María José López – Freestyler, ejemplo

Por Redaccion |
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Redacción

La felicidad de Caliescribe , de Colombia como país, cuando el esfuerzo de una joven de una talento, gracias a su esfuerzo, su familia y de un país en democracia, hace posible que la juventud, visualice futuro. El emprendimiento exitoso en resultados y / o conocimiento y/ o futuro o en todas las anteriores en Caliescribe; soy María José López, tengo 22 años, soy publicista, futbolista, freestyler y aparezco en las redes sociales como @majofutbol.

Mensaje de Caliescribe: Si los políticos colombianos, su democracia, se dedicaran a impulsar el arte, la cultura, el emprendimiento, la tecnología y el deporte, el país, logra su mejoramiento.  Con emoción presentamos a  Maria José Lopez.

"Todo empezó muy chistoso, de hecho, porque yo tenía 17 años cuando hice por primera vez semáforo. Yo recién había salido del colegio y entré a la universidad a estudiar publicidad y me dio la loquera. Yo dije, voy a intentar hacerme en un semáforo para ver si me dan plata. Fue como la primera visión que tuve".

¿Dónde empezaste a hacerte? ¿En qué semáforo?

Aqui en Cali, en el semáforo de la Avenida Tercera Norte, al frente del Éxito. Entonces, yo me acuerdo mucho que en ese tiempo yo no sabía hacer casi nada, solo sabía cabecitas y con la rodilla y no sabía todo lo que sé hacer ahora. Uno fue desarrollando la habilidad bajo presión, sí, porque al momento de estar uno en la calle uno tiene que estar pendiente de los carros, de la gente, del semáforo, del tiempo. Entonces, la primera vez fue así. Me lancé y me acuerdo tanto que me dieron dos mil pesos y yo me sentía rica. Y dije, “aquí fue, aquí empecé a trabajar”. Porque uno de estudiante mantiene pelado.

¿Y estudiabas en qué universidad?

En la de Santiago…..Publicidad.

¿Cómo fue creciendo el negocio en el semáforo?

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Yo seguí trabajando y aquí fue. Aquí fue el trabajo, guardaba monedas. Fue muy chistoso, porque era a escondidas de mi familia. Me acuerdo que mis papás estaban donde mi hermana y mi mamá me vio la tula llena de monedas y me dijo, “¿qué estás haciendo?” Y yo, “ah, mamá es que estoy trabajando en un semáforo, pero chito” y ella me dijo “Su papá me va a matar”. Entonces, me di cuenta y me fui a pasar a la calle. Mi papá imaginaba lo peor, que me iba a atropellar un carro, que me iban a robar y, mentira, yo ya mucha cancha en la calle.

¿Cuánto tiempo al día?

Yo me hacía 3, 4, 5 horas. Al inicio, por la fiebre lo hacía todos los días. Ya después lo hacía día de por medio porque me agotaba muchísimo. Y al inicio, cuando empecé en el semáforo, yo guardaba la plata, cambiaba las monedas y con eso me pagaba pasajes e iba a jugar fútbol.

¿Cuánta plata recuerdas haber conseguido en un día bueno?

Una vez me hice, en un diciembre, 200 mil. Y un día normal, 50 mil u 80 mil, pero tenía que darle duro. Y un día malo, 20, 30 mil pesos. ……….En esa navidad, compré regalos para mi familia. Yo tenía ya guardado un dinero, ¿no? Y yo dije, tengo que darle regalos a toda la familia. Yo me sentía muerta, como si me hubieran escurrido un trapo, pero me sentía bien.

Fue la primera vez que yo sentía que tenía dinero y como yo estaba muy chiquita, yo decía, no, uno tan pequeñito y con esa plata, uno se siente rico.

Luego del éxito del semáforo… 

Primero empecé a hacer el dinero con el objetivo de ir a jugar fútbol en Palmira, pero pues a medida que yo iba avanzando en el semestre, la carrera, no podía volver y me tocó parar el fútbol. Mis papás me dieron los primeros semestres y ahí para allá yo empecé a pagarme la carrera sola con el semáforo y pues yo grababa o hacía el préstamo e iba pagando la cuota. Después me acordé mucho que iba a jugar fútbol, que iba a ir a jugar fútbol en un torneo en España y ahí fue que llegó el COVID y me tocó suspender. Pero, sí me acuerdo que alcancé a ahorrar dinero y saqué el pasaporte. Ahí lo tengo, ya casi lo estreno.

La carrera de publicista…

Súper bien, excelente. Se me pasó volando, la verdad. Yo creo que estaba tan entretenida en mi carrera, en mi deporte, que el tiempo se me pasó volando, me fue muy bien. Me gradué, después hice un diplomado. Y pare, que, porque iba a jugar fútbol, pero ahí tuve una lesión y quiero volver a estudiar, pero también quiero jugar fútbol.

¿Y el negocio ya de la publicidad? ¿Ya lo empezó a multiplicar?

Siempre fue de manera independiente, hacía mis trabajos independientes, mis flyers, mis estrategias, mis campañas, así, aparte. Y ya después llegó lo de las redes sociales y ahí empecé a impulsarme y a otros negocios, que es en lo que trabajo.

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¿Qué otros negocios trabajas?

A ver, cuando recién empecé, inicié impulsando una empresa que se llama Digital Colombia, que es la empresa de mi hermana, donde vende cámaras GoPro, donde vende drones, todo lo que es tecnología. Esa fue con la que arranqué, y de hecho sigo con ellos todavía. Y patrocinios de ropa, la marca que me viste, lo hydro es una marca que siempre me ha vestido desde que hacía semaforo y todavía me sigue vistiendo. Y ya, una persona externa me quiere contratar o hacer un show de freestyle, para una activación de marca.

¿Cómo va el negocio ya de estar ofreciendo los shows de freestyle?

El freestyle se puede hacer en cualquier lado, en una fiesta, en un evento. Una vez también unos argentinos me contrataron para hacer una promoción del evento futbolístico. Depende de lo que trate el evento, yo voy ya sea vestida o acorde a esa situación y de una hago mi show, ya sea una hora, dos horas, media hora, solo cinco minutitos y ya.

¿Cuántos clientes tienes al mes de freestyle? ¿cómo va el desarrollo de esos servicios profesionales que tú ofreces?

Hay meses en los que no son muchos, pueden ser poquitos, cinco al mes, o menos, como hay meses en los que, si estoy preocupada, por ejemplo, hace poquito fue lo del mundial femenino, y casi me vuelvo loca, no sabía qué hacer, porque se me cruzaban los shows. Entonces todos los negocios se activaron y me decían que me necesitaban contratar, pero ya estaba comprometida.

El mejor servicio prestado…

En el Boulevard del Río me pagaron bien, me pagaron $1.500.000. Estuve bastante horitas, estuve como 3, 4 horas. Adidas. Me dio la ropa y el documental, el balón, los zapatos, todo. Y como era un evento que ya estaba organizado por la Secretaría de Cali, entonces, y la Secretaría de deporte, entonces, el Boulevard estaba súper lleno. Como 200, 300 personas, yo creo.

¿Y el segundo evento así, en calidad?

En el que me fue súper bien. Por el público y todo, fue cuando me presenté en la Plaza de Toros. Eso estaba repleto, yo no me acuerdo cuánta gente había, pero eso estaba todo estaba lleno, en ese tiempo fue para el Monster Truck, que hubo, un evento de los carros que aplastan y las motos y todo. ¡Ese día fue brutal! Ese día me presenté allá, subí y cuando yo miré así bien, se veían unos punticos en mis cabezas. Me dio mucho susto porque había una pista grandota que era como donde derramaban las motos y yo pensaba hacerme del piso, porque estaba abajo, entonces el señor me dijo, “no, necesito que te subas a la tarima”. Arranqué y me fue súper bien, no se me cayó el balón, la gente aplaudía y se sentía brutal. Era como estar en un concierto. Estuvo muy chévere, este me gustó mucho. ..$1.000.000, Algo así me acuerdo.

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Tercer negocio grande…

Uno en que me pagaron $2.000.000 y ha sido el mejor trabajo que me han dado. Fue con una marca en el estadio Pascual Guerrero, me vestí con la marca, no recuerdo cómo se llamaba. Pero entonces arranqué mi show en la mitad del estadio, y después me dieron una bolsa grandota llena de balones, y me dijeron “tírelos”. ¡Ay! ¡Dios mío! ¡Ese ha sido el mejor trabajo que he tenido! Yo cogí los balones y los tiraba para todo lado, y la gente como loca cogiéndolos. Me despedí, acabó y duró una hora no más. Estuvo súper brutal el show. Y los niños, queriendo fotos, y la gente que me reconocía en el estadio, y estuvo muy bacano.

Mensaje final…

De corazón les digo, que le metan ganas a todo los que quieran hacer, a todo lo que les apasione háganlo con mucho amor, con dedicación no se fijen en qué van a decir los demás o qué pasa si fallo, no importa: Inténtenlo, cuando uno hace lo que ama, es feliz, ve los resultados y agradecido.

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