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Tomas C
Siguiendo la guerra de Ucrania, escuchado a unos y otros hay algunos asuntos que llaman la atención, de allí el título del presente artículo.
Los analistas invitados en DW de Alemania en su programa A FONDO, en un interesante debate frente a la pregunta de ¿Hasta dónde llegara Putin?, una de las invitadas hizo la contra pregunta ¿Hasta dónde llegara la OTAN?
He aquí un asunto sobre el cual, en el análisis geopolítico, hay que intentar aclarar la interpretación de esa guerra que tiene en riesgo la existencia misma de la humanidad.
En la historia solo hay una situación la cual se parece por su misma gravedad, la crisis de los misiles en Cuba en 1962.
Haciendo un paralelo con la situación presentada entre EU versus la URSS y la actual situación entre EU y sus aliados versus Rusia, existe varios aspectos que se parecen, pero uno que es fundamental: Una potencia militar no acepta que le instalen en sus fronteras armamento nuclear estratégico.
Kennedy, frente a la posibilidad de tener misiles atómicos en Cuba, tensó el arco hasta conseguir un acuerdo con Jrushchov, desmontando los misiles americanos en Turquía y los rusos en Cuba, llegando al compromiso de no invadir a Cuba.
Hoy, habría que contestar otra pregunta ¿La solución de la guerra en Ucrania pasa por estos y Rusia? o es ¿Entre Rusia y EU con sus aliados?
Erdoğan, después de fracasar al intentar sentar a Putin y Zelensky, considera que hay que sentar a EU y sus aliados con Rusia.
Aquí también hay un parecido entre la situación actual con la crisis de 1962, en ambos casos se dejarían al directamente implicado por fuera de la negociación: en el primer caso a Cuba, en el actual a Ucrania. Esto no parece muy razonable, pero hay que recordar que en la geopolítica solo existen intereses y posibilidades.
Hasta ahora, a partir de la información que he podido conocer, en medio de la propaganda de guerra de uno y otro lado, la confrontación realmente es entre la OTAN donde EU tiene la voz cantante y Rusia. Ucrania realmente es un peón en el ajedrez, donde la muerte de población civil ucraniana de oriente y occidente, en guerra civil desde 2014, en realidad para las potencias no pasa de ser daños colaterales.
En realidad, la guerra no la ganaría Ucrania, que, en respuesta a la invasión rusa que eufemísticamente llama operación militar especial, en eso también existe un parecido con la situación de 1962 en la cual Kennedy consideraba un ataque a Cuba como operaciones militares con armas convenciones, la ganaría la OTAN con tropas ucranianas.
Putin ha advertido en diversas ocasiones con meridiana claridad que empleará todos los medios disponibles para garantizar la integridad territorial de Rusia, con el agravante que, a partir de la incorporación de las zonas orientales de Ucrania a la Federación ahora estarán asociadas a esta decisión.
Entonces, la respuesta a las preguntas del titular podría ser que la guerra, si se sigue escalando el conflicto, la perdería la humanidad.
Hoy se están probando en el campo de batalla armamentos muy modernos y muy destructivo por ambas partes, llevando la peor parte Ucrania que está siendo destruida y poniendo la mayor parte de los muertos.
Los éxitos ucranianos, que en el fondo son de la OTAN, han escalado el conflicto a un nuevo nivel después del ataque a infraestructura civil rusa en el puente de Crimea, lo cual condujo a una feroz respuesta rusa aumentando el sufrimiento del pueblo ucraniano.
Hay un límite para el conflicto con armas convencionales, el inventario de una y otra parte y la capacidad económica e industrial para reponer el material bélico, en el cual Rusia tiene desventaja, de allí el interés de EU en prolongar el conflicto en el tiempo.
El riesgo es que esto conduzca a la utilización de armas nucleares tácticas por parte de Rusia, lo cual escalará aún más el conflicto pudiéndolo generalizar, pasando de ser un conflicto caliente regional a uno global, desde el punto del enfrentamiento militar directo.
No hay que olvidar que los especialistas hablan de guerra hibrida, es decir que la guerra global va en desarrollo a muchos niveles y que el enfrentamiento en caliente en Ucrania no es sino la punta del iceberg.
Un aspecto a destacar es que se está preparando una reunión cara a cara entre EU y Rusia para discutir un tema crucial, el tratado de reducción de armas estratégicas, considerando el dialogo sobre seguridad estratégica por encima de lo que pase en Ucrania.
Esto ya es una bocanada de aire fresco frente a lo descrito anteriormente, porque significaría que existen canales de comunicación y que no se ha llegado al límite del abismo del conflicto nuclear.
¿Cuál debe ser la posición de América Latina en este escenario?
Proponer una salida de racionalidad a lo que vivimos con este conflicto: en medio de la crisis climática la cual amenaza la existencia humana y sin acabar de superar la pandemia, se esté desarrollando una guerra…es necesaria la paz negociada ya.
