Consideraciones sobre las elecciones en Cali y en el Valle del Cauca

Por Luz Betty Jime… |
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Luz Betty Jiménez De Borrero / Pablo A. Borrero V.


 

Ante el descontento ciudadano que reina en Cali gobernada por un alcalde populista y autoritario, no es improbable que un sector de la clase económica y políticamente dominante acceda al poder local con el candidato que puntea en las encuestas de opinión. Dicha probabilidad, sin embargo, dependerá de los resultados de la votación final entre los candidatos que se disputan la alcaldía en medio de la lucha competitiva por el poder para dirigir y administrar la ciudad.

Por los lados de la gobernación lo más probable es que la candidata Dilian Francisca Toro sea la escogida para dirigir los destinos del departamento del Valle del Cauca.

Así las cosas, la participación de los diferentes partidos y movimientos políticos en la contienda electoral no constituye de por sí una garantía del denominado libre juego político en que se fundamenta la doctrina liberal. Entretanto, se manipula a la opinión pública mediante una serie de encuestas financiadas por aquellos grupos de interés que manejan directa o indirectamente la gestión administrativa local y departamental.

En esta oportunidad y como sucedió en otras ocasiones para elegir alcalde, gobernador, concejales, diputados e integrantes de las juntas Administradoras locales JAL; no es improbable que muchos ciudadanos se abstengan de votar asumiendo de esta manera una actitud pasiva, en tanto no se sienten sujetos de derechos ni de obligaciones, los que por otra parte pueden ser objeto de toda clase de manipulaciones por las clases dirigentes que para tal efecto utilizan la compra de votos como una práctica recurrente en épocas electorales.

Otros sectores abogan por la práctica del denominado “voto útil” que se opone tanto al voto en contra de un determinado candidato como al voto por el candidato “menos malo”, lo que conlleva a decir por algunos estudiosos de estos temas electorales, que por este camino “muere la democracia”, ya que el ciudadano no entiende el verdadero sentido de su responsabilidad eligiendo a cualquier mandatario o representante en los órganos del poder público.

Dicho comportamiento surge casi siempre debido a que las condiciones y circunstancias del proceso electoral influyen en la conciencia de los electores contaminados con la politiquería, la corrupción y la violencia.

Estas manifestaciones contribuyen en la práctica a desnaturalizar las propias elecciones cuya legitimidad viene determinada por la participación masiva de los ciudadanos y no por una minoría electoral con la cual han venido gobernando las clases dirigentes.

Debe decirse que el participar en las elecciones votando por ejemplo en blanco, constituye una forma inequívoca de rechazo a las políticas contrarias a la defensa del interés general, entretanto se agravan los problemas de las comunidades sin que existan soluciones para sus problemas económicos, políticos, sociales, etc.

Por supuesto que en este caso se trata de contribuir con la creación de las condiciones para resolver dichos problemas, lo cual demanda de la unidad, organización y realización de nuevas acciones encaminadas a fortalecer un gran movimiento de masas capaz de influir de manera decisiva en la vida de la sociedad, ajeno a todo populismo, reformismo y demagogia que en la actualidad practican las clases dirigentes y sus partidos apoyándose y engañando a sus potenciales electores con promesas imposibles de cumplir.

Invitamos a los caleños y vallecaucanos a votar en blanco como una forma de expresión democrática y de lucha por un verdadero cambio social al tiempo que exigimos al alcalde y gobernador(a) elegidos, el cumplimiento de sus obligaciones constitucionales de garantizar la participación de los ciudadanos en todos aquellos asuntos de interés general en que esté de por medio la defensa del interés común de los ciudadanos de Cali y del departamento en materia económica, política, social, administrativa, cultural, ambiental, etc.


Veeduría Ciudadana por La Democracia y La Convivencia Social

El Control Ciudadano Sobre la Gestión Pública es Condición Indispensable para el Ejercicio de la Democracia y la Convivencia Social

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