No es solo un asunto MIO

Por Luis Hernán Oc… |

Por Luis Hernán Ocampo G.

Esta semana en una de sus editoriales, el Diario de Occidente se preguntaba si el Sistema MIO tiene salvación. Esa es la pregunta del millón en Cali desde hace muchos años, cuando este empezó a mostrar en sus resultados de operación, que no iban a llegar los más de 900 mil usuarios proyectados por la consultora que hizo la estructuración del proyecto hace 10 años. El fracaso del sistema ya está sobrediagnosticado, es hora de empezar a buscar soluciones factibles, reales para el problema financiero que afrontamos en el corto plazo y para el estructural de largo plazo.

Desde cuando tuve la oportunidad de conocer de cerca los problemas del MIO en el Concejo de Cali, pude evidenciar que desde la Alcaldía y la Presidencia del MIO se hacían gestiones para lidiar con el problema diario del sistema: menos pasajeros de los que necesita el sistema para ser autosostenible, operadores que se quejaban de estar trabajando a pérdida y amenazando con no sacar sus buses, nosotros los usuarios molestos por la eterna baja frecuencia de los buses, muchos de los cuales, ya cansados, prefirieron arriesgarse a coger un pirata o una guala o endeudarse con un moto.

El grave error de las Administraciones Guerrero y Armitage, ha sido creer que inyectándoles recursos a los operadores, estos iban a poder sacar el 100% de su flota. La realidad es que estos vienen arrastrando con el déficit desde cuando iniciaron operación y esos recursos que les entregaron en 2013 (90 mil millones), 2014 (30 mil millones) y 2016 (40 mil millones) según Caliescribe, (http://caliescribe.com/politica/2016/04/16/9882-mio-debe-reestructurarse), los han utilizado para pagar intereses a los bancos, hacerle el mantenimiento retrasado a la flota, pagar salarios y prestaciones adeudados.

Tal cual le acaba de suceder al operador Unimetro,  cuya publicitada reciente solución, una refinanciación de los bancos en julio, solo le duro un mes, pues el viernes pasado,  sus empleados volvieron a salir por enésima vez este año a protestar por los pagos de salarios y seguridad social del último mes trabajado. Como lo dice la gente en la calle, el MIO parece un barril sin fondo.

La práctica ha demostrado la ineficacia de la estrategia de la inyección de miles de millones a los operadores con recursos del municipio, sin exigirles que hicieran público el verdadero estado de sus finanzas. Así los caleños nunca hemos podido conocer si los recursos que se les han venido entregando, han servido solo para pagar sus deudas, o alcanzarían también para que sacaran a operar todos sus buses. Es por eso que también siempre he dudado de la eficacia del subsidio por 6 meses que le llevó la Alcaldía al Concejo, ¿por qué seguir dándoles recursos a los operadores si ellos no nos muestran cómo están sus deudas,  sus requerimientos de mantenimiento y de capital de trabajo para operar al 100%?.

Frente a esta situación que parece convertirse en un círculo vicioso, insisto en lo que ya había escrito en este espacio hace unos meses, el Gobierno Nacional debe asumir la responsabilidad en el fracaso financiero del MIO, así como el de sus hermanos en Pereira, Barranquila y Bucaramanga (y próximamente el de Cartagena), pues fue la Nación la que estructuró en documentos CONPES el fracasado modelo financiero de estos sistemas, haciendo una mala copia de Transmilenio en Bogotá.

En un mes llegará la anunciada reforma tributaria, en la que se habla de subir unos puntos el IVA y su familiar el Impoconsumo. Cada punto de esta familia de impuestos representa aproximadamente unos $3 billones. Por qué el Alcalde de Cali en asocio con sus homólogos no le piden a las bancadas de congresistas de sus regiones, que se unan para exigir que por un lapso de mínimo 5 años, se destine al menos medio punto del aumento del IVA (1,5 billones anuales) para financiar la terminación de la infraestructura de estos sistemas y se subsidie el pasaje de los usuarios, para que los operadores puedan tener un flujo constante y cierto que les permita equilibrar su déficit histórico.

Es cierto que hoy los sistemas como el MIO tienen el ingreso por sobretasa, pero en el caso de Cali en 2013 solo representaban $40.000 millones, lo cual es una cifra que no le hace ni cosquillas al déficit de los operadores.  (http://www.elpais.com.co/elpais/economia/noticias/para-donde-va-plata-paga-sobretasa-gasolina) Es hora de que la Administración de la ciudad deje de ver  esto como cuando alguien que quiere que no se metan en su vida expresa “es un asunto MIO”.  En este caso el asunto es de la Nación y del Municipio . Ningún impuesto, subsidio, tasa o estampilla local podrá resolver el problema financiero del sistema. Si queremos que no desaparezca el MIO, debemos contar con un ingreso millonario garantizado por varios años, y este solo se puede conseguir con el compromiso y ayuda del Gobierno Nacional.

TW @LuisHernanOG 

Búsqueda personalizada

Caliescribe edición especial