La estatua de Sebastián de Belalcázar, fundador de Santiago de Cali, ubicada en el oeste de la ciudad, fue derribada en la mañana de este miércoles en el marco del paro nacional convocado por centrales obreras, indígenas, estudiantes y diferentes sectores sociales.
¿Quiénes derribaron la estatua? Hasta el momento no hay una explicación clara de las autoridades, pero extraoficialmente voceros de la comunidad indígena Misak, con sede en Cauca, pero que en las últimas horas llegaron en caravana a Cali, señalaron que este acto hace parte de un proceso de limpieza histórica contra el genocidio.
Esta misma comunidad tumbó el monumento de Sebastián de Belalcázar en Popayán, capital del Cauca, el pasado 16 de septiembre de 2020. En aquella ocasión alegaron que se trataba de un juicio histórico contra el colonizador, a quien acusan de asesinatos, violaciones y genocidio.
“Este juicio lo enmarcamos dentro de un compromiso que tenemos frente a la memoria colectiva de nuestra sangre, razón por la cual estamos convocados a reescribir la historia liberándonos de toda huella producto de la colonialidad del saber”, señaló el comunicado de la comunidad Misak.
Desde muy temprano en Cali se adelantaron las concentraciones en los puntos definidos, principalmente en Sameco, Puerto Rellena y la Universidad del Valle, donde hay concentración de al menos dos mil indígenas que llegaron del departamento del Cauca.
Por estas concentraciones, el Sistema Masivo de Occidente, MIO, principal medio de transporte colectivo de la ciudad, tiene su operación afectada y en algunos puntos suspendida.
Las autoridades aún no se han pronunciado sobre posibles confrontaciones entre manifestantes y la fuerza pública, pese a que varios buses articulados del sistema han sido vandalizados.