- 24 vistas
Ana Lucia Arango M
Economista
El Banco la República dio a conocer sus proyecciones de crecimiento para el año 2023, en su informe de política monetaria presentado en esta primera semana de noviembre del 2022; la actividad económica que proyecta el Banco de la República es que para el 2022 se aumente el 6.9% al 7.9% de crecimiento, pero para el 2023 se reduce del 1.1% al 0.5%
El crecimiento económico del segundo trimestre del 2022 resultó mayor de lo estimado en julio, debido a una demanda interna más fuerte, principalmente por el consumo privado. Los indicadores de actividad económica para el tercer trimestre sugieren que el PIB mantendría un nivel alto, superior a su potencial, con una variación anual del 6.4% y mejor en 0.6% al observado en el segundo trimestre. En realidad, es una desaceleración en su crecimiento trimestral y anual. La demanda interna presentaría un comportamiento similar con un valor elevado, mayor que el del producto, explicado en particular por la fuerza dinámica del consumo privado y la inversión en maquinaria y equipo. La inversión en construcción habría continuado con un desempeño mediocre, con nivel inferior al observado antes de la pandemia.
El déficit comercial se ampliaría debido de importaciones elevadas, un mayor número de exportaciones que de importaciones. El horizonte del pronóstico del consumo se reduce desde los niveles actuales, fiel reflejo de la situación financiera interna apretada en las tasas de interés, de la menor demanda represada, de mayores presiones cambiarias sobre los precios de los bienes importados y de un deterioro del ingreso real por el aumento de la inflación. El crecimiento económico para el 2022, 2023 y 2024, se situaría en el 7.9%, y el 0.5%. Aquí está la recesión.
Con esa inflación tan alta no hay forma de controlar el alto costo de vida y el decrecimiento que se prevé durante todo el 2023 es una recesión, que la sufren Estados Unidos y Alemania actualmente, que son grandes economías.
Cuando se pronostica que el crecimiento de desploma del 7.9% que se va a obtener al cierre del año y se proyecta que en el 2023 se tendrá el 1.1%, la generación de riqueza va a disminuir y técnicamente cuando hay decrecimiento durante dos trimestres consecutivos como ha venido pasando en este final del 2022 y lo que se proyecta para los 4 trimestres consecutivos del 2023, es recesión.
Lo importante para Colombia es que esa recesión no se prolongue, por los problemas que estamos viviendo de no atender las cifras macroeconómicas en cuanto a las nuevas exploraciones de gas y de petróleo, que podría afectar la inversión extranjera y la inversión nacional y si esa recesión se prolonga se nos convierte en depresión económica, con el ingrediente de Colombia en altas tasas de desempleo e informalidad y allí disminuye la demanda de productos, bienes y servicios, vendrían mayores despidos y una mayor caída del PIB.
Colombia puede tener ese reflejo si el Ministro de Hacienda no impone una política ortodoxa inmediatamente. Y el entorno extranjero sigue siendo delicado por la situación política y económica de la guerra Rusia y Ucrania, con un encarecimiento de los agro insumos, la disparada del dólar y todo esto llega al consumidor final.
Colombia tiene el costo de vida más elevado en los últimos 23 años.
