La noticia política de la semana se centró en la decisión del Cabildo Municipal de archivar el Proyecto de Acuerdo presentado por el Alcalde Rodrigo Guerrero, que establecería unas vigencias futuras para pagar gastos de funcionamiento del Municipio de Cali (Seguros, Vigilancia, Gasolina, Aseo, etc.). Todo porque existe una gran mayoría de Concejales que acompañaron al candidato Guerrero, los perdedores se sumaron al gobierno, pero lenta y progresivamente en 10 meses se ha sentido un tufillo a oposición, porque la Administración Municipal no ha estado proclive a negociar contratos y prebendas burocráticas en favor de los Concejales.
El gobierno les desapareció el programa de guardas cívicos donde existían cientos de cuotas políticas y dejó sin contratar más de mil supernumerarios. Esto ha originado que el Concejo asuma su papel de control político y la función de estudiar minuciosamente las iniciativas municipales, lo que tiene en jaque al gobierno de la ciudad
Consultados varios Concejales de varias tendencias, unos que negaron la iniciativa y otros que la apoyaron, se podría concluir que como Judas la mayoría niega tener mala relación con el Alcalde y de una u otra manera justifican la decisión.
Los Concejales nerviosos….
Algunos ediles están asustados porque pareciera que existiera una orden de esculcarles su vida pública y privada, ponerlos en evidencia o confrontarlos en los organismos de control para que les revisen el patrimonio, sus actuaciones pasadas en el Concejo y que algunos pasaron de barrios populares a vivir en viviendas de Ciudad Jardín o en las parcelaciones de Pance. Ya por lo menos empezaron con el cabildante Carlos Pinilla en razón a que se le considera en capo del Concejo y quien tiene la última palabra en las grandes decisiones de la corporación administrativa.
Los que estarían en la mira de algunos medios de comunicación para ponerlos en evidencia, serían:
José Fernando Gil Ingeniero Civil con trayectoria en congregaciones religiosas.
Fernando Tamayo comunicador y político de profesión
Albeiro Echeverry líder de barrio dedicado a la parte social de la `política
Harvey Mosquera dirigente comunitario, quien está en el Concejo por decisión de su jefe Milton Castrillón.
Carlos Pinilla medico de profesión y con solvencia económica familiar.
A este grupo de Concejales en la observación pública se le sumaría el ex candidato a la Alcaldía Milton Castrillón, quien es considerado como el dirigente que más azuza al Concejo contra la Administración del Alcalde Guerrero.
¿Por qué contrataca el gobierno?
La derrota infligida por 13 Concejales de un Proyecto de Acuerdo importante para la administración no es la causa de la ruptura, es un pulso de 10 meses que no le ha permitido a Alcalde avanzar en su obra de gobierno y lo tiene sometido a los últimos lugares de imagen pública entre los Alcaldes del país.
De entrada Rodrigo Guerrero quería facultades excepcionales para reformar el Municipio de Cali y la coalición del Concejo no se lo permitió. Recordemos que e Congreso si le dio facultades a el Presidente Santos para reformar la estructura de la Nación y recientemente el Gobernador Ubeimar Delgado pudo reformar administrativamente el Departamento, gracias a unas facultades de la Asamblea del Valle.
Planteó igualmente la necesidad de reformar la salud pública y las Eses, pero los “mandamases” del cabildo se lo impidieron. Y que decir de la escisión del componente de Telecomunicaciones de EMCALI, que ha estado en la agenda de la ciudad y la falta de gobernabilidad con el Concejo no le ha permitido que radique este proyecto.
Ya los Concejales se habían hecho sentir en el Proyecto de Acuerdo para capitalizar a Invest Pacific, entidad de derecho privado, que no fue apoyada desde el Cabildo.
Le sobran razones al gobierno del Alcalde Rodrigo Guerrero de buscar una conciliación de agenda, sin deponer sus principios de transparencia en el manejo de los recursos públicos. Pero como ésta estrategia no ha dado resultado, los múltiples contactos empresariales, gremiales y en los grandes medios de comunicación, han propuesto desarrollar un enfrentamiento sistemático con algunos Concejales, eso si los puso asustados y nerviosos.
Observemos lo que dicen algunos Concejales respecto a:
Por qué se hundió el proyecto de vigencias futuras para gastos de funcionamiento y cómo es la relación hoy Concejo- Alcalde
Carlos Pinilla: Pedimos que se nos diera informe la póliza de seguros, cuanto es el deducible; el gobierno no estimó conveniente informar eso, sino que a raíz de una presión de los Concejales de la Comisión salió aprobado en primer debate y por eso el segundo debate el Concejo tomó la decisión de hundir el proyecto.
En cuanto a la relación con el Alcalde, nos la llevamos muy bien, no tenemos ningún inconveniente, pero nosotros somos un organismo independiente y tomamos las decisiones no basándonos en si somos amigos o enemigos, tomamos las decisiones según las bases y argumentos que nos presenten y la conveniencia de los proyectos para la ciudad.
Fabio Arroyabe: En el segundo debate tomo la decisión de no votar a favor porque todavía hay muchas dudas que no se han resuelto, ejemplo:
a) Las fotocopias nos van a salir más caras, cuando la escala demuestra algo diferente, nunca se respondió porque o si era así, no se aclaró.
b) Seguros, el aseguramiento planteado por el Director de Desarrollo Administrativo, debe haber una explicación desde lo social si es contundente o no, si es necesario.
c) Muchas personas jurídicas, abogados nos llamaron a nosotros y nos dijeron que tuviéramos mucho cuidado porque las vigencias ordinarias para funcionamiento supuestamente no se pueden realizan.
Es una relación de control político donde cada proyecto que llegue tenemos que verlo a fondo para poder encontrar dificultad o por el contrario los beneficios.
Harvy Mosquera: El Concejal Harvy Mosquera, votó negativo por considerar que no contaba con las justificaciones técnicas, jurídicas y financieras.
La relación con el Alcalde es buena, hoy por hoy no hay relaciones rotas con el Alcalde.
Jhon Jairo Hoyos: Voté a favor.
La relación con el Alcalde más que excelente es optima,
José Uriel Rojas: Votó a favor.
Mi relación con el Alcalde es buena.
Noralba García: Hay pronunciamiento de funcionamiento, según la ley las vigencias futuras no se deben invertir en ese tipo de gastos.
Los medios de comunicación están enviando un mensaje equivocado, no existe ningún tipo de enemistad con la administración, creo que deben tener intereses ocultos y esta es la imagen que quieren mostrar algunos ó buscan presionar por los proyectos que van a presentar.
Patricia Molina: No estuvo en el debate de plenaria.
La relación es buena, pero pienso que la relación Concejo- Administración debe ser dentro del marco político.
José F. Gil: Las vigencias futuras no deben utilizarse como gastos de funcionamiento, ese es un cambio que ha tenido la Contraloría.
Las relaciones del Concejo con la Administración no podrían estar mejor, no se puede concebir que haya un gobierno que pretenda que el Concejo no estudie, no analice, no delibere y no proponga.
Amparo Gutiérrez: En lo que me concierne, el no haber votado como pretendían es sencillo, jurídicamente las leyes orgánicas priman sobre las ordinarias, hay q ser cuidadoso con que verdad y cómo se iba a beneficiar la ciudad de Cali con dichas vigencias.
No estamos divididos como Concejales, cada persona hace su juicio y es serio en sus posiciones, no se puede cuestionar por esa razón.
Definitivamente los Concejales en sus reuniones privadas hablan una cosa, en la plenaria hicieron otra y durante todo el año han mantenido una guerra fría con el gobierno municipal del Alcalde Rodrigo Guerrero. Las respuestas claramente indican lo débiles que están los Concejales como miembros de la primera corporación administrativa de la ciudad. La prueba es una sola ya la tienen los centenares de seguidores políticos que transmiten la posición personal de sus jefes cabildantes y no es otra que la de estar enfrentados a un gobierno que olvidó la clase política.
No es si no hablar con la mayoría de los comuneros y comunales que son más de 1.000 y sobre quienes los Concejales ejercen una jerarquía política, todos ellos rajan del Alcalde y su gabinete de una manera despiadada.
Igualmente la posición de los Concejales es clara en su actuación administrativa y política de estar enfrentados al Alcalde, por ello cuando tiran la piedra y esconden la mano; es decir, ninguno reconoce la oposición, proyecta su nerviosismo y su debilidad en el contexto municipal.