
Por Benjamín Barney Caldas
Arquitecto de la Universidad de los Andes con maestría en historia de la Universidad del Valle. Ha sido docente en Univalle y la San Buenaventura y la Javeriana de Cali, y continua siéndolo en el Taller Internacional de Cartagena, de los Andes, y en la Escuela de arquitectura y diseño, Isthmus, en Panamá. Miembro de la Sociedad Colombiana de Arquitectos, la Sociedad de Mejoras Públicas de Cali y la Fundación Salmona. Escribe en Caliescribe.com desde 2011.

El cruce del nuevo eje vial entre Yumbo y Jamundí, prolongable a Santander de Quilichao y Pereira, propuesto por un grupo de profesionales adjunto a la SMP, a lo largo de la vieja vía férrea, con el par vial de la Av. Colombia y la Cl. 4º Oeste, a lado y lado del rió Cali, continuado por la Cr, 1º, y sus prolongaciones a Palmira al este y Buenaventura al oeste, a la altura de la Estación y el Terminal de buses interurbanos, sería el cruce vial más importante de Cali.
Y, como ya se ha sugerido en este espacio y en ¿Ciudad? de El País, en las viejas instalaciones de la Licorera podría haber un centro regional de espectáculos, con hoteles, unido al centro histórico de la ciudad por el par vial del río Cali, y con las bodegas del ferrocarril y Molinos Titán, con sus gnoradas posibilidades, y con la Base Aérea, pensada, con lago y todo, como el gran parque de Cali y su región. Y convertir el Cementerio Central en un espacio de esparcimiento, como en las grandes ciudades.
Sería el centro geográfico y simbólico de Cali, de su área metropolitana de hecho, y del sistema de ciudades del valle del río Cauca, de gran importancia para que no se concentre más su población en Cali

Sería el centro geográfico y simbólico de Cali, de su área metropolitana de hecho, y del sistema de ciudades del valle del río Cauca, de gran importancia para que no se concentre más su población en Cali. Y se conformaría un distrito central ampliado, incluyendo el Centro tradicional, aprovechando lo de la creación de “localidades” de su nueva condición de Distrito Especial, tan mal concebido y tan parcialmente analizado, ya que sus aspecto territorial, urbano y arquitectónico se suele menospreciar.
Junto con un transporte público integrado (tren, buses, taxis, autos, motos, bicicletas, peatones) a lo largo del eje vial propuesto, necesario debido al cambio climático. El tren de cercanías por una vía férrea doble, rápido entre municipios y lento en el perímetro urbano, y estaciones en cada uno de los principales cruces con el nuevo eje vial, que permitan conexiones transversales con la ciudad mediante buses de plataforma baja desde sencillos paraderos, y con tarifas según recorrido y una tarjeta única.
Y la autopista urbana propuesta debe tener peaje automático y dos calzadas de tres carriles cada una, con entradas y salidas al par vial de las calles 25 y 26, también de tres carriles cada una, antes y después de los principales cruces transversales sobre el nuevo eje vial. Y amplios y llanos andenes arborizados y una ciclovía de doble sentido a cada lado, junto con una pertinente asignación de usos del suelo en las manzanas aledañas ya que a su largo hay muchos lotes y construcciones abandonadas.

Al lado de las principales vías que cruzan el corredor habrá estaciones del tren de cercanías y se ampliarían los andenes de los puentes actuales; o junto a los pasos que habría que construir por debajo de las vías, según la topografía; o a nivel hundiendo la autopista urbana. Y quedan entre el corredor férreo propiamente dicho y las otras vías propuestas, varias y amplias zonas verdes lineales y algunas, como en las dos muy amplias curvas del recorrido, las que permiten conformar verdaderos parques.
Y acompañar el nuevo eje vial con construcciones de tres pisos conformando una plataforma común y con pórtico, sobre la cual podrá haber torres retrocedidas y aisladas
Igual se proponen varias centralidades peatonales, con centros comerciales, escuelas, colegios, centros deportivos y gubernamentales. Y acompañar el nuevo eje vial con construcciones de tres pisos conformando una plataforma común y con pórtico, sobre la cual podrá haber torres retrocedidas y aisladas de diferentes alturas según cada sector. Y en las manzanas aledañas, hoy medio desocupadas, hacer vivienda y oficinas en altura que no cortarían las brisas ni las vistas hacia o desde la cordillera.