Puente de la Calle 21 entre Avenida 2N

Por Benjamin Barne… |
385

 


Por Benjamín Barney Caldas 

Arquitecto de la Universidad de los Andes con maestría en historia de la Universidad del Valle. Ha sido docente en Univalle y la San Buenaventura y la Javeriana de Cali, y continua siéndolo en el Taller Internacional de Cartagena, de los Andes, y en la Escuela de arquitectura y diseño, Isthmus, en Panamá. Miembro de la Sociedad Colombiana de Arquitectos, la Sociedad de Mejoras Públicas de Cali y la Fundación Salmona. Escribe en Caliescribe.com desde 2011.


los que le dan plata al policía de tránsito hasta los que compran apartamentos en edificios sin importarles si tienen los permisos requeridos o si cumplen con las normas vigentes, ignorando que es una responsabilidad compartida

dgfbdf
en el negocio inmobiliario cómodamente se espera un comportamiento ético por parte de los diferentes profesionales que intervienen en el

Aunque muchos estarán pensando que no servirá de nada, lo importante es que la consulta fue una votación sin corrupción: sin maquinarias ni mermeladas ni promesas, como ya lo han anotado varios columnistas. Pero ahora toca continuar ya que los corruptos no son solo los políticos, pues ya se sabe que la empresa privada igual lo es, y aun mas, al punto de que las obras publicas son el monumento a la corrupción. Pero también lo son muchísimos ciudadanos; desde los que le dan plata al policía de tránsito hasta los que compran apartamentos en edificios sin importarles si tienen los permisos requeridos o si cumplen con las normas, ignorando que es una responsabilidad compartida. 

El hecho es que en el negocio inmobiliario cómodamente se espera un comportamiento ético por parte de los diferentes profesionales que intervienen en el; funcionarios, arquitectos, ingenieros, constructores y vendedores. Pero igual lo habría que esperar de los compradores de casas o apartamentos, haciéndolos corresponsables de los daños, inconvenientes y molestias que lo que compran le ocasione a la ciudad, el barrio, los vecinos o los copropietarios. Por eso deben verificar los permisos y el cumplimiento de las normas vigentes de lo que van a adquirir, por su propio bien, y además no tener que afrontar eventualmente las consecuencias legales de no haberlo hecho.

 Y con respecto a las obras publicas, qué más corrupción que pagar costosísimos proyectos para obras que no se necesitan o que se sabe de antemano que no habrá dinero con que llevarlas a cabo. Es el caso del puente de la Calle 21 entre Avenida 2N y Carrera 4, diagonal al comando de la Policía Metropolitana, que esta siendo demolido para dar paso a un equivocado parque lineal del río Cali, y que allí mismo se construirá “en cinco meses” un nuevo “viaducto”, en lugar de reforzar el puente existente y ampliarlo, ajustando el proyecto a lo existente, aspecto vergonzosamente ausente en dicho proyecto, otorgado a dedo, otra forma de corrupción, el que cada vez se aplaza cada vez mas, al punto de que ya se esta deteriorando si haberse terminado ni podido usar, a lo que tampoco invita. 

EWSDVADAW
aquí las cosas parece están comenzando a cambiar; casi doce millones de ciudadanos así lo creemos

la corrupción de las costumbres consiste no apenas en la tolerancia social a la corrupción política

Pero así como en las organizaciones, especialmente las públicas, la corrupción consiste en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores, la corrupción de las costumbres consiste no apenas en la tolerancia social a la corrupción política y economía, sino que en ultimas lleva a la corrupción de la cultura. La que en este corrupto país se disparó con la prohibición a las drogas, que lleva a mas corrupción y violencia e impide controlarlas adecuadamente como un problema de salud pública, mientras que en Estados Unidos se va legalizando estado por estado su consumo recreativo, ya son más de la mitad y los mas poblados. 

Afortunadamente aquí las cosas parece están comenzando a cambiar; casi doce millones de ciudadanos así lo creemos. Ahora, además de buscar que se termine la inútil guerra contra el narcotráfico, es imperativo ocuparse en Cali de asuntos tan importantes como que no haya corrupción en la creación de las localidades que pide el Distrito Especial; que no se privilegien los viaductos en lugar de los andenes solo porque en aquellos la corrupción es muchísimo mayor; combatir el consumismo aupado por la obsolescencia programada o inducida, e igualmente la contaminación y la sobrepoblación; o de que entiendan las Autoridades que la movilidad y los usos del suelo se deben acoger al nuevo eje urbano propuesto por un grupo de profesionales adjunto a la SMP de Cali.

* https://caliescribe.com/es/25082018-2340/infraestructura/15180-infraest… 

Búsqueda personalizada

Caliescribe edición especial