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Editorial
Una investigación de la Fiscalía sobre el robo continuado multimillonario de crudo colombiano, exportado a Europa, Asia, entre ellos los puertos de Singapur y Ámsterdam ha sido la noticia de la semana, pero todos los medios a pesar del gigante robo, no le han dado el despliegue que ha tenido en otros casos, tratándose de empresarios, contratistas y políticos del caribe. La suma superior a US80 millones , algo gigante con subversivos metidos en el negocio.
El Presidente de la República, Gustavo Petro, identificó este como uno de los mayores robos al estado colombiano, que afecta a 40 empresas e involucra a 17 empresarios, entre ellos la estatal PDVSA, (venezolana).
La Fiscalía Nacional de Colombia ha adelantado donde el principal implicado es el empresario Hernando Silva Bickenbach, más una cadena de empresas en un desarrollo ilegal, algunas de papel, otras con oficinas de fachada etc.
La investigación tiene más de tres años, fue instaurada por el mismo Ecopetrol y es un desfalco ante la misma empresa. Una de las empresas Niman Commerce de Bogotá donde estaba vinculado el señor Silva, y todo el sitio era una panadería, que desarrollaba el trámite y gestión para facilitar procesos de transporte y distribución de crudo, donde funciona una tienda de barrio. El crudo de contrabando era vendido a otros países, todo como documentos adulterados que le permitía llevarlo a refinerías y luego comercializarlos.
También está la empresa C.I Exportec Nical que vincula al señor Luis Carlos Gandú, donde el crudo de contrabando hurtado al Caño Limón Coveñas, era gestionado a través de otra empresa autorizada Gunvor. Serían unas pérdidas superiores a 80 millones de dólares, donde también tuvo vínculos con el Ejército de Liberación Nacional y donde la Fiscalía implica a 10 empresarios en esta red de robo de petróleo.
Otro modelo fue importar hidrocarburos de baja calidad de manera clandestina desde Venezuela y Panamá, que les permitía ingresar a sus empresas y así entraban a la cadena de distribución para legalizar la mercancía. Actualmente los empresarios se declararon inocentes, donde también trabajó la Dijin, en la comercialización del crudo en costas del Caribe y otras ciudades colombianas. Lo simpático es que muchos medios de comunicación no han divulgado suficientemente este robo tan grande al estado colombiano.
Lo que se nota es ausencia de investigación y de información de algunos medios, irregularidades corruptas que también deben ser rechazados por el colectivo de opinión pública.
