
Redacción
La plenaria de la Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley conocido como “borrón y cuenta nueva” de los morosos de las centrales de riesgo, iniciativa que pasa ahora a conciliación para convertirse en Ley de la Republica.
Los senadores Luis Fernando Velasco y David Barguil, impulsaron el proyecto que contempla una amnistía por única vez para los colombianos que se pongan al día en los 12 primeros meses de vigencia de la ley y para quienes lo hayan hecho con anterioridad.
El proyecto busca reducir el tiempo de permanencia de receptores financiero negativos, de 4 años a 2 años. Consultar la información crediticia será gratuita y no afectará la calificación. Además, las personas que hayan sido víctimas de suplantación, podrían mostrar la denuncia y solicitar que el reporte negativo sea eliminado.
La aprobación de este proyecto también Tendrá un especial impacto en los deudores del Icetex, pues permitirá a los estudiantes que se pongan al día con sus obligaciones eliminar de forma inmediata los reportes negativos causados. También le permitirá a las personas con préstamos de bajo monto, es decir, menor al 15 % del salario mínimo (menos de 131.670 pesos), recibir dos comunicaciones antes de ser reportadas a las centrales de riesgo.
Para la aprobación de este proyecto, también se encuentran comentarios en contra, por el efecto que puede generar en la inclusión financiera:

1. Según el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, esto podría llevar a las entidades financieras a “restringir su oferta de crédito, debido a la mayor exposición de riesgo”.
2. 26 gremios que componen el Consejo Gremial Nacional habían emitió un comunicado en el que le pedían al Congreso de la República no aprobar este proyecto de ley porque, según ellos, contribuye “al deterioro de la calidad de la cartera de las empresas y al fomento de la cultura del no pago”.
3. Pedro Novoa Director de MS Legal, firma experta en datos personales, dijo que: “este proyecto, a pesar de las buenas intenciones que promulga tener para el público en general, muy posiblemente va a transformarse en mayores trabas para acceso a líneas crediticias en la medida en que las entidades otorgantes encuentren menos información y la que exista sea de menor calidad para basar decisiones con base en ella”. Añadió: “Debo admitir, sin embargo, que el texto final discutido ha ido mejorando con el transcurso de los debates. Sin embargo, persisten temas que serán perjudiciales para la posición del empresariado, como las obligaciones de adelantar denuncias ante casos de suplantaciones y la de realizar doble notificación en deudas de bajos montos, aspectos, entre otros, que implican mayores gastos operacionales que, seguramente, se verán reflejados en los costos a los usuario”.
Ahora el proyecto se encuentra en su fase final para convertirse en ley