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El esloveno Primoz Roglic (Jumbo) conquistó ayer su segundo Giro de Emilia, después de su victoria en 2019, por delante del portugués Joao Almeida (Deceuninck-Quick Step) al término de los 195 kilómetros de recorrido.
El tres veces ganador de la Vuelta a España se mostró el más fuerte en el seno de un grupo de cinco corredores que se disputaron la victoria en la quinta y última ascensión en San Luca (2,1 kilómetros al 10% de pendiente media), cerca de Bolonia.
Almeida, que se benefició del trabajo de su compañero belga Remco Evenepoel (5º), trató de resistir hasta el final, pero tuvo que entregar las armas en los últimos metros. El canadiense Michael Woods (Israel SN) fue tercero y el británico Adam Yates (Ineos) cuarto.
Desde el primer paso por el alto de San Luca, punto de entrada en el circuito final de 9 km que el pelotón recorrió cuatro veces, Roglic estuvo en los primeros puestos, instalándose en el primer grupo de cabeza al lado de Evenepoel. Ambos se mantuvieron en el grupo de cabeza, que se redujo pronto a seis hombres y después a cinco en la ascensión final.
El doble vencedor del Tour de Francia Tadej Pogacar (UAE), otro favorito del día, nunca logró participar en la batalla.
La carrera, que fue ganada por un colombiano por primera vez en 2011, con Carlos Betancur, tuvo como mejor latinoamericano a Nairo Quintana, del Arkea Samsic, ganador de la competencia en 2016 y que en este año quedó en el puesto 10.
Los dos colombianos del Education First, Rigoberto Urán y Sergio Higuita, quedaron en los puestos 24 y 29, respectivamente.
Dayer Quintana, del Arkea, fue el último colombiano clasificado en la general en el puesto 42. No terminaron la carrera Iván Sosa, Sebastián Henao, Rodrigo Contreras, Daniel Muñoz y Winner Anacona.
