La tarea de un nuevo Alcalde y su Director del DAGMA es aumentar el nivel de concientización de la ciudadanía de la necesidad de preservar nuestros parques y así se extienda en la ciudad una mancha verde.
La tarea de un nuevo Alcalde y su Director del DAGMA es aumentar el nivel de concientización de la ciudadanía de la necesidad de preservar nuestros parques y así se extienda en la ciudad una mancha verde. Deberá constituirse como punto de partida de esta tarea un Alcalde Cívico para las zonas verdes o crear una Comisión Cívica Adhoc que asesores a la administración municipal en la defensa y cuido de parques y zonas verdes o porque no , entregarle a la Sociedad de Mejoras Publicas esta labor para que cumpla sus centenarias funciones . Asó la ciudadanía llegará a entender en un proceso de mediano plazo que los parques y las zonas verdes son públicas a quererlos como propios, pero no a disfrutarlos como propios.
La defensa que hace la comunidad de la hermosa zona verde de recreación activa y pasiva de la Urbanizacion El Ingenio es encomiable, así como en la mayoría de los barrios de estratos medios y altos ,como Versalles, San Fernando, El Limonar, La Flora , etc; pero en los sectores populares el Municipio ha sido su primer enemigo , pues las zonas verdes las ha convertido en escuelas, guarderías, etc. Y que decir de las Juntas de Accion Comunal que las convierten en parqueaderos públicos con servicios privados o en negocios particulares. Debemos volver al sentido de pertenencia del barrio ,como unidad comunal y desde allí trabajar la búsqueda de respeto a nuestro patrimonio ambiental y al civismo ciudadano. Por ello hacemos votos para que esto cambie, con un Alcalde independiente, que piense más en la ciudad que en su futuro político y ejerza el liderazgo municipal con visión futurista.
La labor de la Cámara de Comercio de Cali en la preservación de las zonas verdes del Rio Cali debe destacarse y seguirse apoyando, pues le imprime un carácter cívico a tan importante gestión social y ambiental.
Hacemos nuestras las palabras de una Caleña y Psicóloga Mónica Tovar en Holanda. “De todos modos, debemos estar empeñados en recuperar ese civismo que se nos extravió por el mal comportamiento. Podemos empezar con las buenas maneras en la casa, en la calle, en el trabajo.
Cuidando con devoción nuestras zonas verdes, pues el deterioro de nuestro entorno significa una muerte cruel y lenta. Tenemos la certeza de que será un buen negocio. Los caleños raizales debemos dar el ejemplo de esa buena conducta de la cual hicimos gala. Nuestra primera tarea será mantener limpia la ciudad.
De allí en adelante lograremos nuestro propósito de revivir una virtud por la cual nos elogiaban aquí y fuera de las fronteras. A ello le agregamos, de paso, la solidaridad, que también ha sido nuestra marca de fábrica”.