Luz Betty Jiménez De Borrero / Pablo A. Borrero V.


La idea de tener un presupuesto equilibrado para un período determinado de tiempo en este caso para la vigencia fiscal del año 2018, implica que el capítulo de gastos no supere el de los ingresos ya que tendríamos un presupuesto deficitario, en tanto que sí ocurre lo contrario se obtendría un superávit. Por supuesto que la naturaleza económica y social del presupuesto depende de la composición de sus ingresos y la orientación de sus gastos, todo lo cual va a depender del carácter del régimen social y estatal, lo que tiende a reflejarse en el papel que juega el presupuesto en la vida económica y política de la sociedad.

En el país y en especial en los municipios, departamentos y distritos que lo integran, el presupuesto es utilizado en buena parte para satisfacer intereses y necesidades de las clases dirigentes, los cuales se encubren bajo diferentes formas y disposiciones jurídicas, al tiempo que muy poco se hace para elevar el nivel material y espiritual de las gentes que integran la comunidad, sobre la cual se descargan la mayor parte del pago de los impuestos, tasas y contribuciones que constituyen la principal fuente de ingresos de la respectiva entidad territorial.

los impuestos que pagan los ciudadanos tienden a crecer de manera desproporcionada

En el caso concreto de la ciudad de Cali, los impuestos que pagan los ciudadanos tienden a crecer de manera desproporcionada, en tanto se incrementan los gastos de funcionamiento del aparato administrativo. Así mismo se observa como la administración recurre con mayor frecuencia al endeudamiento a través del mecanismo de las vigencias futuras, que se ha convertido en una práctica inveterada de los mandatarios de turno que afectan notoriamente las finanzas públicas en la medida en que las condiciones de amortización del crédito (capital e intereses) resultan cada vez más onerosas.

Para la vigencia del 2018 el presupuesto municipal ha sido estimado en tres billones trescientos ochenta y cuatro mil seiscientos noventa y cinco millones de pesos ($3.384.695.000.000) de los cuales un poco más de dos billones novecientos mil millones de pesos se destinarán a cubrir los gastos de inversión. De este rubro, dos billones son recursos de destinación específica y los $900.000 restantes corresponden a recursos propios del municipio que se nutren del recaudo del impuesto predial por $493.975.000.000; industria y comercio por $379.299.000.000; aviso y tableros $32.934.000.000. Mientras tanto se destinará más o menos un billón de pesos en el pago de la burocracia que se repartirá así: Mas de $600.000.000, para el pago de la nómina oficial y gastos generales y cuatrocientos mil millones de pesos para el pago de la nómina paralela disfrazada de “inversión social”.

Ahora bien, la tendencia a incrementar los gastos de funcionamiento se deriva básicamente del crecimiento de la burocracia estimulada por el clientelismo político, en el cual se sustenta el poder burocrático que gira en torno al presupuesto de gastos, que a su vez garantiza la gobernabilidad de los mandatarios de turno. Esta circunstancia concreta conduce inexorablemente a elaborar presupuestos inflados y desequilibrados que son aprobados sin mayores consideraciones y sin que los gobernantes cumplan con el deber constitucional y legal de mejorar el nivel de vida de los ciudadanos en igualdad de condiciones para todos en lo relacionado con la creación de empleo, la seguridad, la educación, la salud, la vivienda, la conservación del medio ambientes, etc., que son los aspectos esenciales que deben ser tenidos en cuenta y ser objeto del gasto social.

resulta inquietante que la actual administración municipal no se haya preocupado por crear nuevas fuentes de ingresos para el municipio de Cali

Por otra parte resulta inquietante que la actual administración municipal no se haya preocupado por crear nuevas fuentes de ingresos para el municipio de Cali distintas del recaudo de los impuestos que se cobran a los ciudadanos y que le permitiría a la municipalidad obtener nuevos ingresos provenientes de la producción de bienes y servicios, que como el manejo del alumbrado público, la recolección de las basuras, la construcción de viviendas, la generación de energía, podrían ser materia de la explotación económica para beneficio de la comunidad, circunstancia esta que lamentablemente no hace parte del plan de desarrollo de la actual administración, ni tampoco resulta del interés de la dirigencia política, local y regional. 


Veeduría Ciudadana por La Democracia y La Convivencia Social

El Control Ciudadano Sobre la Gestión Pública es Condición Indispensable para el Ejercicio de la Democracia y la Convivencia Social