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Redacción
Entrevista de la semana deportiva, con el periodista nacional Alberto Galvis, de gran experiencia deportiva, editor de la revista OLIMPICA y de la academia Olímpica, investigador de los temas olímpicos, en exclusiva a Caliescribe, presenta su ensayo sobre los Juegos Panamericanos Cali 1971, el mayor evento en la historia olímpica colombiana, génesis y resultados deportivos de país, ciudad.
¿Cómo era el Comité Olímpico Colombiano en la década de los 60 y como gestionó la sede de los Panamericanos de Cali 1971?
En 1952 Colombia no pudo ir a los Juegos Olímpicos, por la situación política de entonces y además porque no había recursos, ni el deporte era una prioridad del estado, y el Comité Olímpico Colombiano era un ente muy pequeño, cierto que escasamente tenía una pequeña oficina en el Ministerio de Educación. Al fracasar el viaje, en el 52 después de haber ido Colombia a los del 36 y a los del 48, entonces Mike Forero, desde el Espectador comenzó una campaña desde el mismo momento en que se canceló el viaje a Helsinki del 52, para que Colombia estuviera presente en Melbourne Australia.
Así empezó la campaña, después en los siguientes años hubo unos cambios fuertes por la dictadura de Gustavo Rojas Pinilla, y Mike Forero empezó a trabajar en el Independiente, que fue el que sucedió al Espectador después de ser clausurado, y Humberto Jaimes Cañarete formaba parte de El Tiempo que también fue clausurado, empezó a trabajar con el Intermedio, es decir eran los mismos Espectador y Tiempo, pero con otros nombres, y los dos serían los únicos periodistas que viajarían con la delegación a Melbourne en 1956. Se consiguieron los recursos y Colombia estuvo presente con una delegación pequeña de atletas, esgrimistas, ciclistas, levantadores de pesas, nadadores y tiradores.
Terminó la dictadura que también genera un cambio al COC, en ese momento el Presidente era Guillermo Padilla , militar y llegó Mario García y García para la década de los 60. En esa época era lo mismo, el Comité Olímpico era insignificante, aparecía únicamente en el momento en que se tenía prevista la participación de Colombia en algún certamen del ciclo olímpico, como los Juegos Bolivarianos, Centroamericanos y del Caribe Panamericanos y Olímpicos. En esos años también hubo necesidad de hacer colectas para que colombia estuviera presente en certámenes internacionales y particularmente en los Juegos Olímpicos de Roma, en el cual se estrenó Mario García García como Presidente. Colombia fue a esos juegos olímpicos con una delegación pequeña, conformada por tiradores, esgrimistas, pesistas, nadadores y ciclistas, únicamente con recursos propios de cada uno de los directivos, en el caso de los que acompañaron la misión. Los deportistas si fueron financiados por el gobierno nacional.
Durante toda la década de los 60, hasta antes de 1971, el COC era una entidad que mendigaba dinero para llevar a las delegaciones, entonces no tenía peso, Colombia estuvo presente en 1964 en Tokio, en 1968 en México, con una delegación que más o menos hizo honor a los avances que había tenido el deporte nuestro, como por ejemplo tener personajes de primera línea como Álvaro Mejía Florez, quien fue candidato a ser el primer atleta colombiano ganador de medalla olímpica, que no consiguió, ya sabemos cómo fue la historia. Pero en esa época, hubo un resurgimiento del deporte colombiano del atletismo particularmente en esos años 60.
El visionario Alberto Galindo Herrera, 1954 y el suramericano de atletismo de 1963....
Hasta 1950, más o menos en los años comprendidos entre 1928 y 1941 que se celebraron los Juegos Nacionales, el dominio fue para el departamento de Cundinamarca, que era la potencia del deporte colombiano en una época obviamente muy precaria. Alberto Galindo Herrera nacido en Cali, de familia tolimense, se convirtió en el máximo dirigente del Valle del Cauca, promovido a la Presidencia de Ligas como la de Atletismo, y comenzó una campaña fuerte para convertir al Valle en una potencia.
Empezó a aplicar una serie de conceptos, de métodos, que se venía empleando en otros países, con el apoyo de alguna manera de los deportistas y el deporte del Valle del Cauca empezó a crecer de una manera tan grande, tan grande, que pronto se empezó a ascender en las posiciones de los campeonatos nacionales.
En esa época Galindo Herrera, se dio a la tarea de convertir al Valle en esa potencia, y lideró la obtención de la sede de los Juegos Nacionales en 1.954 en Santa Marta 1950 y que se realizaron en la ciudad de Cali, y que ganó el Valle del Cauca por segunda vez, todo por iniciativa de Galindo Herrera que era definitivamente un líder del deporte aficionado, cómo era entonces el deporte en todo el país.
Lo mismo para el suramericano de atletismo en la década de los 60, el empezó a trabajar fuertemente para que Cali fuera mirada como una ciudad deportiva y más o menos en el año 64 - 65 se le ocurrió la idea de los Juegos Panamericanos para Cali. Una madrugada cualquiera, llamó a su amigo Jorge Herrera Barona y le dijo que necesitaba contarle algo, que fuera hasta su casa y allá llegó Jorge Herrera Barona y Alberto Galindo Herrera le dijo qué cree que se le ha ocurrido la idea de que Cali fuera sede de los Juegos Panamericanos de 1971. Obviamente Jorge Herrera también era un soñador, pero él no lo tomó en serio y necesito un tiempo para asimilar la idea, pensó que era una locura de Galindo y Galindo empezó solo a divulgar la intención, su voluntad de buscar la sede de los Juegos Panamericanos para Cali y así fue poco a poco recogiendo apoyos, primera del sector deportivo, después del gobierno de Cali, después del gobierno del Valle del Cauca, finalmente se logró el apoyo también de algunos Senadores y representantes del Valle del Cauca; el apoyo del gobierno nacional, para llevar la postulación de Cali a los Juegos Panamericanos de Winnipeg en 1967.
Lamentablemente el 31 de diciembre de 1966 Alberto Galindo Herrera, murió de cáncer terminal de hígado , él no pudo disfrutar de ese triunfo, de ese éxito, de lo que significaron los Juegos Panamericanos para Cali, para Colombia, pero su idea siguió adelante y en el primer semestre de 1967, Cali se preparó para llegar con el apoyo del COC, llegar a Winnipeg con la intención de buscar la sede de un certamen que no era gigante como es hoy, pero si era grande ya y que obviamente en teoría le quedaba grande a un país como Colombia, cualquier ciudad de Colombia le quedaba grande, porque era demasiado complejo, eran unos Juegos Olímpicos en un continente muy poderoso en materia deportiva, que tenía los mejores del mundo como los estadounidenses, pero la dirigencia del Valle del Cauca siguió adelante y logró que se le entrega la sede de esos Juegos Panamericanos.
¿El viaje a Winnipeg 1967, Cali sede panamericana....
La candidatura de Cali definitivamente fue creciendo de una manera impresionante, porque enero del año 1965, Alberto Galindo Herrera escribió una carta al Presidente del Comité Olímpico Internacional para pedirle su respaldo, posteriormente aparecieron los apoyos de entidades como la Organización Deportiva Panamericana Odepa, al mando del general José de Jesús Claro Florez, en ese mismo año quedó conformado el primer comité pro sede, el de los VI Juegos Panamericanos con el Gobernador del Valle, Alcalde de Cali, el Presidente de la Asamblea Departamental y dirigentes cívicos prestigiosos, todos bajo el mando de Alberto Galindo Herrera.
En noviembre se consiguió el apoyo del Presidente de la República Gullermo León Valencia ( 1962 1966 ) y del Ministro de Educación de Colombia, Daniel Arango, quien firmó una resolución que reconocía y brindaba el respaldo a dicho comité. Luego llegaron los otros apoyos, como los del COC, gobierno del Valle del Cauca, de la Junta Departamental de Deportes del Valle, la Asamblea Departamental, alcaldía de Cali y del Concejo Municipal. Todos estos respaldos, le dieron fuerza a la candidatura de Cali, a finales de 1966
Lamentablemente fallece Galindo Herrera el 31 de diciembre de ese año 66, pero su idea continúa adelante, el Congreso de la Odepa se celebró el 22 de julio en Winnipeg Canadá, con la presencia de la delegación colombiana conformada por Mario García García, que era el Presidente del Comité Olímpico Colombiano, de Julio Gerlein Comelín quién era el miembro permanente del Comité Olímpico Internacional a nombre de Colombia, también del ex Ministro de Educación y Parlamentario en ese momento Daniel Arango Jaramillo, el que había firmado la carta de apoyo cuando era Ministro de Educación, el representante del gobierno de Cali que era Jorge Herrera Barona, los dirigentes Enrique Ortiga, Federico O'byrne, Alfonso Arango, Hernando Botero, Manuel J. Martínez y el ex atleta Jaime Aparicio Rodewaldt.
Cali sustentó la aspiración con tres oradores, el Presidente del Comité Olímpico Colombiano Mario García García, quien hizo la presentación de la candidatura y reafirmó que contaban con el apoyo del propio Presidente de la República, 1966 1970, Carlos Lleras Restrepo y de las autoridades del Valle del Cauca, también hablaron el exministro Daniel Arango y el dirigente vallecaucano Jorge Herrera Barona, para explicar cómo estaba preparado Cali y el país para ser la sede de las justas. A la disputa se presentaron tres candidaturas, la de Santiago de Chile y una muy fuerte que era la de San Luis EE.UU, quien ofreció a las delegaciones participantes, que pagaría los gastos de transporte alojamiento y alimentación de todas las delegaciones, además que habían recibido la aprobación de una partida de 20 millones de dólares de parte del gobierno de EE.UU para organizar los juegos.
Era realmente una pelea muy desigual entre las dos ciudades suramericanas Santiago de Chile y Santiago de Cali, curiosamente, no se creía que finalmente fuera el desenlace. El Presidente de la Odepa, antes de la elección, José de Jesús Clark Florez, le dio un puntillazo a la candidatura de Cali y dijo textualmente lo siguiente. Les voy a leer lo que dice la regla 23 del reglamento de la Odepa: “cuando dos o más países miembros de la Odepa, aspiran a la sede de unos Juegos Panamericanos, se preferirá a un país que nunca los haya organizado. EE.UU en este caso no podría participar en la votación, por cuanto en Chicago tuvieron lugar los juegos hemisféricos de 1959. Entonces fue eliminado el rival más fuerte que tenía Cali para esta sede, y al final de la tarde comenzó la votación, y al final de esta votación el resultado fue: Santiago de Cali 12 votos, Santiago de Chile 11 votos y Champ ( San Luis Missouri ) EEUU 6 votos. Esta situación tan reñida, llevó a la Odepa a ofrecerle los siguientes Juegos Panamericanos, los séptimos a Santiago de Chile, pero el golpe militar de Pinochet en 1973, no permitió realizar esas justas deportivas y fueron trasladadas a San Juan de Puerto Rico. Entonces el Presidente de la Odepa José de Jesús Clark Flores dijo al final, que el Congreso de la Odepa, reunido en Winnipeg Canadá, había escogido por ese mínimo resultado la ciudad de Cali como sede de estos juegos, lo dijo con mucha alegría, con mucho entusiasmo, por eso hay tanta veneración y tanto respeto y cariño por este dirigente mexicano José de Jesús Clark Florez
Se compromete la creación de Coldeportes y se crea en 1968...primeros directores...
Con ocasión de la celebración de los Juegos Panamericanos para el 71, la preocupación del alto gobierno encabezado por Carlos Lleras Restrepo era grande, y como él había dado su palabra, pues no podía abandonar en ese momento esta tarea, entonces empezó a trabajar en la creación de una entidad que fuera mucho más fuerte, de mayor cobertura y con mayores recursos, que la hasta entonces dirección nacional de educación física, que era la que manejaba las políticas de estado en materia de deporte, las frágiles, políticas de estado.
Se empezó a trabajar en esta idea, el Presidente del COC Mario García García, fue el primero, que dijo que había necesidad de crear una entidad que respaldará el apoyo a la organización de los Juegos Panamericanos y más o menos pensando en eso se creó, en responderle a América y al mundo por este certamen, se empezó a crear la entidad que se denominó en su momento “Instituto Colombiano de la Juventud y el Deporte”, que fue presentado el 5 de noviembre de 1968 por el Ministro de Educación Octavio Arizmendi, quien citó en su despacho a una rueda de prensa y a los Presidentes de las asociaciones deportivas colombianas, que inclusive se disgustaron porque a ellos nadie les consultó absolutamente nada, sino simplemente les contaron que ya era un hecho cumplido.
Se creó entonces Coldeportes en ese momento, al otro día Humberto Jaimes Cañaretes, escribió en El Tiempo algo, que puso un poquitico a dudar sobre la fuerza que podría tener esta entidad, él entre otras cosas decía que se estaba creando un instituto sin rentas, es decir sin plata, y que eso iba a convertirse en una entidad burocrática, en fin más o menos que iba a heredar los vicios de todas las instituciones del estado que estaban llenas de política y politiquería. Después comenzó ya a la organización de Coldeportes, se nombró como primer director de Coldeportes a un vallecaucano, Adolfo Carvajal, se estaba en ese momento dando o rindiendo honor a la región más poderosa en materia deportiva como era el Valle del Cauca, y se conformó el Consejo nacional de la juventud y el deporte, que tenía todas las funciones que se le asignaron en ese momento a Coldeportes.
Empezó a funcionar en medio de la incredulidad general por todos los comentarios que se habían hecho alrededor de la politización de Coldeportes, sin embargo logró brindar ese respaldo gigantesco a la organización de los Juegos Panamericanos de Cali, desde Coldeportes se gestionaron en apoyo con algunas entidades oficiales del Valle del Cauca, se empezaron a gestionar los recursos para hacer efectiva la organización de los juegos y la participación de Colombia en esos juegos. Había obviamente pesimismo en lo deportivo, porque en lo demás, pues obviamente en la dirigencia del Valle del Cauca lideró muy bien la organización de los juegos, con un hombre como Jorge Herrera Barona, a quien se le puede considerar el más importante dirigente deportiva de Colombia en el siglo XX, sacó adelante los Juegos Panamericanos, y desde ese cargo logró, un peso importantísimo porque Cali quedo muy bien frente al mundo en la organización de esos Juegos Panamericanos.
Colombia había tenido un resultado bastante pobre, en los Panamericanos de Winnipeg en 1967, una medalla de oro con Cochise Rodríguez en los 4.000 Mts, persecución individual; 2 medallas de plata con Agustín Calle en la maratón y con Alirio Malla en tiro, velocidad sobre siluetas; y se ganaron exactamente 5 medallas de bronce, una en atletismo con la posta de relevo de 4x100 conformada por Carlos Álvarez, Hernando Arrechea, Jaime Uribe y Pedro Grajales; 1 medalla en ciclismo 100 Km contra reloj con Álvaro Pachón, Martin Cochise Rodríguez, Severo Hernández y Carlos Montoya; y 3 medallas en natación con Julio Arango en 200 Mts libres, Raúl Escobar en trampolín de 3 Mts y Diego Henao en plataforma de 10 Mts, todos vallecaucanos, y Colombia finalizo en la 9ª posición de esos juegos.
Se pensaba que para los juegos de Cali, Colombia debía presentar un resultado superior, había que trabajar muchísimo y se empezó a contratar entrenadores extranjeros, para poder responder a ese compromiso. Finalmente Cali salió adelante en todo sentido, en la organización de los juegos, que dejaron a Cali muy bien parado como “capital deportiva de América”, así la bautizo José de Jesús Clark Florez.
Al certamen asistieron todos los países afiliados a la organización deportiva panamericana, a la Odepa, Colombia mejoró en cuanto a los resultados porque nuestro país logro en esta oportunidad, 4 medallas de oro, con Juan Romero en pesas, Cochise Rodríguez en los 4.000 Mts persecución individual y el equipo de 4.000 Mts persecución conformado por Cochise Rodríguez, Jorge Hernández, Luis H. Díaz y José Ramón Garcés. Igual Colombia logro un total de 9 medallas de plata y 14 de bronce. Subió de la 9ª a la 7ª posición.
Lo más importante para nuestro país, fue lo que quedó de los juegos Panamericanos, se puede hablar claramente de un antes y un después del deporte colombiano, porque Cali logró sembrar una semilla que fue muy bien explotada en los años siguientes, logró muchos resultados positivos Cali y el Valle del Cauca, y lo más importante, quedó la seguridad de que Colombia tenía capacidad para organizar grandes certámenes y que además, nuestro deporte tenía un semillero bastante fuerte que solo necesitaba apoyo económico y en todos los frentes para generar una masa grande de deportistas.
Después de los Juegos Panamericanos, Colombia empezó a avanzar como país deportivo. La primera gran prueba de ello fue que en los Juegos Olímpicos celebrados en Múnich – Alemania, Colombia ganó sus 3 primeras medallas.
Tema deportivo de los Juegos Panamericanos Cali 1971
Que recuerde, el impacto más grande de los resultados de Cali fue en atletismo, la marca de Pérez Dueñas en el salto triple, que fue un fue marca mundial, lo mismo en 200 mts planos el jamaiquino Donald Qarrie , gloria olímpica de eses país y le dieron a esos Juegos Panamericanos un realce espectacular.
Hubo otro hecho que fue lamentable lo ocurrido con el atleta cubano que se suicidó en la Villa Olímpica, eso fue una mancha que tuvieron los juegos, pero que finalmente no hubo ninguna responsabilidad de nadie. Lo demás fue brillante, Cali demostró que tenía un público fabuloso, lo reafirmo en el año 2013 cuando celebraron los Juegos de Mundiales, que debieron haber superado, compararlos es muy complicado, debieron haber superado los Panamericanos por la gran cantidad de países que asistieron, por la gran cantidad de deportes, también, pero confirmaron que Cali era definitivamente una ciudad grande en materia deportiva.
Valdría la pena, con la colocación de los 50 años, recuperarle a Cali, el título de “capital deportiva de América”, por qué no se volvió a decir, por ninguna parte, en ningún lado, que Cali era la capital deportiva de América, frase de José de Jesús Clark Florez, ni siquiera de un colombiano, del Presidente de la Odepa ( mexicano ) . Me parece que vale la pena esto y seguir adelante con ese impulso que tiene el Valle del Cauca, que lo ha convertido en una de las dos grandes potencias del deporte nacional, hace mérito a todo el trabajo que empezaron a desarrollar en los años 40 y 50 del siglo XX, dirigentes como Alberto Galindo Herrera.
¿Que recomienda como conocedor de muchos panamericanos, que se debe celebrar en 1 año, al cumplirse los 50 años de 1971?
Cali se acerca a celebrar los 50 años de los Juegos Panamericanos, es una fecha memorable para Cali, para el Valle y para Colombia, sería importante que en esa oportunidad se pudieran reunir a algunos de los personajes, que hicieron posible, bueno de los veteranos, de los dirigentes creo que no sobrevive ninguno, sobrevive un hombre emblemático, del deporte vallecaucano cómo es Jaime Aparicio.
Reunir a deportistas, que todavía viven después de esa faena y que fueron protagonistas de esos juegos, hacer una especie de réplica de los Juegos Panamericanos, rendirle un homenaje así sea póstumo a tantos personajes, Alberto Galindo Herrera a quienes crearon la entidad, la institución, que finalmente se convirtió en el apoyo grande para organizar estos juegos, a Coldeportes hoy Mindeportes, porque tuvo alma y espíritu vallecaucano; al director Jorge Herrera Barona, creo que en está en este homenaje a Cali y a los Juegos Panamericanos del 71 deben participar toda la fuerza viva del deporte nacional, en este momento representa desde luego por él COC, las Federaciones Deportivas Nacionales.
Debe haber una gran celebración, por que definitivamente es el gran certamen deportivo que cambió la historia del deporte colombiano, sobre todo la cambio por la mentalidad, porque se adquiere una mentalidad mucho más positiva, frente a las posibilidades de que Colombia llegará a alcanzar unos niveles de rendimiento que aunque lentamente los ha venido logrando y se están reflejando en los resultados actuales de nuestro país. Debe ser un acontecimiento gigantesco esa celebración de los 50 años de los Juegos Panamericanos de Cali.
