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Redacción
Muy preocupados los empresarios , gremios , la Gobernadora Clara Luz Roldan, los congresistas, etc, sobre la decisión de Covimar, concesionario de la vía Mulaló - Loboguerrero, de solicitar la terminación anticipada del contrato, para su reversión y liquidación de conformidad a la concesión con la ANI; pero lo que ha pasado es una mala contratación inicial. No hay derecho que se sigan ejecutando grandes obras de inversión, con estudios preliminares o de factibilidad , que no permiten tener una debida aproximación al diseño y costo final.
Precisar que se contrató con estudios de factibilidad y ahora con estudios definitivos los costos son totalmente diferentes, luego la estructuración técnica cambió, la económica y financiera tambien debe cambiar. No hay que rasgarse las vestiduras, sino buscar que el Consejo de Estado en su sala consulta, conceptue y permita con razones jurídicas que hay que estructurar muy bien y este contrato pueda ser renegociado en su modelo negocial.
Los 38 años de Mulaló – Loboguerrero
En el año 1983 la construcción de la vía Mulaló - Loboguerrero, se volvió prioritaria para el Valle del Cauca y la Nación, que fue incluida en estudios de la Gobernación del Valle en el sistema vial del Valle e incorporada hace 19 años en el Plan Nacional de Desarrollo 2002-2006 , integrante de los accesos integrales al Pacifico.
Los estudios de fase III se ordenaron en el 2008 e hicieron parte del Plan Nacional de Desarrollo de Colombia 2010-2014.
La obra la contrataron sin los estudios definitivos de ingeniería de detalle y le ha aparecido el tema ambiental que ha cambiado completamente la estructura técnico-ambiental del proyecto.
Ejemplo similar, fracaso del MIO
El sistema de transporte masivo de Cali fue contratado sin estudios de factibilidad, pues de una pre factibilidad se pasó a ingeniería de detalle en la estructuración técnico-económica, y ese ha sido el fracaso de este proyecto, que no tiene solución desde el punto de vista de la ingeniería económica. Para sacar adelante el sistema de transporte masivo de Cali, liquidar Metrocali y los operadores del MIO, de tal manera que con una nueva empresa y con unos operadores que se acuerden con los bancos, se podría dar una solución definitiva a este proyecto, que no es como lo están indicando desde hace ocho años, a punta de subsidios.
El contrato con Covimar
En el 2015 se contrató la concesión y con elementos técnicos, económicos y ambientales en el aire, y por lo tanto hoy las obras necesarias para poder ejecutar este proyecto, son diferentes a la inicialmente planteada, para solucionar y mitigar el impacto ambiental de la vía sobre el corregimiento de Pavas y áreas ambientales que se afectan.
Los túneles, puentes y viaductos, tienen que ser diferentes y rediseñado el proyecto. Entender que el proyecto tiene grandes problemas geológicos, interviene el ecosistema y los impactos del proyecto hacen para mitigarlos se tenga que resolver con obras de ingeniería que tienen mayores costos.
No basta con la sustracción de 32 hectáreas del distrito de conservación de suelos, cañón de Rio grande y la sustracción temporal y definitiva de más de 100 hectáreas de la reserva forestal del Pacifico por parte del Ministerio del ambiente, hay problemas de geología, de geotecnia, y de hidrogeología, que aún no se han solucionado del todo, porque requieren diseño de ingeniería. La frase de la CVC lo dice todo “se espera que el impacto sea realmente mitigado y compensado por el concesionario”. Por supuesto que son 32.3 Km, donde cambian totalmente las condiciones y por lo tanto lo correcto y lo conveniente para todos es una nueva estructuración técnica, económica y financiera, porque ha cambiado la estructuración ambiental.
En otras palabras la inversión proyectada entre de 1.6 y 2 billones de pesos cambia, hay unos riesgos adicionales, por ello se propuso hace un mes que el concesionario, la ANI, la Gobernación del Valle y la CVC lideren un equipo de trabajo tendiente a estructurar la compensación, restauración y mitigación de los daños ambientales, en permanente concertación. Y que no generen enfrentamientos con la comunidad para que no siga creciendo el costo del proyecto.
Que no vuelva a pasar lo de la gran mayoría de los proyectos de ingeniería del Valle del Cauca en los últimos 30 años, llámese Termoemcali, MIO, llámese Megaobras, etc.
Ver la crisis con la posible terminación del contrato, es una oportunidad para hacerlo bien y que gane el Valle del Cauca, el Pacifico y Colombia .
Nota: Se invita a leer ( https://caliescribe.com/es/04092021-1953/infraestructura/21715-infraest… )