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El Jodario
Por Gustavo Álvarez Gardeazábal
Fernando Vallejo es tan estruendoso y cantaletoso en sus diatribas cantarinas contra la iglesia, el gobierno, los poderosos y los maricas de Sabaneta que el país no ha podido darse cuenta que es el novelista que mejor escribe en este país.
Da envidia de la sana ver como Vallejo construye sus frases, regodea con las metáforas, conjuga perfectamente los verbos y maneja como nadie las puntuaciones. Pero pocos lo han querido admitir en el tono de gran verdad porque les da miedo confundir la acidez de su pluma
Para demostrarnos que el buen novelista puede hacer novelas tan impactantes como LA VIRGEN DE LOS SICARIOS o tan absurdas como LA PUTA DE BABILONIA, Vallejo acaba de publicar una novelota, en un tono humorístico incomparable así haya vuelto a jugar con su familia y la casa de campo de Santa Anita.
Narrando lo que significaba para el abuelo la llegada, cada vacación a su finca, de la tribu de los Vallejo porque su papá, (el ministro Aníbal), fabricaba hijos por docenas. Detallando con gracia de niñito malo todas las travesuras que le hacían a los abuelos, a las tías y a los vecinos, la novela se va volviendo una sola carcajada al punto que hay momentos en que uno cree que no está leyendo a Fernando Vallejo.
LLEGARON es una novela para confirmar la magnitud de escritor que hemos tenido. Y para que los que no se atrevieron a sus otras novelas escandalosas, se asomen a comprobar porque escribe tan bien.
La próxima novela seguramente será sobre su hermano Aníbal Vallejo, que bufanda en cuello aspira dizque a ser concejal de Medellín honrando a su padre pero no al escritor.
@eljodario
