Por: Claudio Borrero Quijano
QUIEN GARANTIZARÁ LOS RECURSOS FINANCIEROS PARA LAS INFRAESTRUCTURAS DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS DE PANCE, que aseguren instalaciones de redes matriciales sanitarias y pluviales, además de las Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales, después de haber permitido EMCALI y el Concejo a iniciativa del Alcalde, darle inicio a los Planes Parciales Urbanísticos por fuera del perímetro sanitario y pluvial de la Ciudad, normas que fueron violadas en el P.O.T. vigente (artículo 30 de la ley 388/97), realidad evidente en el área expansiva del Corredor Cali – Jamundí en las planicies de Pance.
¿Quiénes pagarán los costos de extensión de los servicios públicos para adecuar al urbanismo el sur de Cali? Por supuesto debieran ser los directamente beneficiarios terratenientes del Sur, los mismos “avispados” propietarios que supieron montar su estrategia de avaricia insaciable en contra del resto de los habitantes caleños, quienes pagamos de vieja data las infraestructuras sanitarias y pluviales instaladas, así como las Plantas de Acueducto y Tratamiento de Aguas Residuales de la Urbe, estos tradicionales “avivatos” siempre terminan conectando gratis con sus nuevas urbanizaciones del sur, sin meterse la mano al dril, terratenientes que además el régimen contemplativo les ha facilitado ser contribuyentes prediales con tasas impositivas rurales del 14%o sobre avalúos rurales irrisorios de $1.54 por metro cuadrado en promedio.
Porqué nunca respondieron Derechos de Petición Ex Súper Intendentes de Servicios Públicos y Gerentes Seccionales? Cómo explica el actual Gerente de EMCALI y otros recientes ex Gerentes designados por la Súper Intendencia de Servicios Públicos sobre autorizaciones otorgadas a propietarios de tierras del sur localizadas por fuera del perímetro sanitario, propietarios que actualmente evacúan sus aguas residuales en las 1.658 hectáreas del Corredor Cali – Jamundí al colector sanitario río Cauca, tubería matriz no calculada para resistir esa sobrecarga a que se verá sometida con alto riesgo de colapsar al interior del corazón del Distrito de Aguablanca en su Estación de Bombeo del Barrio El Vergel (denominada de Navarro), esta irresponsabilidad debe investigarse a fondo pues se ha puesto en altísimo riesgo no solamente al millón de habitantes del Oriente de Cali de las Comunas Urbanas Orientales 21, 12, 13, 14,15 y 16, sino a toda la ciudadanía caleña que no podría convivir una urbe sanitariamente colapsada.
PANCE continuará creciendo a RETAZOS en la Comuna 22 y en el Corredor Cali – Jamundí. Los Propietarios en su avaricia insaciable no alcanzan a ver el mal que están haciendo intrigando aprobaciones indebidas, ellos mismos se hacen el harakiri que endosan al comprador desprevenido quien queda a la deriva viendo cómo se las arregla posteriormente en caso de colapsar tantas improvisaciones.
Para el terrateniente lo importante es vender a como dé lugar y cuanto antes sus viviendas de condominios costosos, aún no gocen de alcantarillados combinados idóneos que correspondan a un sistema colectivo de Ciudad bien planificada o con improvisados depósitos de pozos sépticos agotables en poco tiempo, los cuales descargan a fuentes hídricas permanentes o en servicio solamente en épocas de alta pluviometría, subsuelo contaminado para todos.
El agua potable también conducida por bombeo a largas distancias, con consumo de energía desde Puerto Mallarino a través de la tubería T.T.O., en alto riesgo de reventarla extrayéndole nuevas redes secundarias que llevan el agua potable a lugares imposibles de abastecer con las matrices normales, práctica que cuenta con el visto bueno del Departamento Técnico de Ingeniería de Emcali, colapsados esos empalmes obviamente deberá responder EMCALi.
DE LA MOVILIDAD – La verdadera gran Megaobra vial sería la prolongación de la calle 5, extendida hasta la calle 18 o Avenida Cañasgordas en su cruce con la carrera 159 en el sur de Cali, sitio aledaño al río Pance, Club Comfandi y Parcelación Valle de Los Pances, cruce vial en rond point que conecta con el sur hasta Alfaguara siguiendo la Avenida Cañasgordas, a donde igualmente se toma dirección al oriente de la Avenida Comfandi hasta la Carretera Cali-Jamundí o prolongación de la Avenida Simón Bolívar (Calle 25), la cual corre paralela a la línea férrea utilizable como corredor del Metro Ligero destinado al transporte masivo de pasajeros.
De no decidirse el Plan de Movilización Masiva, al igual que las soluciones matriciales sanitarias y pluviales, así como las plantas de tratamiento de aguas residuales, se debería con “emergencia evidente” suspender todos los planes parciales urbanísticos del área, de lo contrario más temprano que tarde colapsaremos el Distrito Oriental de Aguablanca convirtiéndolo en sifón del desarrollo urbanístico de Pance. Funesto derecho adquirido en favor de terratenientes que difícilmente cederían rectificando a sus propios beneficios los cuales fueron inexplicablemente aprobados por el Concejo y la Alcaldía