¿Le ha pasado que quiere descargar un archivo pero no está seguro si este incluye código malicioso? Próximamente llegará a Windows 10 una nueva función, llamada Windows Sandbox, que le permitirá abrir archivos que no sean fiables sin temor a una afectación en el sistema.
La función activa un entorno de escritorio aislado y temporal en el que se puede ejecutar cualquier software sin que haya un impacto duradero en el equipo. Según informó Microsoft, cualquier software instalado en esta interfaz de pruebas no sale de allí y no puede afectar al equipo pues una vez se cierra el Sandbox los archivos se eliminan permanentemente.
La opción está disponible para Windows 10 Pro y Enterprise y entre los requisitos necesarios para utilizar la característica se encuentran contar con al menos 4 GB de RAM (aunque Microsoft recomienda que sean 8 GB), al menos 1 GB de espacio libre en el disco y 2 núcleos de CPU.
Para usar esta opción, debe ir al menú de activar y desactivar características del sistema y buscar la opción Windows Sandbox.
Por otro lado, Microsoft también informó que la actualización de Windows 10, lanzada en octubre, ya está disponible para todos los usuarios en descarga manual. El gigante tecnológico había suspendido el despliegue luego de identificar una serie de errores que hacía que se borraran los archivos de los dispositivos. Para instalar la nueva versión debe ‘Buscar actualizaciones’ a través de Windows Update.