa por blindar los carros policiales.

Roberto no puede posar como hombre de leyes, ni de ciencia, ni de libros, ante las élites económicas, culturales y políticas de la ciudad, incluyendo profesores y estudiantes, por lo cual, eso que llamamos voto especializado , culto se fue con Eder maoritariamente , Denis, incluso con Huérfano.

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  1. ¿Por qué perdió el voto popular?

En esta oportunidad, el cuento de las chonticas no caló , porque la realidad es que no tienen empleo estable y eso fue indiferente

El caleño de a pie tampoco parece ver con buenos ojos su no asistencia a los debates: lo ve como cobardía y eso, en las comunidades, se ve muy mal. Una ciudad en estado de emergencia como Cali no puede tener un alcalde vacilante, temeroso a los micrófonos, huidizo ante el debate.

La gente lo notó y se hizo preguntas, la más importante: ¿Por qué no quiere debatir? ¿Qué es lo que esconde? ¿Qué es lo que teme? Su falta de preparación fue evidente incluso para quienes tampoco están educados formalmente, ni conocen los asuntos de ciudad.

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Pero lo que terminó de enterrar la imagen pública del Chonto fue la respuesta al continuismo que es verdad , con guerra sucia, con tufo a guerra de clases sociales y muchas más cosas, , que planteó su campaña frente a Eder. Inapropiada y fatal para sus aspiraciones. Alli perdió, no hacer juego limpio.

Y perdió porque ese gigante apoyo de los concejales, no transmitió carisma en las reuniones, no entusiasmó. No puso a soñar y salió de su discurso plano y no convincente.

Para precisar, que el Chonto no aceptó un debate serio con los columnistas independientes de Caliescribe y si así fue con los periodistas de la ciudad, que preguntan con conocimiento tematico, dejo ver una brecha gigante de conocimiento, a pesar de sus 4 años en el Concejo.

¿Quién con el Chonto?

La base popular de los concejales lograron aceptable votacion, pero con más conciencia de clase estuvieronb con Danis y los oligarcas de raza, sumados a los arribistas de otros sectores, con Eder. ¿Dónde rasguña votos? ¿Cuál es su base? Podríamos decir que en el sector popular más impresionable, en las zonas de influencia de las maquinarias electorales que ha ido captando en su oficio político. Sus chonticas con  los escándalos de abuso laboral no fueron refutadas….

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Dilian apoyó timidamente a Roberto , sus 4 concejales se la jugaron con el Chonto, pero los dejó alborotados, porque la gente no copió lo suficiente.

¿Cuántas maquinarias estaban en competencia y quiénes las patrocinan?

Sea como sea, el Chonto no tuvo la potencia para impulsar maquinarias en los barrios a su favor. No pudo compensar su ausencia de carisma e inasistencia a los debates , ni con una propaganda clara y masiva, ni pudo enamorar a la ciudadanía más impresionable, que lo recuerda también por su inoperancia para detener la corrupción de Ospina desde el Concejo.

La falta de preparación desde todo punto de vista fue la protagonista en la derrota del Chontico hoy. Todos sus demás defectos se igualan con los de sus contendores, incluyendo la superficialidad de las propuestas, pero su falta de cultura y formación académica, fueron fatales en su estrategia comunicativa, base de toda victoria electoral en el mundo moderno.