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Luz Betty Jiménez De Borrero / Pablo A. Borrero V.
La práctica reiterada de aprobar toda clase de acuerdos y decretos por parte de las autoridades de la ciudad no constituyen garantía de que los mismos se aplicarán oportunamente para resolver los problemas seculares de la municipalidad que se acrecientan con el paso del tiempo haciendo más difícil su solución.
En este caso se trata de los problemas creados alrededor de los vendedores informales de la plaza de Caycedo y de sus alrededores, amén de los existentes en otros sectores de la ciudad, sin que exista control al respecto ni límites en cuanto a la ocupación del espacio público que constituye un derecho colectivo de los ciudadanos reconocido en la Constitución Política.
Como se sabe, hace aproximadamente cinco años se aprobó en el Concejo Municipal una política pública para regular y organizar la situación de los vendedores ambulantes, política esta que hasta la fecha no ha tenido aplicación práctica en tanto su número ha crecido exponencialmente calculándose según datos de la subsecretaría de Inspección y Vigilancia para el 2021 en 28.000 vendedores, es decir, el doble de los existentes antes de la pandemia del COVID-19
Una de las razones de dicho crecimiento se debió en buena parte a que no se dio aplicación a lo dispuesto por la Corte Constitucional de garantizar de manera adecuada y equilibrada el derecho al trabajo de los vendedores y la necesidad de proteger el especio público en favor de los ciudadanos. Pero además, los gobiernos de turno no tuvieron el propósito de resolver este problema en su afán de asegurar su propia clientela electoral para reproducirse directa o indirectamente en el poder, manteniéndose de esta forma el statu quo con las consecuencias ya conocidas que conlleva dicha problemática.
Mientras tanto se anuncia desde la oficina de Planeación Municipal que se intervendrá el separador vial de la carrera 10 con la calle 15 con el fin de recuperar este espacio público del centro de la ciudad, seguramente para construir una reja de estilo versallesco como se viene haciendo en el territorio distrital, en lo que pudiera calificarse como un despropósito y despilfarro de los recursos púbicos derivados de los impuestos que pagan los contribuyentes y son utilizados para la construcción de obras que no tienen un carácter prioritario para la comunidad.
A manera de sainete el Concejo Distrital anuncia que sesionará el 6 de junio en la plaza de Caycedo para “anunciar la necesidad de intervención de este y otros sectores tradicionales de la ciudad”, con lo cual se confirma una vez más la negligencia de las autoridades en la aplicación y cumplimiento de las políticas públicas.
Veeduría Ciudadana por La Democracia y La Convivencia Social
El Control Ciudadano Sobre la Gestión Pública es Condición Indispensable para el Ejercicio de la Democracia y la Convivencia Social
