- 25 vistas
Editorial
Esta campaña nos dejó como la ciudad más tercermundista de las grandes capitales colombianas, donde Bogotá brilló por la lucha de ideas y controversias democráticas, Medellín por la confrontación entre una ciudad que quiere cambio contra el Alcalde actual, Barranquilla la puerta de oro de Colombia que desea continuar sus políticas económicas y sociales de crecimiento y Cali con candidatos que indudablemente se dedicaron a fomentar la pelea y el odio
Uno no puede entender que las estrategias de las campañas de Alejandro Eder y del Chontico Ortiz haya tenido que dedicarse a la estrategia de la guerra violenta, que originó odio, por la búsqueda de la destrucción del contrario.
Hay que decirlo claramente que decir la verdad de un candidato político no es guerra sucia, su contendor tiene la oportunidad de presentar la denuncia penal por calumnia e injuria y el ofendido a defenderse. La guerra violenta en Cali comenzó cuando Alejandro Eder en las encuestas, su estrategia fue convertir al Chonto en el continuismo del alcalde Ospina y descubrirle publicitariamente el acompañamiento de todos los concejales que soportan a Ospina, y de ese gobierno en favor de Ortiz. Y eso lo llamó continuismo, para convertirlo en chontinuismo. Gol de Eder…Goooool,,,acompañada de vallas, volantes y excesivo en redes sociales. Conclusión, bajó en las encuestas a Ortiz.
Pero abrió la violencia de la campaña Ortiz contra Eder y esa verdad, que dolió, donde desmontó de ser el opositor 4 años de Ospina , lo convirtió en aliado . Y allí arrancó Ortiz, su campaña y sus amigos , la guerra sucia, cualquier cantidad de verdades parciales y de mentiras como fake news, montajes, memes, etc. Las dos campañas están de igual a igual en la guerra sucia.
Y ese es el legado de que estamos recibiendo para la historia de esta ciudad, la ciudad nuevamente quedó dividida entre ricos y pobres, si gana el Chontico, será un Concejo similar al de Apolinar Salcedo, sometido a las mayorías ganadoras del concejo. Y si gana Eder, será un Alcalde similar a Rodrigo Guerrero y a Maurice Armitage, en una versión mejorada,. Porque no tocó Eder para nada las políticas de Guerrero y de Armitage, igualmente corruptas como las de Ospina, y totalmente equivocadas para la ciudad.
El nuevo alcalde llamará a la unión de los caleños, Concejo, JALs, JACs, empresarios, gremios, etc, pero la ciudad estará partida…deberá tener un gabinete de unidad, que no lo hizo Ospina, ni Armitage ni Guerrero y en un plan de desarrollo podrá convocar a la unidad de ciudadanos, todo depende de lo generoso, en sus primeras decisiones.
