En Caliescribe, Rep. Duvalier Sánchez

Por Redaccion |
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Redacción

A la hora de las 7 de Caliescribe, presenta un Encuentro de ciudad – región con el representante a la Cámara Duvalier Sánchez , líder del Partido Verde en el Valle del Cauca, para reflexionar sobre la crisis económica, social y política del Valle del Cauca. Nos acompañaron los columnistas Guillermo Ulloa, Yolanda Varela y Alex Sterling. Así mismo contamos con la conexión desde Budapest del director Ramiro Varela M.

Representante a la Cámara Duvalier Sánchez , líder del Partido Verde en el Valle del Cauca ¿Cómo analiza usted este problema politico, económico y social del Valle y Cali?

Creo que Cali hace un tiempo ha perdido el ímpetu y el liderazgo como capital de región además y también digamos hay una desconexión entre lo público y las otras fuerzas de la sociedad, digamos la academia, la empresa privada, los liderazgos sociales y comunitarios. Esa fractura se profundiza de forma además considerable, que creo que todavía no lo hemos logrado solucionar, ni veo muchos candidatos a la alcaldía planteando propuesta en ese sentido…. En el paro social, digamos en el paro del 2021, vemos que brotó y salió de las comunas populares, de los barrios populares a las avenidas principales, eso digamos que en el DPS se conoce como la línea de la pobreza y Cali mucha gente que está por debajo de esa línea de la pobreza que no tiene, los ingresos económicos suficientes para subsistir y eso pues es parte de la realidad que tiene la ciudad.

Tenemos mucha migración social, mucha pobreza, poca oferta de política pública, social, de poder acceder a oportunidades para salir de esas condiciones en las que llegan o en las que viven sus padres; eso es lo que tenemos hoy en un reflejo de una ciudad absolutamente fracturada en lo social. Y  otra parte de la sociedad que básicamente no ha entendido el mensaje un poco que hubo en el paro, sino que se generó una división política y casi que de clase. Por otro lado, los gobiernos que hemos tenido lo que yo denomino ese ímpetu de liderazgo desde lo público para poder sacar a flote la ciudad en materia fiscal.

La ciudad hasta la administración de Guerrero tenía la administración de sus rentas tercerizadas, con esto que se denominaba Sicali, y ahí teníamos un gran problema porque ni siquiera éramos autónomos, de nuestra propia administración, de nuestro propio recaudo fiscal. Después de esto, hemos tenido diferentes endeudamientos para poder financiar obras, obras que no necesariamente el endeudamiento nos ha llevado a impulsar el desarrollo económico de la ciudad y generar riqueza. Y tercero, la ciudad con su empresa más importante, que es en Emcali, no ha logrado desarrollar nuevas unidades de negocio y realmente lo que le genera Emcali a la ciudad en términos de transferencias es realmente mínimo comparado con lo que pueden generar otras empresas como ETB, EPM y demás. Entonces, digamos que el municipio no ha logrado desarrollar empresas de economía mixta que le generen utilidades para inversión social.

El partido verde y el alcalde Ospina

Yo no tengo ningún vínculo con la administración de Cali, ninguno, pero compartimos partido con Jorge Ivan Ospina. Ahora en el partido hay gente distinta en todos, como en las familias. Yo le digo que el verde es una casa, él duerme en un cuarto y yo en otro y nunca nos vemos. Y yo puedo considerar que realmente su administración es lamentable para la ciudad, pero pues es parte de la crisis de liderazgo de la ciudad, que ha tenido que reelegir alcaldes porque no ha logrado que se desarrollen nuevos liderazgos con propuestas, digamos, un poco más vigentes con la realidad de la ciudad y sobre todo con principios, que creo que es lo que en este caso falta. Parte de ese costo político, quiero decirles esto, yo nunca lo he dicho, pero es que mi postura fue ¿cómo se asume la responsabilidad política como partido? eso tiene que tener una forma de proceder, no solo decirlo. Y la forma, yo les dije, la ciudad dio una confianza, la respuesta de esa confianza a Jorge Iván Ospina es que la ciudad no acompaña la administración, las encuestas así lo dicen, tiene un rechazo altísimo, así que el partido debería asumir no tener candidato, no dar aval a la alcaldía y concentrarnos en el control político, que creo que deberíamos hacerlo desde allí.

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Es así como yo he hecho control político, por ejemplo, el contrato de Emcali sobre el cambio de los medidores de energía a medidores inteligentes y lo tumbamos, con debate en la Cámara de Comercio, con denuncia en la Contraloría, con debate en la Comisión Cuarta del Senado. ¿Por qué si respondemos nosotros? Por lo que hemos hecho en Jamundí, por sus obras, por el reconocimiento a tener la administración más transparente en Colombia, donde pasamos de dos oferentes en promedio a más de 24. Sobre lo demás, yo no creo que en Cali no se haya hecho inversión social, creo que hubo avances,  la estrategia de territorios de inclusión y oportunidades TÍOS iba en esa dirección, con diferentes programas de adoquinamiento, de oportunidades para jóvenes, jóvenes en contexto de conflicto en pandillas y demás, y ahí había un avance. Parte de haber acabado todos esos programas de política pública social en el gobierno de Ospina, también fueron los que detonaron esto, porque muchos de esos jóvenes se quedaron sin nada que hacer, porque no se le dio continuidad. Pero a mí lo que más me preocupa es que la ciudad termine dividida en términos de clase: los del paro, la gente del oriente, los que destruyeron la ciudad, y los otros que se denominan los ciudadanos de bien, yo creo que eso realmente es un problema muy grande para liderar y gobernar una ciudad, para que una ciudad se reconozca, para que una ciudad avance junto con sus fuerzas vivas, con sus fuerzas industriales, empresariales y demás. Entonces, eso es para mí, digamos, lo que más me preocupa.

En este gobierno, como el alcalde perdió toda legitimidad…

 Y pasó, después de su feria virtual, su alumbrado virtual de diciembre del 2020, y de su actitud durante el paro, entonces de ahí para acá pues hemos tenido realmente una realidad en la ciudad que es un poco deprimente. Es una ciudad que va como con la inercia día a día, pero con el orgullo apagado, y con la esperanza también desaparecida. Entonces, de eso se trata.

Yo creo que hay cómo salir adelante, creo que lo que he desarrollado es una ciudad que tiene que mejorar su estructura fiscal, una ciudad que tiene que abrir unidades de negocio, porque realmente no tiene empresas que le produzcan, ejemplo, Corfecali es una empresa mixta que podría desarrollar eventos, conciertos, ferias, venderle esos servicios al resto del departamento. Corfecali vive de lo que le transfiere la alcaldía para hacer la feria de Cali, de eso vive, es decir, es una empresa que podría hacer eventos, producción y demás, pero vive de lo que le pasa a la alcaldía y así es muy difícil, porque entonces realmente no tenemos verdaderas empresas mixtas, sino que tenemos simplemente contrataderos, que es lo que termina siendo este tipo de figuras jurídicas.

Qué hacer para que en Cali nos unamos…

Y volvamos a tener una ciudad, una región, y un departamento líder, como lo fuimos en el siglo pasado, que el desarrollo industrial de Cali le dio una vigencia política, y una vigencia nacional, y nos convirtió en un departamento muy atractivo para la inversión, para los mismos colombianos de otras partes del país que se venían acá a trabajar, a ser familia, a contribuir con sus aportes, las migraciones son buenas porque esa mezcla cultural, esa mezcla de saberes, trae desarrollo. Pero hoy realmente nosotros no estamos jugando como protagonistas en el escenario nacional. Yo creo que lo primero es que tenemos una crisis, digamos, que tiene múltiples factores, que la podrían explicar. Lo primero es el liderazgo político.

Nosotros no estamos renovando la capacidad de liderazgo

 Si usted hoy habla con cualquier caleño, y le pregunta por quién va a votar a la alcaldía, nadie tiene una respuesta contundente, una energía que diga voy a votar por este, me gusta por esto, creo en esto, y va a hacer esto. Hay un desgano en eso, es decir, no hay una inspiración, y el liderazgo político debe tener pasión, inspiración, legitimidad, coherencia, sueños de ciudad, no simplemente ser un gerente o un administrador. eso en una empresa, puede que funcione, pero en lo público, liderar una sociedad, necesita eso. ¿por qué? porque necesita tener la fuerza para convocar esa sociedad, y eso no lo tenemos, entonces, simplemente estamos eligiendo gente que pasa por la administración, sin tener esa capacidad de jalar a Cali. Entonces, primero, yo creo que hay una crisis de liderazgo político y digamos que ahí, pues nadie está viendo cuál es el proyecto que se le ofrece a la ciudad, cuáles son las propuestas de ciudad, sino que todo mundo está viendo dónde no pierde. O sea, la apuesta en las elecciones es de quienes hacemos política, de los concejales, de los diputados y demás, es tratar de calcular dónde no pierde, dónde gana algo. Y muchas veces entonces se gana las elecciones, pero pierde la ciudad, es lo que termina pasando.

Tenemos un tejido empresarial que ha estado en una zona de confort..

Sí, tenemos una economía diversa, con eso sacamos pecho, como que no nos afectan las crisis internacionales, porque hay una diversificación económica, pero para mí es una economía un poco dormida, desarrollo empresarial dormido, que no se reta. ¿por qué? porque venimos de una estructura en la cual se desarrolló un gran sector, que es el del cultivo de la caña, y entonces unos desarrollaron muy bien ese modelo y otros que tenían la tierra, otros terratenientes, otros decidieron rentarle a quienes tenían la producción y la industria de la caña. Y ahí hay un modelo en el cual se ha ido diversificando y los capitales han ido invirtiendo en otros lugares. Yo he visto cómo se invierte en la Orinoquía, en los Llanos, he visto cómo se invierte en Perú, en Chile, pero en el Valle del Cauca la industria de la caña va ahí, igualita a hace cincuenta años. Y otro tipo de industria vallecaucana, digamos que está ahí, pero que no logra crecer más, sino que está estable, no ha conectado con lo público, no tiene ninguna interacción.

Hay una industria creciente…

Por ejemplo, el desarrollo de software, de programación, y de servicios de tecnología, que es una cosa realmente atractiva que podríamos ser mucho más protagonistas, y eso es como lo más vigente. Y otra que son las multinacionales que poco a poco se han ido, y realmente, a donde están llegando las empresas es a Barranquilla, hay un alto dinamismo de movimiento de capitales. El emprendimiento no cuenta con el sector público, el emprendimiento se da por fuerza propia, por endeudamiento con la banca. En conclusión, yo sí creo que no tenemos quien convoque, que no hay un liderazgo con una visión clara de ciudad y de región, que hay una desconexión, y esto sí es un problema grave, entre quien lidera al departamento, entre la gobernación, y quien lidera la ciudad, y eso es evidente, eso no se han entendido, a Cali, y las élites caleñas, nunca les ha importado la gobernación, es como que se la entregan a las maquinarias. Allá gobiernen ustedes, y nos dejan la disputa por Cali. Entonces, al candidato de los empresarios, o al candidato que les gusta, o candidata, a ese sí le meten la ficha, y se desentienden de la gobernación.

Y un ejemplo de eso es, a nadie le importa que en Buenaventura, el 65% de la gente no tenga empleo, a nadie le importa que en Buenaventura no haya acueducto y alcantarilla las veinticuatro horas del día, a nadie le importa que en Buenaventura haya un hospital de tres pisos, que básicamente es un centro de salud que atiende urgencias, el resto de la gente, que son 450 mil personas, tengan que salir corriendo para Cali.

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Es como un silencio cómplice entre todo el mundo

O sea, ese es el tamaño de los problemas que tenemos, que en 9 años a nadie le importó que diariamente viajen 37 mil personas a Candelaria, que trabajan en Cali, que vivían en Cali, pero que la vivienda la tuvieron que comprar en Candelaria, y que durante nueve años a nadie le importó que hubiese un puente que no se ha terminado, y nadie se preguntó por qué. Esos problemas son los que nos tienen en un atasco de desarrollo. El parque industrial La Nubia, donde hay más de doscientas empresas pequeñas, medianas, está jodido, porque necesitan esa via, la doble calzada y un puente para poder que sus empresas, sean competitivas, pero como a nadie le preocupó. O sea, pasan los problemas, los problemas están ahí, son evidentes, y nadie dice nada. Es como un silencio cómplice entre todo el mundo. Se roban lo que se tengan que robar y nadie dice nada. Eso es lo que nos está haciendo mucho daño. Falta proyecto de región, proyecto de ciudad, proyecto de desarrollo, y quién lo lidere, pero también ser un poco más críticos con la administración de los recursos públicos a nivel local y departamental.

Yo no he dicho que sea Corfecali la que tenga que crear empleo en el sector público. Yo creo que el empleo lo crea el mercado, el desarrollo empresarial, eso crea el empleo. De esto, el Estado crea burocracia y eso es muy distinto. Lo segundo es Corfecali. No, yo no dije que tenían que ponerle más talanquera a la producción, yo dije que Corfecali tenía que salir a competir, que no solo tenía que vivir de lo que le pase al municipio, porque son entonces unos contrataderos o unas falsas empresas mixtas. Es salga y compita, es una empresa mixta. Vaya, ofrezca sus servicios a los empresarios y ofrezca la producción de eventos, pero no se quede esperando a que le llegue el petróleo, la feria de Cali o los festivales para que le transfiera al municipio y sea desde ahí que usted tiene sus ingresos.

Confort en ese sector de la economía…

Yo no tengo ningún problema con el sector de la caña. Yo lo que creo es que como hemos tenido ese modelo de desarrollo, hay un confort en ese sector de la economía, como no tenemos el esfuerzo que han tenido que hacer otras regiones del país como los paisas. Entonces, como no tienen un departamento plano, digamos, lo más plano que tiene está en el Golfo de Urabá y en el Golfo de Urabá tiene un problema parecido. Solo es una región de banano, y es parecido. Usted cambia el cultivo de caña por banano, allá hay violencia, pobreza y demás. Lo que creo es que deberíamos exigirnos más, porque tenemos muchísimas oportunidades. Es decir, si en algún departamento tiene condiciones ideales, es el nuestro.

Tenemos puerto, pero no tenemos ciudad…

O sea, no tenemos ciudad al lado del puerto. Tenemos un puerto aéreo maravilloso, con condiciones climáticas que lo llevarían a ser el más competitivo del país. Pero el puerto nuestro es una terminal aérea que trabaja a media máquina, a 50% de su capacidad operacional. ¿Cómo el aeropuerto no lo ponemos de verdad a producir? ¿Cómo no traemos una casa matriz, un hunter aquí al aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, que puede trabajar todo el tiempo? Es mucho más cómodo que el sol que pega en Río Negro, donde para poder llegar a Río Negro tuvieron que atravesar una montaña con túneles. Aquí no, esto es doble calzada. Maravillosa, tenemos mucho para ofrecer allí. ¿Cómo no conectamos, el norte del Cauca y cómo no conectamos ya por fin la doble calzada Buga-Buenaventura? No la hemos podido hacer para poder que tengamos durante todo del sur, al norte del departamento, desarrollo con parques industriales y nosotros estamos al 80% del mercado del país. Tenemos unas ventajas para que haya empresa, para que haya empleo, a partir del desarrollo económico, no a partir de generar más burocracia.

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Diplomacia local….

Yo creo que nos falta visión de región, de integrar esas oportunidades y de ver también esas oportunidades. Por ejemplo, solo por decirles una cosa, yo creo que Cali y la gobernación deberían desarrollar una apuesta por una cosa que se llama diplomacia local. Agencias, que lo tiene además Medellín, que se dedican exclusivamente esas agencias a tratar de generar interacción y apertura económica con aliados directamente. No necesariamente lo que hace la cancillería, no, un tipo de oportunidad de abrir puertas a la región y a la ciudad frente a otros mercados y otros aliados. Eso debería hacerse.

Para lograr un cambio es reconocer los problemas que tenemos.

Si decimos que todo está bien o que está medianamente bien, pues ahí es cuando nos conformamos con lo que tenemos. Y no estamos bien. El promedio nacional de desempleo está en 9,3. En Cali está en 11,1. O sea, si eso es parte, eso es una gran señal. ¿Cómo es posible que el Valle del Cauca esté por encima en desempleo de la media nacional? ¿Cómo se explica eso? No solo tenemos buena infraestructura, no solo tenemos puertos aéreos y marítimos, tenemos universidades públicas de calidad, descentralizadas, no solo están en Cali. Tenemos un sistema de regionalización por parte de la Universidad del Valle Bueno, tenemos una universidad ICESI, que es un buen modelo de universidad. Yo creo que sí nos falta sacar la cabeza de la tierra, mirar las oportunidades, reconocer los problemas, convocarnos a sacar adelante los problemas, dejando a un lado los intereses personales y los egos. ¿Por qué si no? Es como una actitud donde el caleño, el vallecaucano está siempre a la defensiva. O sea, no se puede decir nada porque, porque estamos a la defensiva. ¿Por qué no? Es que vallecaucano como vallecaucano no, no es un ataque personal, no es un ataque al ego. Digámonos unas cuantas verdades y pongámonos de acuerdo en unas cuantas posibilidades y oportunidades que tiene la región, que están.

Tren de cercanías….

Miren, nosotros metimos mil millones de pesos para tener lista la factibilidad del tren de cercanías, primera línea Jamundí-Cali. Una apuesta dura, porque además Cali, que es mucho más rico que Jamundí, pues metió dos mil millones de pesos. Y hay unas apuestas que deberíamos llegar todos allí y mejorarlo, pero, cuando hay ya estos proyectos de región, que para mí el tren de cercanías debería ser un eje estructurante de desarrollo a lo largo de la región, porque si hay ese sistema de movilidad sostenible, entonces ya no importa si usted compra su casa en Cerrito, o en Ginebra, o en Guacarí. Usted ya tiene un sistema seguro, económico, sostenible, para que usted viva en Guacarí y trabaje en Cali, o viva en Guacarí, o viva en Cerrito y estudie en Univalle de San Fernando. Y eso sí sería un proyecto a treinta años a desarrollarlo y que nos conecte a la región, porque los del norte del valle ni siquiera se sienten Vallecaucanos. Eso es para mí un poco lo que deberíamos contemplar.

La inseguridad

Y ahí tenemos un reto inmenso, porque ahorita Ramiro dijo que Cali es una ciudad que realmente tiene muchos desafíos. No, yo creo que hay otra. Yo vengo de Cúcuta. Cúcuta tiene unos problemas realmente grandes con la migración de extranjeros, con los problemas del Catatumbo y demás. Nosotros tenemos un problema y es, el asociado a la inseguridad. Ese y la falta de liderazgo político asociado a la corrupción y que básicamente hay una desconexión muy grande entre sociedad civil, empresa privada, academia y el liderazgo político, nos genera problemas de desarrollo. Nosotros al tener grupos ilegales de extorsión, de microtráfico, de delincuencia y al tener por otro lado grupos armados, organizados, que son disidencias de las FARC, nos confluyen muchos temas en materia de seguridad que nos hacen mucho daño. Y eso sí, digamos, aleja la inversión y le quita lo atractivo que puede tener el departamento y ese sí es un problema que no hemos solucionado y que yo he intentado que el gobierno nacional preste suficiente atención. Por ejemplo, en Jamundí Tecnoquímicas es como la única gran empresa que hay, pero se ha quedado de valientes allí y ahora por la confianza en el gobierno municipal, han decidido no llevarse la ampliación de la planta a otro lugar, sino que la han hecho aquí, en la sede que tiene Tecnoquímicas en Jamundí sobre la Panamericana. Han hecho una gran inversión, han ampliado la planta y están muy contentos, porque pueden trabajar de la mano de la administración municipal, las licencias de construcción se le han dado y se le ha puesto, todo a disposición para poder que su trámite sea rápido, no extorsionarlos como pasa en Buenaventura. Yara se iba a establecer en Buenaventura, el alcalde en su momento le pidió una coima y Yara prefirió hacerse en la variante en Yotoco y eso pues le quita posibilidades de empleabilidad. Yo creo que por eso es que es tan importante que lo político funcione para que le genere garantías y condiciones a la inversión privada para que haya desarrollo empresarial y empleabilidad. Solo por dar un ejemplo, el de Jamundí con Tecnoquímicas.

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Penúltimos en educación

Lo primero, la base, el talento humano. ¿Ustedes acabaron de ver el informe de competitividad donde salió el Valle del Cauca? Salió de penúltimo en temas de educación. Todo ese desarrollo de servicios y capital y demás, va a ver todos estos indicadores. Va a ver seguridad, universidades, calidad educativa, condiciones políticas, condiciones logísticas y también ¿qué se le ofrece? ¿Cuál es la apuesta por atraer? Porque si no, entonces, claro si ven que en otras regiones hay más dinamismo hay mejores condiciones pues se van a otras regiones. Eso sí, el capital no tiene corazón sensible o solidario. Simplemente va donde haya mejores condiciones. Pero si ven una región que están dando en diferentes materias, pues van a llegar acá de nuevo. Incluso quienes tienen plata en Cali, no invierten en Cali o en el Valle. Van y la invierten en otro lado. Yo se los puedo mostrar. En Chile, en los llanos, en Perú, en Estados Unidos, la invierten en otro lado. En Centroamérica y demás. Yo sí creo que debe haber una apuesta, aquí podemos tener una apuesta agroindustrial, yo creo que todavía tenemos sobre la cordillera central, sobre la cordillera occidental tendríamos ahí para diversificar el tipo de cultivos, además porque hay un tema de campesinado allí que hay que darle las posibilidades de que también tengan ingresos y desarrollo. Y yo creo que en servicios sí tenemos una gran oportunidad, pero pues hay que generar las condiciones a través de política pública. Aquí en Cali se creó una Secretaría de Desarrollo Económico, pero crear la Secretaría no genera el desarrollo económico. Nos toca de verdad ver cuáles son las apuestas donde nosotros creamos esas condiciones, donde somos más fuertes y a partir de ahí pues lograr sacar adelante la ciudad. Yo no sé si es el turismo, yo no sé si es la gastronomía, yo no sé si son los servicios como el call center, los servicios tecnológicos, yo no sé si entonces hay que prestarles más atención a las apuestas de la Cámara de Comercio en términos de clúster. Esa es una conversación que deberíamos abrir y ponernos de acuerdo y tratar de generar ahí desarrollos.

Los pensionados del mundo ..

Yo por ejemplo, creo que Cali y el Valle tienen una gran oportunidad, en una apuesta que tiene Panamá y que tiene Costa Rica y es; hay una tercera edad del mundo, que busca dónde sentarse, son los pensionados del mundo y busca vivir en lugares que no es Estados Unidos y busca vivir en lugares tranquilos con buena calidad ambiental, con buenos servicios de salud y que per cápita genera una buena dinamización de la economía porque tienen buenas pensiones que aquí, la pensión es un gran ingreso, nosotros en el Valle podríamos tener esa oportunidad. Qué necesita un adulto mayor pensionado para sus últimos 15 años de vida, 20 años de vida, pues tener unas garantías, unos incentivos económicos, unas buenas redes de salud, unas buenas redes de provisión de servicios y ahí tendríamos una oportunidad. Esa apuesta hace rato la hace Panamá y Costa Rica. Yo sí creo que ahí podríamos tener y deberíamos tener una apuesta real, pero sin la formación del talento humano y sin la visión política de desarrollarlos es realmente imposible. Por ejemplo, para el deporte, si, nos ganamos los Juegos Nacionales y hubo una apuesta allí como para que el departamento se volviera a sentir líder en algo. Pero aparte de eso, esos deportistas se vuelven también líderes sociales y deberían de volverse. En Estados Unidos un medallista olímpico después se vuelve un gran abogado, se vuelve un gran empresario, aquí no; después de la medalla esperan que les den un apartamento. …

Hacemos como cosas que no están conectadas en un plan de ciudad

Yo veo cuando llego en el aeropuerto y entro por la avenida segunda, veo el parque que se hizo al lado del río Cali, entre la clínica de Los Remedios y la Torre de Cali, y ahí se invirtió una cantidad de dinero, ahora tuvo sobrecostos, los diseños eran muy complejos y demás, pero eso no lo disfruta ningún caleño, lo disfrutan habitantes en situación de calle, lo disfrutan algunas personas en el consumo de sustancias psicoactivas, pero nadie disfruta de eso y fue una gran inversión. Dos carriles que se le cedieron al peatón y nadie lo disfruta, entonces hacemos como cosas que no están conectadas en un plan de ciudad, en un plan de desarrollo, de nuevo urbanismo, de urbanismo social. Y eso es en parte como que la gente viene y siente que Cali está quedada y los mismos caleños sentimos que no está pasando nada con la ciudad.

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Pocas veces uno tiene la oportunidad de desarrollar las ideas

O lo que uno piensa, las reflexiones en este tipo de espacios, pero bueno, acá han sido muy generosos en la interacción y en permitirme escucharme. A mí me apasiona el Valle del Cauca. Yo realmente siempre he estado muy interesado en esto, por eso yo fui candidato a la Asamblea, yo fui candidato a la Gobernación y ahora tengo este inmenso honor de servirle al Valle como representante del Valle del Cauca. A mí me dicen senador en todos lados, yo digo no, yo represento al Valle del Cauca. Hablo de temas nacionales en los debates, pero es el Valle del Cauca quien está en el centro de mi prioridad. Entonces, yo sí creo que estamos caminando, yo estoy intentando hacer mi aporte,

Intentando construir proceso político…. Ver la metástasis de la corrupción

Tomé una decisión después de la Ola Verde, yo dije no, yo no voy a construir ni una ONG, ni una asociación, eso lo pueden hacer otro tipo de entidades y de grupos. Yo quiero competir por el poder político para que la política y con ese poder le sirvamos al bien común, le sirvamos a la gente. Es el poder para poder. Y porque yo ya he logrado ver como un cirujano abre ese cuerpo y ver la metástasis de la corrupción. Los vallecaucanos no son conscientes de eso. Los gremios, los grupos cívicos no tienen esa oportunidad de ver eso. Yo lo vi aquí con mis ojos en Jamundí.

Yo lo he visto cuando desafío el poder regional.

Yo vi cómo se robaron la plata de 300 ventiladores que compraron, que aparentemente compraron, pero que nunca llegaron para la pandemia, respiradores para las unidades de cuidado intensivos. Yo he visto cómo el puente de Juanchito empezó en 27 mil millones y ya va en 70 mil millones de pesos, en eso va. Yo he visto cómo el exceso de burocratización está creando una maquinaria que cada vez se hace más invencible, como el slogan de la gobernadora Clara Luz Roldán. Yo les quiero contar, acabo de empezar a hilar cómo han desarrollado un mecanismo sofisticado de burocratización y de clientelismo, donde todo ahora son gestores. Tienen gestores deportivos, gestores culturales, tienen gestores de las TIC, tienen gestores ambientales, tienen gestores en turismo, tienen gestores en convivencia derivados de la pandemia. Todo esto son una cantidad de contratistas que nadie sabe qué hacen en la práctica, pero que sí terminan siendo unas fuerzas de burocracia, de clientelismo y de politiquería para lograr mantener el poder. Nos tienen secuestrada la democracia en el departamento, capturada, y todo el mundo decide hacerse pasito. Es muy poco el cuestionamiento o la crítica argumentada que se le hace al poder de la señora Dilian Francisca Toro, es muy poco, es reducido. Todo el mundo muy concentrado en Cali, muy concentrado.

Necesitamos que a Cali le vaya bien, pero que al Valle le vaya bien

Ese sería mi sueño de ciudad y de región. Y por eso estoy en esta lucha y estaré impulsando liderazgos, apoyando liderazgos, formando liderazgos y con lo que pueda, ayudándoles a que en Guacarí haya un concejal decente, en Jamundí tengamos más liderazgos y ojalá sostener la administración y darle continuidad a las obras que hemos hecho. Eso es lo que estoy haciendo ahora. Creo que esto sí es dialogando con todos los sectores, entendiéndonos desde la diferencia, desde los puntos comunes. Yo no creo que esto es con resentimiento. Yo no creo que esto es aceptando la violencia como una forma de expresión. Yo rechazo la violencia, yo creo en la democracia. Creo que es a través de la política que uno resuelve los conflictos.

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