Luz Betty Jiménez De Borrero / Pablo A. Borrero V.

La existencia de la inseguridad bajo diferentes formas y modalidades no parece tener solución de continuidad en la ciudad de Cali, en tanto que desde el punto de vista estadístico unas veces tiende a crecer y otras a disminuir.
La inseguridad viene determinada por diversos factores que afectan gravemente la convivencia social a todo lo largo y ancho del territorio municipal. Generalmente la inseguridad tiende a incrementarse en las épocas de crisis Social según se ha podido comprobar históricamente al igual que la incapacidad de las clases dirigentes para resolver los problemas que se derivan de este fenómeno social que aqueja a la comunidad.
En la ciudad de Cali la inseguridad ha tenido periodos muy críticos y lo peor es que muchas de las acciones criminales han quedado en la total impunidad.
Junto a la inseguridad desatada por las bandas organizadas que han convertido grandes sectores de la ciudad en territorios propios de su dominio y del ejercicio de sus acciones criminales , prolifera la denominada delincuencia común que opera en las calles y avenidas de la ciudad, dedicadas al hurto de celulares, bicicletas, de asaltar a los usuarios que utilizan los cajeros automáticos, frente a los cuales las autoridades civiles, militares y judiciales no tienen otra respuesta que la realización de consejos de seguridad en donde acuerdan las mismas medidas de siempre (más cámaras de seguridad, aumentó del pie de fuerza policial y de los recursos del presupuesto para financiar las actividades de la policia); función esta que muy poco ayuda a combatir la inseguridad y hacer de la actividad policial y judicial una labor eficaz y coherente para combatir la delincuencia que azota a los ciudadanos en todos los puntos cardinales de la ciudad.
En otras ocasiones hemos sostenido que la ciudad requiere de una nueva estructura policial con la conformación de un cuerpo de policía municipal encargado de reprimir la delincuencia a partir de una nueva organización basada en la división del trabajo policial y encaminada a aumentar la oferta policial que demanda la población en cada barrio de la ciudad.
Dicha propuesta cobra especial importancia e interés a partir de la categorizacion de Cali como Distrito Especial que demanda de la presencia del agente de policía con mayor cercanía a los diversos sectores de la comunidad.

Por supuesto que los problemas de la inseguridad no se pueden resolver sino existe una política social que permita erradicar las causas que la generan y que les garantice a los ciudadanos sus derechos económicos y sociales, circunstancia esta que se ve limitada ante la actitud de los gobernantes de turno que se interesan más en construir toda clase de obras viales y de infraestructura antes que atender las verdaderas necesidades de la población como sería en este caso la seguridad que constituye un deber constitucional a cargo de las autoridades encargados de garantizar la vida, honra y bienes de los ciudadanos.
No sobra agregar que la política de seguridad debe ser construida con la participación de los ciudadanos, para lo cual invitamos a la nueva administración a conformar un Comité Consultivo integrado por representantes de diferentes organizaciones sociales, sindicales, gremiales, académicas, etc, comprometidas con el progreso de la ciudad y el bienestar general de todos los ciudadanos.
ADENDA: Frente a los graves problemas que afrontan la ciudad y los caleños, es menester que se priorícen las políticas públicas que privilegian el interés general por encima de los intereses de sectores económicos-gremiales, de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, de la construcción, de la Cámara de Comercio, Urbanizadores y propietarios de tierras.
Igualmente el alcalde de Cali debe dar a conocer los planes de financiación de las obras que pretende construir con ocasión de la categorizacion de la ciudad como Distrito Especial, el costo-beneficio para el municipio, sus localidades y sus habitantes y los instrumentos jurídicos y administrativos que se emplearán para adelantar dichos planes.
Veeduría Ciudadana por La Democracia y La Convivencia Social
El Control Ciudadano Sobre la Gestión Pública es Condición Indispensable para el Ejercicio de la Democracia y la Convivencia Social