Carlos Armando Cuervo Jiménez
Emprendedor y empresario con formación en Ingeniería Industrial
Ya se despertó la fiebre de precandidatos con interés en sustituir a Jorge Iván Ospina en enero del 2024.
Esta semana que culmina se escucharon nombres como el de Roberto Ortiz, Alejandro Eder, Wilson Arias, Angelica Mayolo, Catalina Ortiz, Roy Alejandro Barreras, José Renán Trujillo, Diana Rojas, Dannis Rentería, Tulio Gómez, Ana Erazo, Miyerlandi Torres, , entre otros.
Y ante el panorama mediocre de los casi tres años de Ospina como administrador de Cali, resulta decepcionante no encontrar un candidato que nos aglutine sobre dos ideas básicas.
- Recuperar el sentido de pertenencia por la ciudad
- Crear un frente común para recuperar el dinamismo económico, sin exclusiones, en una unidad entre clase política, gremios y fuerzas vivas.
- Evidenciar experiencia, conocimiento y transparencia
Cali financieramente es un desastre desde hace muchos años, no tiene como construir las obras de valorización faltantes del plan 21 megaobras
La casi quiebra de Emcali por sus manejos inadecuados, dejó a la ciudad sin una fuente importante de recursos, esto aunado a la pauperización de la gran mayoría de habitantes, evidenció una baja tasa de recaudos impositivos, lo cual obligó a disminuir drásticamente los presupuestos de inversión.
El panorama es poco halagüeño. En Cali no se volvieron a construir vías de interconexión, el MIO no es viable y se acaba de anunciar que llegan dos demandas nuevas contra Metrocali desde los despachos de dos de las firmas prestadoras del servicio.
La oficina de Planeación después de desbocarse en el sur con edificios en Pance ( POT ) , ahora improvisando con planes ridículos de supuesta peatonalización sin contar con los moradores de los sectores afectados, además de la evidente incapacidad de formular soluciones válidas las cuales beneficien a todos por igual, dejando de lado la fórmula de imponer restricciones ciudadanas como solución a la incapacidad de administrar adecuadamente.
Una transformación de municipio a distrito en la cual la ley no provee nuevas rentas para operar pero si compromete nuevos gastos de funcionamiento, encima de una pésima educación pública.
La ciudad con su área metropolitana , con unas tasas de inseguridad sin disminuir y con ninguna planeación para mitigarla, además de tener la malla vial con huecos sobre los huecos, con unos costos impagables que solo permite hacer maquillajes de vías….
Todo lo anterior con cargo a unos ingresos que no crecen con la misma velocidad de los problemas, obligando a gastar con obligación a vigencias futuras y al endeudamiento a largo plazo que puede colapsar como en el pasado inmediato, dejándonos con unas expectativas poco prometedoras.
Amplios conocimientos no más ensayos
Ante este futuro poco halagüeño se requiere escoger a un hombre o mujer con amplios conocimientos de la administración pública y con excelentes relaciones con el sector empresarial.
No resistimos nuevos ensayos con gente bien intencionada sin conocimiento de cómo funciona la maquina estatal.
Ojalá que el marketing político no cree otra figura que solo sea una imagen inútil para la ciudad.
Si a Ivan Ospina le quedó grande la administración de Cali ¿cómo sería para un inexperto como Tulio Gómez o cualquier otro candidato del sector privado?
Solo nos resta obligar a los futuros aspirantes a estudiar y manifestar las salidas estratégicas para sacar a la ciudad de la debacle actual sin nueva improvisación.